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esposa y madre muy caliente soy

Mi estado civil es casi separada , tengo una hija, y mi edad actual son 25 años. Me considero una mujer alegre, simpática, positiva pero seria para mis cosas. Sexualmente aunque me cueste decirlo soy muy apasionada por no decir muy caliente, para mi en la cama o en el sexo, cuando uno se entrega a alguien se da en cuerpo y alma. Por lo tanto, para mi no hay límites , en el sexo me están empezando a gustar las cosas fuertes, un poquito sádicas. Como todos tengo mis fantasías y una de ellas es tener sexo con más de un hombre, dos o más,con muchos hombres se podria decir , porque imagino y te exploten sin compasión, solo de imaginarlo se me moja el colaless. Para terminar mi presentación, me gusta vestir bien, me encanta verme bien, abuso de la ropa pequeña, ajustada y algo transparente. 

Todo empezó por mi necesidad laboral  ya que con mi  actual trabajo mucho no alcanza, eran cerca de las 18:00, cuando entré a dicha entrevista. El entrevistador era un hombre alto, de 1.80 o algo más, contextura gruesa, de piel morena, unos ojos claros preciosos, con una mirada que seducía a cualquier mujer, súper simpático y alegre, con unos 40 años aprox., de edad. 

La entrevista empezó como todas, mi presentación y por parte de él, de la empresa y las necesidades de contratar personal, a medida que se iba desarrollando la entrevista, el hombre que estaba sentado detrás del escritorio, se para y se pone delante de mi, sentándose sobre su escritorio, sentí una sensación extraña que no puedo describir, como estaba sentada mi vista quedó a la altura de su pantalón cuando él apoyo su trasero sobre el escritorio, era difícil poder mirarlo a los ojos porque al bajar la vista chocaba con su pantalón, el cual a todo esto se notaba que guardaba algo interesante debajo de él, aunque lo que guardaba no me preocupaba mayormente, me incomodaba que estuviera a la altura de mis ojos. En un momento él me pide mi mano, me la envuelve con sus grandes manos, me dice que me calmé que esté tranquila, que las entrevistas son así, no me molestaba la entrevista le iba a decir, sino que me molestaba la vista que estaba a la altura de mis ojos que era su pantalón. En eso que seguimos conversando con una de mis manos en sus manos, no quiero aseverar si fue intencional o no, pero de pronto hace que mi mano se apoye a la altura de su miembro, me asusté la quería sacar pero tampoco lo quería hacer, opte por la última decisión, la dejé porque me agradaba como sentía su pija , se sentía grueso y grande,

El hombre sigue conversando como si nada, en cambio yo me dedique a sentir su pija bajo de mi mano, a todo esto ya no sabia que le respondía porque estaba mi mente en lo que tenía bajo mi mano. Él actuaba en forma normal, natural como si nada pasara para mí no era lo mismo, estaba algo nerviosa pero también me gustaba lo que sentía bajo mi mano. De pronto se para, me dio rabia que lo hiciera, pero a la vez también me gustó porque cuando se puso de pie, mi mano recorrió afortunadamente gran parte de ese paquete que guardaba bajo ese pantalón, lo que me hizo pensar de que tamaño es realmente. Se da unas vueltas alrededor de su oficina hasta que se me acerca, se pone detrás de mi, en eso siento sus manos en mis hombros, me dice “estas tensa samantha déjame hacerte algo de masaje”, como no iba a estar tensa, ni en mis momentos mas lujuriosos se me había pensado en pensar en un pene tan grande como se sentía el garrote de él. Sus manos se empiezan a mover hábilmente entre mi nuca, mi cuello y mi espalda, su masaje era placentero y relajador, me gusta su destreza. 

Ese día recuerdo perfectamente que vestía una blusa, una mini a menos de medio muslo y zapatos de tacón, debajo un sostén de encaje de media copa y una tanga hilo dental pequeñito como a mi me gustan, bien chiquitos, también de encaje, muy bonito y coqueto. 

