⚠️ Relato 100% ficticio. Esto esuna fantasía sexual entre dos hombres chubby (gorditos). Contiene contenidoexplícito: sexo anal, mamadas, leche, gemidos, sudor, y amor por los cuerposgrandes.
Era día caluroso, pero no nos importó. Nos metimos al cuartodel motel sin prender el aire acondicionado. Queríamos sudar. Queríamosolernos. Queríamos sentir que las panzas nos rebotaban con cada embestida.
Jonathan se quitó la camiseta apenas cerró la puerta. Supanza colgaba, brillante, y yo me lamí los labios. Hoy lo quería todo de él: susudor, su culo, su voz, su leche. Y lo iba a tener.
Se acostó en la cama, boca arriba, con las piernas abiertasy el cuerpo ya húmedo del calor. Me quité todo, dejé que mi panza colgaralibre, me subí sobre él. Nuestras pieles se tocaron y fue como si el aire secortara. Sudábamos desde antes de cogernos.
Pasé mi lengua por su cuello, bajé por su pecho lleno devello mojado, hasta su ombligo. Él jadeaba, me miraba con las pupilasdilatadas, con la verga palpitando sin que la tocara.
—Quiero sentirte —me dijo—, pero sin prisa. Quiero que mellenes lento.
Lo puse de lado. Le besé la nuca. Deslicé mi verga calienteentre sus nalgas sudadas, buscando su hoyo, ya húmedo, ya listo. Cuando loencontré, no entré de golpe. Me quedé ahí, respirando en su oreja.
—¿Estás listo?
—Más que nunca.
Empujé. Su cuerpo tembló. La cama crujió. Nuestras panzas sejuntaron..
Lo cogí lento primero, dejando que sintiera cada centímetro.Después más fuerte, más rítmico, haciendo que los gemidos se mezclaran con elrechinar del colchón y el golpeteo de nuestras carnes.
Él se tocaba mientras lo llenaba. Cada vez que entraba másprofundo, su hoyo hacía un sonido húmedo, delicioso. El cuarto olía a sexo, acalor, a sudor limpio y a ganas acumuladas.
—Dámela toda —me suplicó—. Lléname.
Me corrí con un gemido fuerte, hundido hasta el fondo,sintiendo cómo su hoyo palpitaba y tragaba todo. Mi leche caliente lo llenómientras su cuerpo se estremecía. Nos quedamos pegados, respirando fuerte.
Pero bueno, eso es todo por hoy, síganme, den puntos, favoritos, comenten y todo eso, recuerden que subo post CASI todos los viernes. Nos vemos en el siguiente post, adiós.
Sobre los grupos de Whats, que mucha gente me ha estado preguntando, creo que Poringa ya no me deja publicarlos, pero si quieren unirse, pueden mandarme mensaje directo
Era día caluroso, pero no nos importó. Nos metimos al cuartodel motel sin prender el aire acondicionado. Queríamos sudar. Queríamosolernos. Queríamos sentir que las panzas nos rebotaban con cada embestida.
Jonathan se quitó la camiseta apenas cerró la puerta. Supanza colgaba, brillante, y yo me lamí los labios. Hoy lo quería todo de él: susudor, su culo, su voz, su leche. Y lo iba a tener.
Se acostó en la cama, boca arriba, con las piernas abiertasy el cuerpo ya húmedo del calor. Me quité todo, dejé que mi panza colgaralibre, me subí sobre él. Nuestras pieles se tocaron y fue como si el aire secortara. Sudábamos desde antes de cogernos.
Pasé mi lengua por su cuello, bajé por su pecho lleno devello mojado, hasta su ombligo. Él jadeaba, me miraba con las pupilasdilatadas, con la verga palpitando sin que la tocara.
—Quiero sentirte —me dijo—, pero sin prisa. Quiero que mellenes lento.
Lo puse de lado. Le besé la nuca. Deslicé mi verga calienteentre sus nalgas sudadas, buscando su hoyo, ya húmedo, ya listo. Cuando loencontré, no entré de golpe. Me quedé ahí, respirando en su oreja.
—¿Estás listo?
—Más que nunca.
Empujé. Su cuerpo tembló. La cama crujió. Nuestras panzas sejuntaron..
Lo cogí lento primero, dejando que sintiera cada centímetro.Después más fuerte, más rítmico, haciendo que los gemidos se mezclaran con elrechinar del colchón y el golpeteo de nuestras carnes.
Él se tocaba mientras lo llenaba. Cada vez que entraba másprofundo, su hoyo hacía un sonido húmedo, delicioso. El cuarto olía a sexo, acalor, a sudor limpio y a ganas acumuladas.
—Dámela toda —me suplicó—. Lléname.
Me corrí con un gemido fuerte, hundido hasta el fondo,sintiendo cómo su hoyo palpitaba y tragaba todo. Mi leche caliente lo llenómientras su cuerpo se estremecía. Nos quedamos pegados, respirando fuerte.
Pero bueno, eso es todo por hoy, síganme, den puntos, favoritos, comenten y todo eso, recuerden que subo post CASI todos los viernes. Nos vemos en el siguiente post, adiós.
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1 comentarios - Fantasía de dos chubby gays Parte 4