Hay circunstancias que resultan difíciles de explicar; cosas que en algún momento se creían inalcanzables, pero que, por una u otra razón, terminan sucediendo. A veces esos episodios dejan consecuencias negativas. Lo raro es que, aun sabiendo de ello y habiendo experimentado lo negativo, cuando la vida vuelve a presentarnos la misma situación, volvemos a caer en ella, repitiendo lo mismo; es mas, lo hacemos por la atracción a lo que esta prohibido o por el morbo, sin pensar en lo que vendrá después.
Como ya lo he dicho en mi primer relato, ya hace bastantes años, pude cumplir una de las fantasías que la mayoría de los hombres buscamos; me pude coger a mi cuñada. Claro que, como ya lo he relatado, después de haberme culeado a mi cuñada, las cosas no terminaron como lo hubiera querido, tampoco puedo quejarme.
Es decir, si me dan a elegir, en aquel momento hubiera querido seguir cogiendo a Maca y seguir mi relación con María, pero bueno, las cosas se presentaron de otra forma.
Después de habernos descubierto, María nos hizo prometer que con Maca ya no seguiríamos teniendo relaciones; y que las cosas sigan tal y cual eran. Así, nadie aparte de los tres se debería de enterar lo sucedido; eso si, nos dejo que tuviéramos nuestra despedida, la cual la hemos aprovechado.
Pasaron muchos años, cumplimos nuestra promesa. Con Maca no hemos vuelto a hablar del tema, tampoco hubo insinuaciones ni nada por el estilo; solamente la relación de cuñados, como si nada hubiera pasado entre nosotros.
Con Maria formamos una familia, tuvimos dos hijos y compramos nuestra casa. En todos estos años con Maria fuimos experimentando los temas sexuales, sobre todo aquellos en los que ella no se sentía cómoda. Sin han leído mis relatos anteriores sabrán a lo que me refiero.
Si puedo decir que después de insistir y con mucha paciencia, tuvimos sexo anal. Pude hacerle el culo a Maria, al final ese culito que tanto me calienta fue mio. Actualmente cogemos dos o tres veces por semana; Maria me sigue chupando la pija como hace mas de diez años, me sigue dejando loco con la forma en la que me chupa, en ocasiones le lleno la boquita de leche y se la traga toda; ya que, si bien hoy ya es común que le acabe en la boca, no es algo que le termine de gustar, asi que depende de su calentura le termino acabando en su boca cuando ella me lo pide.
Maria sigue siendo una mina hermosa, su cuerpo, pese a haber sido madre sigue siendo espectacular. Actualmente hace gym tres veces por semana; sus tetas, después de los embarazos quedaron un poco mas grandes y sus pezones mas puntiagudos, te dan ganas de lamerlos y morderlos apenas los ves. Su culito, sigue estando bien paradito, con algunas celulitis producto de la edad, pero que lo hacen mas lindo de lo que era. Sigue usando sus tanguitas bien apretadas que se le meten en sus nalgas. Hoy a sus 37 años es una mina que calienta a cualquier hombre; y yo tengo la suerte de cogerla las veces que quiero.
Maca, mi cuñada tambien fue madre, se caso y tuvo dos hijos con Fernando, un tipo que la verdad que cae bastante para el culo. Maca sigue siendo la típica “petisa culona”. Su orto sigue llamando la atención, es mas, puedo decir que hoy día es mas grande que antes, a sus casi cuarenta años se sigue manteniendo en forma. Maca siempre con una personalidad extrovertida, simpática con todos. Por su profesión ya casi no usa ropas ajustadas, si no mas bien se viste mas formal; casi siempre de pantalones de vestir, camisas con blazer o sacos, eso si, su escote sigue llamando la atención, sus tetas siguen firmes y bien paraditas, casi siempre anda con su cabello recogido, lo que hace que quede con una cara tu putita terrible.
Por cuestiones personales, Maca se fue a vivir con Fernando a otra provincia; con Maria continuamos en la misma ciudad de hace mas de diez años, por lo cual, con Maca nos vemos muy cocas veces al año, casi siempre para las fiestas de fin de año o alguna ocasión familiar.
