Las hormonas enloquecidas, jugaban a mí favor. Mis suspiros ya eran más grandes mientras la tanga me ahorcaba el orto cuando estiraba los elásticos hacia arriba parando la colita mirándome al espejo, era una escena encantadora.
Ameritaba un paso más... Miraba al rededor, y mientras caía la ducha me metí desnudo , me frotaba el jabón por el orto afeitado y suave y gemia como loca. Debo haber pasado como media hora en el baño casa día.
Necesitaba un paso más allá, y pude divisar el secador, no el de pelo si no el de piso. Que siempre está acompañado a un palo de madera suave finamente lijado , punta redondeada. Que era perfecto . Lo mire, y lo traje hacia mí. . instintivamente se me ocurrió petear lo, lo comía suavemente hacia movimientos de lengua y cara de puta mirándome al espejo anticipándome a lo puta que sería luego. Peteando automáticamente la cola se paraba y la pija prendida fuego. Escupí la punta y pensé... Si lo pongo a dónde topa queda el ángulo justo para meterme lo. Por supuesto que lo escupí me pase el dedo...
Para lo que indudablemente no voy a mentir, ya hice las prácticas previas con el dedo meñique, entonces cuando me voy sentando como si fuera algo que supiera hacer, sentía como que se iba dando paso muy despacito hacia dentro de mí, con la textura se sentía muy suave y traté de hacerlo entrar hasta donde más pude. se ha repetido durante muchísimo tiempo, pero ahora corría la tanga por el costado me miraba mientras entraba y salía y cabalgaba eso y preguntándome en mi cabeza que mi colita debía ser disfrutada, era lo único que tenía en la mente, solamente eso pensaba porque afortunado sería que me la pueda coger mis instintos de p*** me dominaban así me estaba convirtiendo en eso en lo que soy en lo que me gusta hacer pero prefiero lo sabes no decirlo los cuatro vientos sino mantenerlo en el animato porque así creo que me pongo mucho más p*** y lo disfruto mucho más. Si tienen alguna pregunta quieren que siga más relato simplemente lo dicen en los comentarios si, quiere hablar conmigo me mandan un mensaje privado
Ameritaba un paso más... Miraba al rededor, y mientras caía la ducha me metí desnudo , me frotaba el jabón por el orto afeitado y suave y gemia como loca. Debo haber pasado como media hora en el baño casa día.
Necesitaba un paso más allá, y pude divisar el secador, no el de pelo si no el de piso. Que siempre está acompañado a un palo de madera suave finamente lijado , punta redondeada. Que era perfecto . Lo mire, y lo traje hacia mí. . instintivamente se me ocurrió petear lo, lo comía suavemente hacia movimientos de lengua y cara de puta mirándome al espejo anticipándome a lo puta que sería luego. Peteando automáticamente la cola se paraba y la pija prendida fuego. Escupí la punta y pensé... Si lo pongo a dónde topa queda el ángulo justo para meterme lo. Por supuesto que lo escupí me pase el dedo...
Para lo que indudablemente no voy a mentir, ya hice las prácticas previas con el dedo meñique, entonces cuando me voy sentando como si fuera algo que supiera hacer, sentía como que se iba dando paso muy despacito hacia dentro de mí, con la textura se sentía muy suave y traté de hacerlo entrar hasta donde más pude. se ha repetido durante muchísimo tiempo, pero ahora corría la tanga por el costado me miraba mientras entraba y salía y cabalgaba eso y preguntándome en mi cabeza que mi colita debía ser disfrutada, era lo único que tenía en la mente, solamente eso pensaba porque afortunado sería que me la pueda coger mis instintos de p*** me dominaban así me estaba convirtiendo en eso en lo que soy en lo que me gusta hacer pero prefiero lo sabes no decirlo los cuatro vientos sino mantenerlo en el animato porque así creo que me pongo mucho más p*** y lo disfruto mucho más. Si tienen alguna pregunta quieren que siga más relato simplemente lo dicen en los comentarios si, quiere hablar conmigo me mandan un mensaje privado
0 comentarios - Use una tanga y me enloquecí, esa es la verdad parte 2.