You are now viewing Poringa in Spanish.
Switch to English

Fin de semana con Belén y Sofi (parte 4)

La tarde pasó y se hizo la noche. Después de la garchada de la siestita nos habíamos vuelto a dormir, pero al ratito nos levantamos todos, yo me fui a duchar y Sofi vino conmigo. No garchamos, pero nos tocamos y nos chupamos un poco.

- ¿Estás contenta de haberte decidido a venir?

- ¡Obvio!. Esto viene buenísimo.

Dijo eso y me dio un beso larguísimo. Nos abrazamos y nuestros cuerpos se presionaron. La pija se me empezó a poner dura. Sofi lo notó y la agarró. La envolvió con toda la mano y me la sacudió dos o tres veces y la soltó sin mas. Se dio vuelta y empezó a irse. Cuando estuvo fuera del cuarto de ducha se dio vuelta.

- Mejor guardá fuerza, porque esta noche vas a necesitarla.

Se fue así nomas, se secó y se puso una tanguita de algodón y una remera larga. Belu estaba en la mesa de la cocina, con su computadora. Solo vestía un conjunto de ropa interior tipo deportivo. Sofi se sentó en la mesa y empezaron a hablar. Al poco tiempo, las dos miraron para donde estaba yo y se rieron.

Salí de la ducha, me sequé, me puse un boxer y una remera y me fui a la cocina.

- ¿que onda ustedes?. Ya charlan como si se conocieran de toda la vida.

Sofi miró a Belu y dijo.

- Bueno, nos conocemos bastante bien. ¿verdad?.

Belu se adelantó y le dio un beso en la boca.

Ya eran casi las 21. Salí afuera de la cabaña y llamé a casa. Supuestamente estaba en viaje a un pozo en Neuquén. Todo estaba bien. La llamada duró unos 15 minutos.

Cuando subí a la cabaña, habían bajado la luz. Sofi no estaba a la vista y Belu me agarró de la mano y me dio un beso largo, un beso de esos que no querés que terminen. 

- Vení, sentáte - me dijo y me mostró un sillón.

Me senté en el sillón, Belu me sacó la remera y me puso los brazos sobre los apoyabrazos. De algún lado sacó una cuerda, fina pero fuerte, y me ató las muñecas al sillón. Cuando terminé traté de zafarme y no podía. Belu me dio otro beso largo, giró el sillón para que quedara dando frente a la cama y me sacó el boxer, dejándome desnudo sobre el sillón.

Después de eso, se sacó toda la ropa que tenía puesta, hizo un bollito con la tanga y me lo pasó sobre la nariz. Después de eso, se fue para el lado del baño, caminando despacio.

Pasaron unos minutos y seguía solo, de repente aparecieron Sofi y Belu desde el baño.

Las dos estaban vestidas. Tenían vestidos ajustados, sandalias de taco aguja.

Sofi avanzó primero y se paró delante mío, entre el sillón y la cama, pero ni se detuvo a verme. Se quedó mirando a Belén. 

Belén se acercó hacia ella y al encontrarse, justo frente a mi, empezaron a besarse. Las lenguas de ambas recorrían la boca de la otra, las manos buscaban lugres donde agarrarse. Después de unos momentos de besarse de frente, Belu bajó el cierre del vestido de Sofi y muy despacio y con cuidado, se lo bajó hasta el piso.

La vista era infartante. Sofi tenía puesto un juego de lencería blanco. Corpiño, tanga y un arnés de tiras finas de color blanco que le marcaban la cola hermosamente. El remate eran unas sandalias abiertas de taco aguja con tiritas que subían por sus piernas y se ataban.

Las dos chicas siguieron besándose y ahora Sofi le sacó el vestido a Belu. El conjunto de Belu era negro. Corpiño, tanga, portaligas y medias, con sandalias negras con pocas tiras y hebillas al tobillo.

Las manos de Sofi recorrieron la cola de Belén hacia la espalda y las de Belu desde la espalda de Sofi hacia su cola.

Yo estaba a full, mi pija estaba durísima, pero no podía ni tocarla.