Como dije, con Maca cumplimos nuestra promesa a Maria, no tuvimos mas contacto, seguimos nuestras vidas como si no hubiera pasado nada entre notros, todos estos años fuimos solamente buenos “cuñados”. Eso fue hasta hace unos meses, donde, por cuestiones familiares coincidimos en la casa de mis suegros; y aquí empieza este nuevo relato, una nueva historia con “Maca, mi cuñada”.
La familia de las hermanas estaba invitada al casamiento de una prima en el pueblo de sus padres; con la intención de pasar tiempo juntos decidieron que tanto Maca con su marido e hijos y nosotros con María nos alojemos en la casa de mis suegros; cosa que no era mala idea.
La casa de mis suegros es una casa grande, con tres habitaciones, cada una con su baño privado. La pieza de mis suegros, es la mas grande, después esta la pieza de mi cuñado Marcelo y la otra pieza es la que pertenecía a las hermanas cuando aun vivían con sus padres. En el patio de la casa hay otra pieza, que en realidad era una especie de deposito que con los años la fueron refaccionando para convertirlo en una habitación con todas las comodidades, eso si, no tenia baño.
La casa contaba con un living grande que daba a un pasillo hacia las piezas, la primer pieza era la de mis suegros, la que seguía era la de las hermanitas y la ultima al fondo era la utilizada por mi cuñado. Entre estas dos piezas había un baño común de la casa.
A la derecha del living estaba la cocina, separada por un puerta y sobre la mano izquierda estaba la puerta que daba al patio y al lavadero.
El tema del casamiento fue algo que se fue organizando entre la familia ya hace bastantes meses, es decir tenían todo bien planificado. Habian decidido que en la pieza que quedaba libre dentro de la casa se iba a quedar Maca, Fernando y sus hijos; habían puesto unos colchones mas para sus hijos. En la pieza del patio no quedaríamos Maria, mis hijos y yo.
Se había decidido asi ya Maca y su familia iban a llegar un par de días antes que nosotros, entonces a Maria y a mi no nos quedo otra que quedarnos en la pieza del patio.
El casamiento era en pleno enero, un calo insoportable. La ceremonia por civil se haría un viernes, con un copetín para los invitados al mediodía; al otro dia era la ceremonia por iglesia y la celebración por la noche.
Con Maria organizamos nuestras actividades para ir unos dias antes del casamiento, así llegamos el miércoles a la casa de mis suegros. Maca y su flia. ya estaban desde el finde anterior. Al llegar fuimos recibidos por mis suegros, por Maca, Fernando y mi cuñado Marcelo.
Como dije antes, Maca seguía siendo una hermosa mujer. Estaba vestida con un short y una remera suelta. El shorcito le quedaba hermoso. Seguía conservando una linda cintura en perfecta proporción con sus caderas.
Maca se acerco a saludarme con dos besos. Por la inercia y el abrazo nuestros cuerpos se apretaron. Sentir su perfume, su olor característico me hizo recordarla cuando la tenia desnuda para mi y podía besarla por todo su cuerpo. El abrazo no duro mas de unos segundos, Maca se aparto y siguió como si nada. Saludando y besando a sus sobrinos.
Eran cerca de las 20.30 hs. Bajamos todas nuestras cosas del auto y no acomodamos en la pieza. Todavía no habíamos terminado de organizarnos cuando nuestros suegros nos llamaron para que comamos algo. Durante la cena estuvimos charlando de muchas cosas, risas por sobre todo; buen ambiente. Al terminar de cenar María se entro a bañar, ni bien salió del baño me entre a bañar yo.
Como nuestra pieza no tenia baño privado, ocupábamos el baño de la casa. Esa noche seguimos hablando hasta casi las dos de la madrugada, después todos nos fuimos a dormir.
Los chicos dormían en un colchón grande de dos plazas que estaba en el suelo. Esa noche hacia mucho calor, pese a tener el aire Split encendido debíamos estar destapados para no pasar calor. Con Maria estábamos acostados, cada un con su celular todavía sin poder dormir. Yo tenia solo con un short, debajo no tenia nada, antes de acostarme me había sacado el boxer por el calor. Maria se había acostado con un pijama, de esos que tienen un shorcito y una remerita de tela fina. Por la tela se le marcaban los pezones ya que estaba sin corpiño.