El hombre que seguía con su masaje, me estaba originándome una oleada de relajación y excitación que no puedo describir a pesar del tiempo que ha pasado, era exquisito sentir sus movimientos en mi nuca, mi cuello y mis hombros, en eso siento que su manos se van hacia mis pechos, lo iba a detener pero su forma como me masajea me seduce, hasta ese momento no se me había pasado en la mente que todo podía terminar como fue, pero sus hábiles manos me originaban un placer sin igual, por lo que dejo que tome mis pechos en su manos, me los aprieta con fuerza pero suave sobre mi ropa una y otra vez, luego su manos sueltan mis pechos y empieza abrir mi blusa, desabrocha tres botones, me la abre y deja mi sostén y mis pechos a la vista, mete sus manos por dentro del sostén y saca mis pechos y vuelve nuevamente a masajearme, el placer era exquisito, ahora agarra mis pechos con fuerza, los apretó entre sus manos, me salio un uuufff como respuesta a su apretón, en eso toma mis pezones y tira de él hasta causarme un pequeño  dolor, el cual mas que molestarme me agradó, el hombre me tenia semi desnuda a su disposición y yo no hacia nada para detenerlo creo que nunca se me pasó por la mente hacer eso. A todo esto la entrevista había pasado a otro ámbito con su masaje. Se detiene, se da vuelta y se pone delante de mi, me mira a los ojos, acerca su boca a la mía y nos besamos unos segundos, mi reacción fue instintiva no quiero decir que lo quería besar o sí, bueno no se, pero su forma de besar era maravillosa, el hombre sabia hacer sentir un gran besó en la boca, mientras nos besábamos me saca la blusa de entre la mini, después de besarnos, termina de desabrochar la blusa y me la saca, me saca el sostén, yo roja de vergüenza y excitación estaba con todo mi torso desnudo a su vista, el hombre toma mis pechos los apretó con mas fuerza que las otras veces, gemí de placer, se dio cuenta que el dolor bien dado me agradaba, en eso tira de mi pezón con fuerza pero apretándolo siento el doble de dolor, de su boca solo salían palabras que alaban mi belleza, aunque me hubiera gustado que me dijera cosas mas fuertes en ese instante pero él me hacía derretirme de placer con su forma de actuar. 

Cuando sentí su boca en mis pechos besándolos, pasando su lengua, mordiéndolos, apretando mi pezón con sus dientes de una manera que nunca me lo había hecho mi esposo casi pierdo el equilibrio por el placer ocasionado. Mientras su boca se divertía con mis pechos una de sus manos manoseaba mi culo, de una manera como si me quisiera arrancármelo, apretaba cada nalgas con una fuerza que me hacia levantarme de punta. De pronto para, me da vuelta se arrodilla y me empieza a desabrochar y bajar el cierre de la mini, esta cae al suelo por su tirón. No se si será cierto lo que dijo pero su expresión fue, “tienes un culo de puta”, agrega “tiene un lindo culo, me gusta como la tanga se pierde en tu cola ,me empieza a amasar las nalgas el hombre sabe lo que hace, me das unas buenas nalgadas que mas que dolerme me agradan, es rico como se siente esos golpes secos, fuertes y llenos que chocan con mi cachetes, en eso se pone de pie y me dice al oído “siempre he sabido que las que usan ese tipo de tanga tan diminuto son unas prostitutas”, esas palabras me calentaron mucho mas, cuando me da vuelta y ve la forma de mi tanga por delante, comenta “no tengo duda de que seas una prostituta, me gusta lo chiquito que es, sabes me dice soy fetichista y me encanta las tangas de las putas como tu, chiquito coqueto”. 