Las dos siguieron besándose, se miraban a los ojos y, si no las conociera, hubiera asegurado que estaban enamoradas, se miraban con mas que lujuria.

Belu sentó a Sofi en la cama y se abalanzó sobre ella. Las manos y los besos seguían. Las manos hábiles de Belu ya le habían sacado el corpiño a Sofi y sus hermosas tetas estaban al aire. Belu pasó rápido a la acción y se puso a chuparle las tetas a Sofi. Sofi abajo, Belu arriba. Mientras Belu le chupaba las tetas, Sofi estiró sus brazos y le sacó el corpiño a Belén. Entre las tetas chupadas y las tetas colgantes yo estaba extasiado.

Las chicas se dieron vuelta y fue el turno de Sofi de chupar las tetas. Se puso en cuatro sobre ella y Belu se relajó, colocando sus brazos sobre la cabeza, mientras sentía la lengua y los labios de Sofi en sus pezones.

Así estuvieron un ratito, hasta que Sofi empezó a bajar por la pancita de Belu con besitos y lengüetazos. Llegó hasta la tanguita y se la acó despacito. Belu subió su cola, para facilitar la tarea y Sofi se la sacó despacio, aprovechando para acariciar las piernas desde los muslos hasta los tobillos. Con la entrepierna libre de obstáculos, Sofi se acomodó y fue llevando su boca despacio hasta la conchita de Belu. Iba besando la cara interna de las piernas y se detuvo en los muslos de Belu unos segundos, pasándole la lengua muy despacio. LA cara de placer de Belu era suprema. 

El primer lengüetazo fue evidente. Belu arqueó la espalda y abrió grande la boca. La lengua de Sofi estaba apenas tocando los labios de Belu, que con sus manos ayudaba a separar los pliegues, de forma de facilitar el acceso a sus partes mas suculentas.

Sofi entró directo y empezó a chuparle la concha con constancia y energía. Desde donde yo me encontraba no llegaba a ver todo, pero era evidente que Belu la estaba pasando mas que bien y que Sofi sabía lo que hacía.  Su lengua se movía casi siempre hacia arriba y cada dos o tres chupadas su boca se posaba sobre el clítoris y lo succionaba un poco.

No se en que momento, pero pude darme cuenta que Sofi, además de todo lo anterior, estaba metiéndole un dedo.

Belu estaba extasiada y no tardó en tener el primer orgasmo de la noche. Le tomó un momento recuperarse y durante ese lapso de tiempo Sofi subió a besarla y acariciarla.

Belu volvió a darla vuelta. Ahora era Sofi la que estaba de espaldas. Se dieron unos besos, pero Belu se fue rápido hacia abajo. Le chupó un poco las tetas y luego siguió hacia la entrepierna. La tanga de Sofi voló con la misma velocidad. Belu tomó uno de los pies de Sofi y empezó a besarlo con los zapatos puestos. Le pasó la lengua por los deditos y empezó a subir hacia sus tobillos. Sofi tenía las piernas bien abiertas y estaba tocándose mientras Belu iba besándola a la altura de las rodillas. Con una mano se estaba frotando ella misma y con la otra se tocaba una teta, apretándose el pezón.

Belu no perdió tiempo y viendo que todo estaba listo y lubricado se zambulló hacia la conchita. La lengua entró con energía, haciendo ruidos y succionando. Sofi había sido suave y tranquila. Belu le estaba asaltando la concha. Sofi se retorcía, mirando hacia Belu y sobándose ambas tetas con las manos. Belu insistió, pero al cabo de un minuto la dio vuelta, dejándola en cuatro, con las tetas colgando.

Belu siguió chupándole la entrepierna desde atrás, lengüeteando desde bien adelante y terminando mas allá del culito de Sofi.

Cada tercera o cuarta pasada de lengua, se quedaba un poco mas de tiempo en el ano, hasta que al final, le dedicó toda su energía.

Sofi volvió a frotarse el clítoris mientras Belu le dedicaba su energía a su culito.

Yo estaba que explotaba, con mi pija mas dura que un poste de cemento y sin poder tocarme.