>Que calor de mierda – dijo Maria.
>La verdad que si, esta insoportable.
>Me voy a sacar el short. No aguanto el calor.
María separo sus caderas del colchón y se saco el shorcito del pijama. Tenia una tanguita blanca; esas que tienen el triangulito y a los costados las tiras finitas. Esa tanguita quedaba hermosa entre sus nalgas. Ni bien se volvió a recostar se puso de costado, dándome la espada y sacando un poco su culito hacia mi.
>Epa… linda tanguita amor – le dije mientras le apoyaba una mano en la nalga y le daba un beso en su hombro.
> Hey. Quieto con esa mano – me contestó – con un sonrisa sin dejar de ver su teléfono.
> ¿Cómo me pedis eso?. Tapate entones, porque si seguis con tu culo entangado me vas a calentar – Mientras le seguía dando besitos por el hombro y cuello.
> ¿Vos decis? – dijo Maria – y pego mas su culo contra mi.
Maria apoyo su teléfono en la mesita y miro hacia arriba. Con una mano se agarro una nalga y apenas la levanto.
>¿Te sigue calentando este culito? –
Asi como estábamos nos besamos, ella de costado mirando hacia arriba y yo detrás de ella; le comí la boca, nuestras lenguas se cruzaban. Maria apoyo bien su culo contra mi pija. Una de mis manos la puse sobre el triangulito de tela que cubria su conchita y la aprete hacia mi. El beso fue bastante intenso, pero no duro mas de un minuto. A mi ya se me estaba parando la pija.
> Amor… están los chicos – dijo Maria – dándome unos piquitos.
Mientras, yo busque su conchita con mis dedos. Puse la punta de mis dedos por debajo de la tela de la tanguita, su conchita estaba suave, totalmente depilada. Apenas apoye mis dedos sobre sus labios senti la humedad de su chonchita.
>Enserio amor – decía Maria – Me encanta, pero no podemos.
Se dio vueltas poniéndose boca arriba, por su movimiento yo también me quede de la misma forma. Maria estiro su mano y me agarro la pija por debajo del short. Se sonrió cuando se dio cuenta que no tenia boxer. Por un par de segundos subía y bajaba su mano por el tronco de mi pija; en un momento se fue acomodando y bajando hasta mi pija.
Maria me bajo apenas el elástico del short, lo necesario para que la mitad de mi pija quede por fuera. Me dio un par de besos sobre el glande y después me la chupo unos segundos.
>Listo. Ya tuviste el beso de buenas noches – dijo Maria – mientras volvía a acomodarme el short. Al subir hacia donde yo estaba me miro sonriéndose y me beso.
> Cuando volvamos a casa te voy a compensar estos días – dijo mientras me daba los últimos piquitos ates de acomodarse para dormir.
> Lo único que te pido es que no te pongas mas este tipo de tangas. Si no, no me voy a aguantar hasta llegar a casa – le dije – apretando apenas una de sus tetas.
> Hasta mañana.
Al otro dia, dormimos hasta tarde. No levantamos cerca de las diez de la mañana. Tomamos unos mates con mis suegros y Fernando; mi cuñado Marcelo se había ido a trabajar. Maca y sus hijos estaban en la casa la prima que se iba a casar.
Al mediodía almorzamos los mismos. Maca se había quedado a almorzar en casa de su prima, tenían que terminar de organizar algunas cosas para el evento, y mi cuñado recién volvía de su trabajo a la tarde. Al terminar de almorzar Maria le ayudo a mi suegra a lavar las cosas.
Al terminar, mis suegros le dijeron a Maria para ir a hacer unas compras al supermercado y después pasarían por la casa de Luciana (prima que se iba a casar) para saludarla; cosa que Maria acepto con gusto.
>Amor ¿queres ir con nosotros al super? - me pregunto Maria-
> Paso esta vez. Me voy a pegar un baño y a intentar dormir un rato.
La verdad que los días anteriores andaba mal dormido por temas del trabajo, asi que iba a aprovechar para descansar.
> Anda nomas Negra. Mandale mis saludos a Luciana.
> Ok, me voy con los viejos nomas. Pero vas a tener que llevarle a los chicos a la casa de Luciana. No dejan de molestar con que quieren ir ya.