El me empieza a tocar por el contorno de mi tanga hasta llegar a mi entre piernas y me manosea, suave tan delicadamente que me hizo templar, era tan exquisitamente lo que me hacia que me obligó a abrirme de piernas,  En eso me ordena arrodillarme, se me acerca y quedé con mi cara a la altura de su pene, hago lo que corresponde hacer en esa posición, le bajo el pantalón después de desabrochárselo y bajarle el cierre, ahora se ve mas perfectamente a través de su calzoncillo su gran pija, se ve grande, cuando le bajo su calzoncillo, no cabe duda de que es grande, pero muy grande, no quiero ser mentirosa pero ese tronco debe medir mas de 20 cms., fácilmente cuando esta en toda su erección, de hecho cuando lo agarre con mis dos manos, no solo la cabeza quedaba afuera. 

Tomo su masculinidad semi erecto con mis manos, me excita lo grueso de su tronco y lo grande de su cabeza, tiro de la tela para atrás, wawww me asusta pero me gusta, se nota que es poderoso y potente, ojalá mi marido tuviera ese pedazo de carne, eso no lo pensé en ese instante, lo digo ahora porque no solo se lo chuparía todo el día. Me acerco a su cabeza, le doy un beso, otro y otro, luego saco mi lengua y se la empiezo a pasar por esa cabeza que cada vez me gusta mas, mientras mis manos lo manosean a largo de todo su extensión hasta sus grandes huevos, que estaban llenos de leche, él hombre mientras yo empezaba hacer mi trabajo, se desnuda completamente y me empieza tratar como a mi me gusta con palabras fuertes y obscenas, “mmm putita, que rico como vas...”, sigo pasando mi lengua por esa cabeza, ahora abro mi boca golosa todo lo que puedo y me meto toda esa cabeza, cierro mi boca, lo siento grande, muevo la lengua como puedo dentro de mi boca para tocar la cabeza de ese penazo, siento un temblor del hombre, saco ese asesino a través de un chupón, lo pillé desprevenido, su única reacción fue quitarme su matador y decirme “perra como comes” y eso que apenas me había metido la cabeza en mi boca, después de eso todo fue un espectáculo, verlo a él como se movía por consecuencia de mi trabajo, se lo chupe, me metí todo lo que pude en mi boca varias veces, le comí los huevos con mi boca y lengua. 

El hombre estaba casi loco y desesperado, hasta que acabo en mi boca, no les puedo mentir ni exagerar las cosas, pero el hombre tenia cualquier leche guardada, , me tome toda su leche, era espesa, de olor fuerte pero no desagradable,Cuando termine de limpiar su belleza, no se si es común en un hombre de su edad, pero ya estaba listo, con su fierro tieso duro, hasta lo vi mas grande. Debo ser sincera, si bien sabia que el único destino de ese pene ahora era mi vagina, . El hombre me pone de pie, me saca  la tanga , se sienta en la silla, con su tronco en la mano y me dice “ven putita siéntate solita quiero ver lo perra que eres”, me tira la mano y me acerca, abro mis piernas, siento la cabeza de su pija sobre mi vagina, es grande, separo mis labios y me empiezo a sentar grito, el hombre me dice que lo haga no mas, que nadie me va a escuchar siento que me estoy clavando una estaca enorme, él ríe y me dice: “eso putita, vez que te lo puedes comer todo solita”, cuando siento toda su cabeza dentro de mi y siento como me va abriendo, me da la impresión que mi concha quiere devorárselo y comer cada vez mas ese pedazo y yo también, llego a la base de su tronco, le digo me lo comí todo, él ríe en tono irónico y me dice “pero si eres una prostituta como no te lo vas a comer todo, m ehacia sentir mas calientes cuando me decia prostituta

