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Luchona del jardín cogiendo con un papi

Mí nombre es Karen tengo 20 años y un nene de 5, siempre me gustó disfrutar del sexo como podrán darse cuenta, eso llevo a qué, bueno no sepa con certeza quien es el padre del nene. Soy una piba de barrio, y aún con mí nene siempre trato de tener mis escapadas para tener sexo con algún hombre que trate de conquistarme por así decirlo, que no es una tarea muy difícil. A veces cuando no tengo mucho tiempo, trato de ingeniárselas igualmente para sacarme las ganas, esto quiere decir que puedo tener sexo en la madrugada en lugares como en el patio de mí casa, así no más de parados, o en algún recoveco de la cocina mientras mí hijo duerme. Cuando tengo ganas, no mido mucho las consecuencias en ese momento lo único que me importa es sacarlas y punto. Tener un hijo tan pronto hizo que mí cuerpo no sea tan perfecto, pero lo que me falta por ese lado, lo compenso con una actitud que nadie resiste, si quiero estar con alguien hago todo lo posible por concretarlo, aunque tenga pareja.

Al final de la historia, les voy a dejar unas fotos para que me conozcan

Esto último pasó me pasó con Lucas, el padre de un compañerito de mí nene, tengo buena relación con su mujer pero bueno un día pisó el palito con una situación en el jardín que tenía como protagonista al revoltoso de mí nene, y le agarre cierta bronca, así que me dio el último empujón que me faltaba para que su marido sea mí próxima víctima. Siempre me vestí tratando de robar las miradas y sabía que una de ellas era de Lucas, nunca se sobrepasó ni yo tampoco, pero sabía que sus ojos se le clavaban en mí culo, así que tenía que aprovecharlo. Hacía un tiempo, otro papi pero este soltero había sido víctima de un pete que le hice en su auto digno de un cuadro, solo por tener la gentileza de llevarme hasta mí casa un día de lluvia que lleve a mí hijo al jardín, era muy amigo de Lucas así que sabía que le iba a contar su experiencia.

Su hijo aún seguía viniendo a mí casa, porque aunque yo haya discutido con su madre los nenes eran muy amigos y ellos no tenían la culpa. El día anterior su hijo vino a jugar, hacía mucho calor asique estuvieron en la pileta todo el día, les hice unas hamburguesas, disfrutaron todo el dia, pero se olvidó unas cosas y al otro día como soy muy colgada me olvidé de llevárselas, en la puerta del jardín le dije a Lucas que a la tarde se las llevaba, pero me dijo que no me haga problema y que tenía que ir a buscar un repuesto para su auto y después las pasaba a buscar, así no iba cargada hasta el jardín después, claro que acepte y al mismo tiempo, mí tanga se humedeció, era la oportunidad yo lo tenía claro.

Había lavado algo de ropa asique cuando llegue la destendí y la dejé sobre la mesa, me fui a duchar, al salir pasaron 5 minutos y de repente una bocina, era el. Le grité que pase, y salí de la pieza en ojotas, un short corto, muy corto, tanto que se me veía más de ¼ de nalga y claro me marcaba bien la raya del culo, y una remera sin corpiño. Le ofrecí algo para tomar porque hacía mucho calor, lo invité a sentarse y me disculpé por el desorden de la mesa. Cuando me acerque vi que miraba la ropa, no le di mucha importancia pero hablábamos y medio como que se distraía mirando al bulto de ropa, cuando mire yo también para ver cuál era su curiosidad, eran mis tangas, había 3 o 4, obvio que eran chicas tangas normales pienso yo, pero él estaba hipnotizado.

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K: Perdón no me di cuenta, que verguenza.

Dije tratando de pararme para agarrarlas.

L: No pasa nada, están lindas son sexys

K: Ay boludo son tangas, tampoco tanto. Tu mujer debe usar así también.

L: Ni cerca, es más aburrida, sabes hace cuanto que no veo una tanga así ?