Me había olvidado de ese pequeño detalle. Mis hijos me pedían para que los llevase con sus primos, los cuales tienen casi la misma edad. En ese momento, Fernando que estaba hablando con mis suegros se ofreció a llevarlos el.
>Si quieren yo los llevo. Igual mas tarde tengo que ir para allá. Lo llevo yo, no te hagas problema Raul.
La verdad que me saco un peso de encima.
> Genial – dijo Maria – y le ordeno a mis hijos a que juntaren sus cosas que ya se iban con el tío.
> Amor, llevo el auto – me dijo Maria – Porque Maca anda en la camioneta de papá.
>Ok, amor – le conteste mientras buscaba mis cosas para bañarme.
A los quince minutos me quede solo en casa de mis suegros, me di un baño de agua fría para sacarme el calor y me fui a acostar, seria cerca de las 14 hs.
No se cuanto tiempo paso. Me desperté con un poco de sed. Agarre el celular y estuve unos quince minutos boludeando. Como tenia sed y ganas de ir al baño me levante y me fui para la casa.
La puerta que daba al patio estaba abierta, entre por la cocina para ir al baño. Al llegar al living y girar hacia el pasillo, me detuve de repente. En el pasillo, sobre la puerta de la última pieza la veo a Maca. Estaba recostada sobre la pared; ella me daba la espalda.
No se había dado cuenta que yo había entrado. Maca estaba con un vestido floreado; esos vestidos sueltos de verano; le llegaba hasta la mitad de sus muslos. Me sorprendió verla asi, se esa forma. Yo seguí caminando hasta el baño; la estaba por saludar, cuando escuché un sonido particular.
Otra vez, casi por instinto me detuve a escuchar. Yo sabia que en la casa no había nadie. Pero casi de inmediato escucho un leve gemido. Agudice mis oídos para prestar atención. Y si, efectivamente se escuchaban gemidos. Eran gemidos de una mujer; eran gemidos suaves, pero reiterados.
Al prestar atención me di cuenta que los gemidos venian de la última pieza, es decir la pieza de mi cuñado. La pieza sobre la cual Maca esta recostada sobre la pared.
Tratando de no hacer el mas mínimo ruido, me fui acercando a donde estaba Maca. Los gemidos seguían y se escuchaban un poco mas fuertes. La puerta de la pieza estaba abierta hasta la mitad. Maca seguía sin percatarse que de que estaba detrás de ella.
Al acercarme mas, llegue casi a un metro de donde estaba Maca. Recién ahí pude mirar hacia adentro de la pieza de donde se escuchaban los gemidos. Cuando me acomodé bien para ver, pude ver a una mina que estaba sobre un tipo, lo estaba cabalgando. Desde donde los estaba mirando no les podía ver la cara a ambos. Tenia la visión de la parte de un somier, la mina estaba desnuda saltando sobre el tipo, los podía ver de costado a ambos.
En un momento el tipo la agarra a la mina de las nalgas y ella se recuesta sobre el. Asi desde mi posición venia como la mina seguía cabalgando y el tipo la agarraba desde el culo. En un momento la chica se levanta, es decir se sienta sobre el tipo mientras seguía cogiendo. Ahí la vi, una mina de tes blanca, con cabello negro. Se acomodo el cabello hacia un lado. En ese momento el tipo estira sus manos y a la agarra las tetas; ella le sujeto las manos con las suyas sobre sus tetas y seguía cabalgando y gimiendo, lo cogía al tipo con un movimiento de sus caderas, no era de arriba hacia abajo, sino que sus caderas se movían de atrás hacia adelante a bastante velocidad. En eso el tipo le suelta las tetas a esta mina y la sostiene desde la cintura. La mina tenia muy lindas tetas, se movían por el movimiento; tetas duritas, grandes, con pezones rosaditos. Los gemidos eran cada vez mas fuertes. La mina le llevo sus dedos a la boca y les paso la lengua mientras miraba al tipo, con esa mano se agarro una de sus tetas y se la apretaba. Por lo que podia ver, la mina tenia lindo cuerpo, no la podía ver bien la cara, la veía de perfil. Por las muecas y los gestos que hacia mientras cogía demostraba que estaba disfrutando de esa culeada.