Me ordena subir y bajar, lo hago despacio, me empiezo a acostumbrar es rico, me gusta como me siento y como lo siento, me llena, me cuesta moverme pero es rico, el hombre no deja de insultarme, me manosea y maltrata mis pechos, también utiliza su boca, los besa los muerdes etc., entre tantas cosas juntas no pude mas y acabé mi primer orgasmo gritando, desesperada, hasta lloré, no se cuanto tiempo mas estuve sobre ese garrote hasta que él me ordena parar, me saca de su verga, se para, me ordena sentarme en su escritorio, me levanta las piernas, mira mi zorra y me dice, “mmmmm, tienes una linda vagina, puta, me encantan las perras que tienen los labios como los tuyos, se ve que te dan duro, confiésame eres una prostituta verdad dime cuanto cobras, tienes una vagina deliciosa y apretadita” en eso me mira a lo ojos y me dice “puta” y me clava, ahora su mete y saca en mi  vagina es terrible, sumado el trato que le daba a mi pechos y como tocaba mi clítoris, esta vez llegué mas rápido al orgasmo que antes, el hombre todo el tiempo que me culeo en el escritorio no dejaba de insultarme y por primera vez, cuando me dice perra infiel, me sentí tan gata y trola que yo le digo  que si que era una perra infiel, una puta, una ramera una prostituta y que me culeara hasta dejarme muerta, el hombre ríe y me dice “sabia que eras una prostituta,  solo le escuche decir hasta ahí, porque me centre en mi segundo orgasmo, que al igual que el anterior lo acabe gritando y desesperada como nunca. 

Él cansado de la posición que me tenía, se detiene, me ordena ponerme en el suelo boca arriba, me ordena tomarme de las piernas y dejo toda mi  vagina, que la sentía abierta como nunca, a su disposición, él se acerca con el pene en su mano y veo como me lo va metiendo cada vez mas adentro de mi hasta que veo que su pelvis choca con la mía, , decía algo como: “eso puta, perra caliente, apuesto que tu esposo no sabes lo caliente que eres perra estúpida” primera vez que me gustaba que me insultara en relación a mi estado civil y que lo hiciera una y otra vez, lo encontraba morbosamente excitante, me pone en cuatro y me empieza a hacer la cola .

, en el momento en que estaba por tener  otro orgasmo siento como su pene adquiere mas volumen y percibo que su leche va recorriendo ese conducto largo grueso y caliente hasta explotar en su cabeza, saliendo con una fuerza inusual para mi, el hombre se pego bien dentro de mi antes de acabar dejándome toda su leche en mi interior, sentir el choque de su orgasmo con el mío, me desesperó tanto que me hizo sentir un placer unico



Al salir de ahí ya eran cerca de las 21:00 hora. Cuando estaba acostada, no dejaba de pensar en ese hombre, en eso mi marido me dice que le gustaría hacer el amor, le dije que no quería culear, que estaba cansada aunque eso no me importaba mucho porque igual lo hubiera hecho, como les dije antes no me gusta mentir, esa noche igual tenia deseo de hacerlo, solo que mi mente pensaba en la pija de ese hombre y eso me hacia mojarme, fue tanta la calentura que después de asegurarme que mi marido se había dormido bien, me saqué el hilo dental del baby doll que tenía puesto y me masturbe hasta acabar, pobre esposo mío dormía mientras su amada esposa o la prostituta esposa tenia ahora, acababa en un orgasmo pensando y dedicándoselo a otro hombre que no era él. Aun hombre que apenas le supe el nombre. Pensé en ese hombre durante dos días, recordaba especialmente en como se movía con su tremendo palo dentro de mí y eso era suficiente para hacerme mojar, cuando quedaba sola en casa, después que se iba mi esposo y mi hija dormia , me iba a mi cama, me recostaba, me sacaba  la pequeña tanga y terminaba masturbándome hasta llegar al orgasmo.me encanto que me cogieran de esa forma y como me gusta sentirme tan deseada 

4 comentarios - esposa y madre muy caliente soy

333354 +1
Excelente relato me dejaste la verga grande y parada saludos dejo puntos 10
Nostros2
Bien relato lastima q no hay fotos
elporongudoarg +1
Quiero hacerte mi putiesclava y convertirte en mi depósito de mi leche