K: Como que no usa ? Así como ?

L: No usa así, ni cerca. Así tan chiquitas, tan sexys, tan de..

K: Esas te parece que son chiquitas ? Tan que ?

L: Sí me parecen chiquitas, tan de puta, no me calienta las que usa ella

K: Si esas te parecen chiquitas, no me quiero ni imaginar

L: Que ? Usas más chiquitas ?

K: JAJAJAJA

L: Dale boluda, que no te querés imaginar ?

K: Llegas a ver la que tengo ahora te caes de culo JAJAJA

L:Como es ?

K: Como te voy a decir ? Tenés mujer vos

L: Dale decime no seas así

K: Adelante es un triángulito chiquito, después todo lo demás es un hilo chiquito y arriba de la cola tiene un moñito, toda roja

L: Uff Lo que te debe quedar eso, mostrame

K: No te parece mucho ?
Me hacía la que no quería, pero tenía unas ganas..

L: Por favor, queda acá. Me lo trato de imaginar y no puedo

K: Solo un poquito, pero queda acá

Me paré cerca de él y me di vuelta, desabroché el short y empecé a mover la cadera de un lado para otro, tratando de bajarlo hasta que empezó a verse el moñito apenas. Junte las piernas inclinando el cuerpo hacia adelante parando la cola y mirándolo fijo a lo ojos, él no estaba interesado en mí cara tenía los ojos clavados en mí culo y en la forma que la tanga se escondía en lo profundo de los cachetes para salir a lo último, terminando en el moño, como si fuera un regalo, y para él lo era. Me tomo por la cintura y me acerco a él mientras se arrodillaba, contempló todo lo que tenía enfrente, abrió mis nalgas y cuando encontró el hilo en el fondo, suspiro y metió su nariz, me olía el culo y cada vez se ponía más loco, intentaba entrar más y más profundo. Me corrió la tanga , separó los cachetes de tal forma que me dolio asique agarre su pelo y sentí su lengua en el orto, que placer, me agache para que el culo se me abra más y pueda meter más su lengua, el estaba en un trance chupando y lenguetiando.

Estoy contando esto intentando ser lo menos grotesca y ordinaria posible, pero ya me cansé, les voy a escribir como yo hablo.

Ahora me tocaba a mí, lo hice levantar y la que se arrodilló fui yo, solo le baje un poco la bermuda y el boxer, tenia un matorral de pelos largos negros y duros el hijo de puta, pero a mí me gustaban así, bien hombres nada de depiladitos, no saben tremenda poronga tenía con unos huevos negros tan grandes y pesados que se me hacía agua la boca “Hace cuánto no acabará este tipo ? La mujer ni un pete le debe hacer”, lo agarre del culo y empecé a comerle toda la poronga, tengo una garganta muy aguantadora, asique me cogía sola la boca, sus huevos golpeaban duro con mí pera y sus pelos se me metían por la nariz y me molestaban los ojos, cuando mí cara chocaba contra su cuerpo sentía los pelos pinchandome. Se agarraba de la mesa y disfrutaba, putiandome.

L: Que bien que tiras la goma hija de puta
Me encanta que me hablen así bien ordinarios.

K: Te gusta papi ? Tremenda verga tenés

L: Me contó Javi que le chupaste re bien la pija en el auto, pero no imaginé que tanto así

K: A vos te la chupo con más ganas, igual estaba rica su pija

L: Que puta que sos

K: Re puta soy, ¿te contó que me llenó la boca de leche ?

L: Si me dijo

K: Me la tomé toda sabías ?

L: Uff no sabía, conmigo vas a hacer lo mismo ? Mí mujer nunca me deja

K: Es una tarada esa, si querés que me la tome me vas a tener que obligar

Cuando le dije eso, le hice pucherito con la boca con la mejor cara de puta que pude.