>Cogeme. Me encanta cuando me coges asi – dijo el tipo.
Pude distinguir la voz claramente. Era la voz de Marcelo, mi cuñado. Es decir, mi cuñado se estaba cogiendo a esta hermosa mina.
Esto no fueron mas de uno o dos minutos. Cuando realmente me doy cuenta de la situación la miro a Maca. Ella seguía sin saber que yo estaba ahí. Ella solamente miraba a la pareja mientras cogían. Mi pija ya estaba casi parada del todo. Sentia mi corazón empezar a latir mas fuerte. Ver a esa mina cogiendo me generaba algo distinto. El morbo de espiar a esa pareja mientras cogía me estaba calentando.
La chica en un momento deja de cabalgar y se baja. Se acuesta boca abajo, es decir se atraviesa sobre el somier. Ahora la veía de cuerpo entero, la mina estaba de espaldas, directo hacia donde estábamos con Maca. Ella misma agarro una almohada y se la puso bajo su vientre. Su culito se levanto un poco. Mi cuñado sin perder tiempo se levanto y se puso detrás de ella.
Con sus manos separo las nalgas de la mina. Podía verle la concha bien mojadita, después empezó a pasarle sus dedos por toda su concha, de arriba hacia abajo, pasando por el agujero del culo. Ahhhhggg – se escucho el gemido de esta mina cuando mi cuñado empezó a chuparle la conchita desde atrás. Ella misma estiro sus brazos y con las manos se abría las nalgas para que mi cuñado le pueda chupar bien la concha.
Mi cuñado se puso de rodillas detrás de la mina, con una mano se agarro la pija, como haciéndose una paja. Sin perder mas tiempo acomodo la pija sobre la conchita de su mina y la empezó a coger otra vez. Aahhhhggg Ahgggggg – solo se escuchaban gemidos de la mina. Asi arrodillado detrás de ella, mi cuñado le pego una cachetada en la nalga. El ruido resalto bastante.
Maca se sobresalto al escuchar el ruido.
>Dale. Dale. Parame el culo amor… - decía Marcelo mientras se cogía a esta mina- Otra nalgadas mas y otra y otra.
Se escuchaba como la mina gemia cada vez mas por las nalgadas que le daba Marcelo.
>Si amor. Cogeme – Haaaagggg – cógeme – no pares que voy a acabar – se escuchó decir a la mina.
Mi cuñado se aparato, se quedo de pie al costado de la cama, de espalda hacia donde estábamos nosotros con Maca. La agarro a la mina de la cintura y la trajo hacia el.
>Ponete en cuarto – le ordeno –
La mina, se puso bien sobre el borde del somier, en cuatro. Apuntaba el orto hacia mi cuñado.
>Cogeme boludo. Dale que ya quiero acabar.
Marcelo, parado como estaba se agarro la pija con una mano; con la otra mano agarro una de las nalgas de su mina y la abría. Le pasaba la pija por toda la concha, de arriba hacia abajo.
>¿Enserio queres que te coja Cami? Como te gusta rogar por pija eh – le dijo mi cuñado-
>Cogeme si… por favor cógeme. Quiero tu pija.-
Con Maca teníamos una vista privilegiada. Marcelo seguía pasándole la pija por la concha a la mina haciendo que ella le pida por favor que la coja.
En ese momento le preste atención a Maca. Estaba con la mano en una de sus tetas, se la apretaba. No emitía ningun ruido. Solamente miraba y se agarraba una de sus tetas.
Hija de puta – pensé – Maca se estaba tacando mientras espiaba a su hermano coger. Mi pija ya estaba dura. Me quería pajear ahí mismo. Pero si lo hacia iba a hacer ruido.
Volvi a mirar hacia adentro de la pieza al escuchar los gemidos de la mina. Marcelo ya la estaba cogiendo otra vez. La tenia en cuatro y la penetraba una y otra vez.
Ahhhhhhhhhgggg – haaaaaagggggggggg – la mina empezo a retorcerse sobre el colchon. Estaba teniendo su orgasmo. Ahhhhhh – dale – no pares – casi gritaba.