Belu alternaba la lengua y los dedos y al cabo de unos minutos Sofi estuvo lista. Se acercó al cajón dela mesa de luz y tomó un plug que había en ese lugar y se lo puso.

En cuento hubo terminado con eso, Sofi se incorporó y se volvieron a besar. Belu se acostó boca abajo en la cama y Sofi empezó a devolverle el favor anal. Con dos dedos le exploraba la concha, mientras que con la lengua repasaba el agujerito posterior. Los dedos de Sofi salieron bien lubricados de la concha de Belén y fueron directo al culito. Del mismo cajon apareció otro plug y terminó firmemente colocado en el recto de Belén.

Ambas estaban ya completamente desnudas, excepto por los zapatos, el portaligas de Belén y el arnés de tiritas blancas de Sofi.

Volvieron a besarse en la cama y se acomodaron para lamerse mutuamente. Belén abajo y Sofi arriba. Al principio fue suave, pero rápidamente empezaron a aumentar el ritmo de las chupadas. Sofi volvió a acabar y apoyó su cabeza contra la pancita de Belu. En cuanto recuperó el aliento retomó las chupadas a Belu, haciéndola acabar, también.

Las dos se acomodaron y se daban besitos suaves por todo el cuerpo. 

Sofi se paró primero y vino hacia mi. Atrás estaba Belu. Se arrodillaron frente a mi y empezaron a acercarse a mi pija, pero no la tocaban. Belu me la agarraba, me la pajeaba un par de veces y la soltaba. Sofi se la puso en la boca, la succionó un poco y la dejó. Me estaban volviendo loco.

- Tengo una idea - les dije - Ustedes me sueltan y les rompo el orto a las dos.

- ¿Y si te quedás ahí toda la noche y el orto a Sofi se lo rompo yo? - Belu desafiaba.

- ¿Y si yo te lo rompo primero? - retrucó Sofi.

- Chicas, por favor, me va a explotar la pija.

Sofi la miró a Belu y le dio un beso largo. Por un momento pensé que se habían olvidado de mi nuevamente.

Belén se separó de golpe de Sofi, me miró y dijo:

- Basta, necesito una pija que me parta al medio.

Belu me desató una mano y Sofi la otra.

Me paré y agarré a Belu con fuerza y la llevé hasta la cama, la puse en cuatro y se la mandé hasta el fondo de la concha.

- Cogéme fuerte - decía Belén.

Empecé a darle con fuerza. Sofi estaba al lado mío, sobándose las lolas.

- Ponéte al lado, en cuatro vos también.

Sofi se puso a la izquierda de Belu y se abrió la concha con los dedos.

Sin dejar de darle a Belén, le metí los dedos en la concha a Sofi y con el pulgar le moví el plug hacia los costados.

Me salí de Belu y la ensarté a Sofi, otra vez me puse a darle con fuerza. Con la otra mano, empecé a a pajear a Belu, mientras le apretaba el plug.

Estaba extasiado con la vista y recordando el espectáculo deestas dos hmbras teniendo sexo entre ellas, cuando Sofi empezó a gemir por el orgasmo que estaba teniendo. Cuando terminó me volví a poner detrás de Belén, Sofi se desplomó sobre el sillón.

Belu se dio vuelta y me miró:

- Llenáme la concha de leche, por favor.

- No - le dije - este lechazo te lo vas a tragar hasta la última gota.

Empecé a darle fuerte, penetraciones profundas y otras cortas, pero siempre con fuerza. Belu empezó a gemir y acabó nuevamente. Yo estaba ya muy cerca.

- Preparáte Belu.

Belén se movió y la saqué. Ella se arrodilló y puso la boca sobre mi pija. Mientras yo me pajeaba ella succionaba mi glande y me hizo acabar con mucha fuerza. Me vine abundantemente en su boca y ella no dejó caer ni un poquito.

Cuando terminé, ella se fue a donde estaba Sofi y se besaron, compartiendo mi leche.

Necesitaba recuperarme, porque todavía había dos culos para romper esta noche.

0 comentarios - Fin de semana con Belén y Sofi (parte 4)