Me levanto, me tiró contra la mesa boca abajo, me corrió la tanga y se la enredó en la mano, me hizo doler la conchita por lo bruto y de un saque me metió la verga al fondo de la concha, me queje “Ay me duele” peor se puso a darme fuerte “Ay no para para me duele mucho, es muy grande” obvio que era parte del juego aunque era verdad que me dolía.

L: Que lindo orto tenés hija de puta

No conteste, se escupió el dedo gordo y me lo colo, que sensacion tan linda tener una poronga grande en la concha y un terrible dedo en el orto, me relaje empezó a sacarlo y meterlo, desenfrenadamente, me estaba rompiendo el orto literalmente con el dedo solamente. No paraba era una bestia, cada vez que chocaba contra mí culo parecía que retumbaba toda la casa, estaba re caliente tener a un macho así, tan desesperado por cogerme, sentir sus pelos tocándome y que encima era el marido de una pelotuda con la que no me llevaba bien, me hacía gozar más todavía, apreté los dientes y mis manos con fuerza y empecé a acabar, gemía mientras le llenaba toda la verga de mí juguito.

Estaba orgulloso de haberme hecho acabar de esa manera, y también estaba llegando a su punto limite claramente venía el esperado baño de leche. Saco su verga y se corrió un metro “vení arrodillate”, yo seguía apoyada en la mesa, sin moverme, con las tetas apoyadas, lo mire por sobre mí hombro.

K: Para que ?

L: Te vas a tomar toda la leche

K: No, no quiero. Tirala en el piso

L: Vení y arrodíllate te dije.

Me agarró de los pelos de una forma muy violenta, su mano casi que me agarraba la cabeza completa y con la otra mano me tiró desde la tanga, hizo un ruido como que se descocio un poco, y me hizo arrodillar.

L: Chupa, abrí la boca.

K: No, no quiero sali.

Aún sosteniéndome del pelo, se agachó acercando su cara a la mía, la escupió y me dio un cachetazo. “Te dije que chupes y que abras la boca”. Lo mire con cara de pobrecita, abrí solo un poco la boca.

L: Abrí grande

Abrí solo un poco más, y recibí otro cachetazo. “Te dije que abras grande o querés otra cachetada?” La termine de abrir y me metió la poronga hasta la garganta de un saque, me sostenía la cabeza en el aire prácticamente lo único que le importaba era cogerme la boca y vaciar sus huevos ahí, sus pelos volvieron a pincharme toda la cara.

L: Que te pensas ? Que le ibas a tomar la leche al otro salame y a mí no ? Puta de mierda

No podía contestar.

L: Te voy a ahogar con toda la leche que tengo en los huevos. Pendeja trola

Pude sacar su verga de mí boca, pero ahora me puse sus huevos y un manojo de pelos.

L: Así dale petera, así, seguí dale dale.

K: Dámela papi

L: Ahí viene

Sí diría que fue como tomarse un vaso de leche, creo que sería poco, la cantidad de semen que sacó ese hombre era increíble parecía que me iba a salir por la nariz, estaba intentando toser y tampoco podía por su verga.

L: Aguanta, aguanta ahí.

Tomé todo el semen que pude, la verdad no era rico, pero no deje una gota. Cuando termino se subió la ropa y agarró las cosas de su nene, mientras yo seguía arrodillada, retomando el aliento.

L: Pasado mañana, voy a llevar yo a mi nene al jardín. Después te digo dónde te espero, para que vengas a tirarme la goma al auto trola.

Yo lo mire toda sucia y aún arrodillada, asentí con la cabeza, aún juntando algunas gotas de semen para tragarlas, y se fue. Me quedé re caliente, fui a la ducha y me acosté a descansar, entre dormida me acordé de la cogida que me habían dado, tenía algo en la boca que me molestaba intenté sacarlo y era un pelo de él. Me calenté tanto, que me empecé a tocar, me moje automáticamente, abrí el cajón y saqué un enorme consolador, prácticamente como la verga que me había comido recién, me hice tremenda paja y me dormí.

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