Cuando volví a Mirar a Maca tenia ya su teta por fuera del vestido, estaba con la teta al aire. Desde atrás veía como una de sus manos tenia en la zona de su conchita. Se veía su vestido un poco levantado. No podía estar seguro, pero era lo que me imaginaba. Maca no se perdia detalle de lo que pasaba adentro.
Yo me saque la pija por fuera del short. Ya no aguantaba la calentura. El morbo de espiar a la pareja y ver a Maca en la misma situación me dio perder todo tipo de cordura. Agarre mi pija y me empecé a pajear.
La mina ya no gemía. Se movía casi en cámara lenta cogiendo a mi cuñado. Marcelo saco su pija; la concha de la minita estaba muy mojada e hinchada. Al sacar la pija, los labios de la conchita estaban separados y con flujo por todos lados. La mina estiro su mano por dejado y se tocaba la concha.
>Veni Cami. Chupame la pija – dijo Marcelo
En ese momento la mina se levanto y se iba a dar vuelta. Casi instintivamente me corrí unos pasos para atrás; Maca hizo lo mismo. Si la mina se daba vueltas nos iba a ver claramente. Obviamente que se podía armar un quilombo importante si nos encontraba espiándolos.
Cuando Maca se corrió hacia atrás giro su cuerpo. Su cara cambio repentinamente. Se quedo blanca mirándome. Se acomodo el vestido si decir ni una palabra. Apenas tenia abierta su boca, su labio inferior casi que le temblaba. Yo estaba con la pija afuera del short. Le hice la típica seña de silencio con el dedo para que no haga ruido.
Maca no dijo nada, empezó a caminar y paso por al lado mío. Fue hasta la puerta de su pieza y la abrió muy despacio, sin hacer ruido. Ni bien la abrió se metió para adentro. Yo por mi parte me di vuelta y me fui hasta mi pieza. Me olvide de las ganas de mear y de la sed. Me fui sin hacer ruido. Al llegar a la pieza me recosté en la cama, recordaba las imágenes de la mina cogiendo. Se me venia a la mente las tetas de la mina, sus gemidos, su conchita llena de flujos. Tenia todavía la pija dura. En ese momento pensé en Maca; mi cuñada.
¿Qué hacia Maca espiando a su hermano? – pensaba – Capaz era el mismo morbo que sentía yo mientras los espiaba. El tema es que no paraba de pensar. Agarre mi teléfono y le mande un whatsap a Maca.
>Maca ¿todo bien?. Perdón por asustarte.
Paso un rato y Maca ni siquiera había visto el mensaje. Deje mi teléfono por un rato, cuando lo volvi a agarrar veo el doble tilde azul. Maca había visto el mensaje pero no contestaba. Me clavo el visto.
Habrán pasado unos veinte minutos. En eso escuche ruidos dentro de la casa. Igual me quede quieto en la pieza, sin hacer ningún tipo de ruido. Escuchaba la voz de mi cuñado hablar con la mina. Estuvieron un rato dando vueltas. A los 15 minutos escucho que se van. Otra vez la casa en silencio.
>Maca. Contestame. – Pero nada, ninguna respuesta.
Me gano la ansiedad. Me levante y me fui a la casa. Me fui directo hasta la puerta de su pieza. Golpee dos veces y espere. Nada, Maca seguia sin contestar. Volvi a golpear, esta vez un poco mas fuerte.
>Maca. Dale abrime. No voy a dejar de insistir hasta que abras.
Me sorprendio que se abrió la puerta del baño. Maca había abierto la puerta hasta la mitad; estaba adentro.
>¿Qué queres Raúl?
> Hablar – dije –
>No hay nada que hablar. ¿de que queres hablar? – dijo Maca sin mirarme a los ojos –
> Boluda. Estabas espiando a tu hermano mientras garchaba.
> No me hinches las bolas Raul – dijo Maca e intento cerrar la puerta.
Me adelante y no deje que la cerrara. Haciendo un poco de fuerza la abrí y entre al baño con Maca, cerrando la puerta después de entrar.
>Sali de aca forro de mierda – dijo Maca – mirándome fijo. Salí porque te pego con lo primero que veo.
>Tranquila Maca. Espera, no te pongas asi.
>Sali Raul, enserio que te voy a pegar con algo.
Veía la expresión seria de Maca.
>¿Qué te pasa loca de mierda? - le dije – No vengo a decirte ni reclamarte nada. Solo quería saber que hacias. Nada mas.
>¿Y quien sos vos para venir a preguntar lo que yo hago o dejo de hacer?. Dale, correte que quiero salir.
Maca hizo un intento por correrme, pero obviamente no pudo.
>La puta que te pario Raul, correte.
>No te pongas mala – le dije – Pedime por favor y te dejo salir.
>Lavate el culo forro. No pienso pedirte por favor a vos.
>¿Por que te pones asi? – Solo pedi por favor y te vas –
Mas que nada le decía en forma de chiste, porque realmente no entendía por que Maca estaba así de sacada; yo solamente quería descomprimir un poco la situación.
>¿Por que no te vas bien a la mierda y me dejas salir?.
>No entiendo que te pasa loca. Se ve que estas en tus días.
>Callate Raul porque te voy a pegar. No me jodas.
>Si no estas en tus días, no te deben estar atendiendo muy bien. ¿Por qué tanto nervio?
>¿Y a vos que te importa si me atienden bien o no? – Por lo visto vos tampoco estas bien atendido que te andas pajeando espiando a otros coger.
Al escuchar su respuesta no pude evitar sonreir.
> “Vos tampoco estas bien atendido” dijiste. Viste, sabia que por algún lado venia tanta mala onda. ¿Fernando no te anda garchando?
> Callate la boca Raul, no sigas. Dejame salir. Voy a hacer un escandalo que los vecinos van a escuchar.
> Claro, por ahí viene la mano. No te garchan y tenes que andar espiando a los demás que si garchan. Comprate un juguetito cuñada y sacate las ganas con eso, asi te descargas.
Maca no me contesto, me dio una cachetada que sonó bastante fuerte.
>Te dije que me dejes salir.
Obvio que la cachetada no me dolio. Mas que nada fue un dolor emocional. Maca, mi cuñadita en ese momento tenia bronca hacia mi.
>Perdoname Maca. No quise que te pongas asi. Me desubique.
Maca me miraba fijamente; no apartaba sus ojos de los mios. Su respiración era rápida. Verla asi, desprotegida me rompió el corazón. En eso momento se me vinieron a la cabeza las mismas sensaciones que sentí mucho tiempo atrás; no pude aguantarme, me acerque a ella, la tome su ambos lados de su cara y la bese, no pensé en otra cosa.
Maca me aparto no brusquedad.
>¿Qué haces forro? ¿Por qué me besas? – Son un hijo de puta – dijo Maca.
Al ver esta reacción no supe que hacer. Solo la quede mirando.
>¿Por qué me besas hijo de puta? – casi llorando - ¿Por qué ahora?
Esa ultima pregunta me hizo pensar – “¿Por qué ahora?” – No lo entendí.
>No te entiendo Maca.
Maca empezó a llorar y a tirarme manotazos al cuerpo.
>¿Por qué ahora Raul, porque ahora y no antes? – Maca lloraba.
Solamente la abrace y la aprete contra mi cuerpo. Maca de a poco se fue calmando. Sentir que ella se calmaba conmigo me reconforto el alma.
En un momento ella levanto la mirada y nos quedamos mirando. Fueron unos cinco segundo que parecieron eternos. Me acerque y la volvi a besar.
Maca no se movia, sus labios estaban inmóviles. Yo no dejaba de besarla. Fui dando besos cortos por toda su boca. Poco a poco ella fue recibiendo mis besos. De a poco fue moviendo sus labios.
>¿Por qué ahora? – volvió a preguntar –
>No se. La verdad no se. Solo tengo ganas de besarte. No me pude resistir.
>No tenes idea lo que espere una señal tuya – me dijo Maca mientras se apartaba de mi – Te espere años Raul. No podia entender como de un dia para el otro te olvidaste de mi.
>Nunca deje de pensar en vos Maca. Pero me pesaba mas lo que habíamos hecho. No podia dejar de pensar en lo que hubiera pasado. Aparte le dimos nuestra palabra a Maria.
>Solo yo se lo que siente traicionar a mi hermana. No me puedo sacar de la cabeza las palabras que salieron de su boca cuando nos encontró a los dos. Solo por ella me aleje de vos.
Me volví acercar a Maca y nos besamos. Esta vez fue en beso mutuo. Poco a poco el beso fue mas pasional, nuestras lenguas recorrían nuestra bocas. Así como estábamos Maca se pego a mi y me hizo retroceder hasta la puerta. Mis manos fueron directo a sus nalgas. Las aprete por sobre la tela del vestido. Maca me había agarrado por detrás de la nuca, nuestras respiraciones ya eran jadeos.
>No… No… No podemos – dijo Maca – separándose de mi.
>No podemos hacer esto otra vez boludo. Fer, Maria, los chicos. No Raul, no puedo con la culpa – dijo Maca.
>Maca ya pasamos por esto una vez. No te voy a presionar si vos no queres. Pero te aseguro que yo no voy a dejar de pensar en vos.
La solte, me di media vuelta e iba a abrir la puerta para salir. Maca no me dejo. Me agarro del brazo y se tiro sobre mi. Nos besamos nuevamente. Ya no eran besos, nos comíamos la boca, solo dejaba de besarla para darle besos por el cuello. Maca seguía tomándome de la nuca mientras yo la besaba. Mis manos otra vez buscaron su culo, esta vez alce su vestido y la agarre ambas nalgas. Sentir otra vez esas nalgas en mis manos fue increíble. No dejaba de apretarle las nalgas.
Maca por su parte, con su mano libre busco mi pija por debajo del short. Ni bien me la agarro comenzó a pajearme. Ya se escuchan algunos gemidos de Maca. Con una de mis manos empecé a acariciarle la conchita sobre la tela de su bombacha. Mis dedos fueron por debajo de la tela, la conchita de mi cuñada ya estaba muy mojada. Muy dedos resbalaban por sus labios, la empecé a pajear con mis dedos, sin penetrarla.
La deje de besar e hice que se diera vuelta. Maca quedo de espaldas a mi. Asi como estaba volví a tocarle la conchita, corri la tela de su bombachita a un costado y ahora si de apoco la fui penetrando con mis dedos. Maca gemia despacito. Ella sola estiro su mano hacia atrás y busco mi pija. Me bajo el short como pudo, dejando mi pija al aire. Se levanto el vestido en la parte de atrás y se apoyo sobre me pija.
Maca hacia punta de pie para poder subir un poco su conchita. Mi pija quedo entre sus piernas; ella con una de sus manos me acomodo la pija, haciendo que empiece a rozar con el glande su conchita. Saque mis dedos, dejando que me pija sea la que se refriegue por todos sus labios, sus flujos hacían que todo sea mas placentero. Con mis dedos empecé a acariciarle el clítoris. Maca solo gemía y se apoyaba sobre mi, mi pija la refregaba por sus labios en todo lo largo, sin penetrarla.
Sin darme tiempo a nada Maca se dio vueltas. Bajo besando por el pecho y el abdomen hasta llegar a mi pija. Maca empezó a chuparme la pija de forma desesperada, se la comia entera; pasaba la legua a lo largo del toda mi pija, me lamia los huevos y me miraba mientras lo hacia.
Mirándole desde arriba le agarre a Maca de su pelo (lo tenia recogido) y empecé a ser yo quien le daba el ritmo a Maca, le estaba cogiendo la boca como yo quería.
Sin dejar de chuparme Maca fue metiendo mi pija cada vez mas adentro de su boca, cada vez mas y mas… Tenia mas de la mitad de mi pija dentro de su boca.
>Apa cuñada. Esto es nuevo – le dije.
Ver como Maca se tragaba mi pija me estaba dejando loco. Ella sola volvió a hacer lo mismo. Esta vez se prendio con ambas manos de mis nalgas y fue tragando pija poco a poco. No podia dejar de mirar ese espectáculo; tenia a Maca agarrada de los pelos y con mas de media pija metida en su boca. Pero Maca fue por mas y se trago unos centímetros mas de pija. Se quedo quieta con casi toda mi pija en la boca. Podia sentir su garganta en la cabeza de mi pija.
>Putita. como chupas pija hija de puta – le dije –
Maca mi miraba desde abajo. Solo se saco la pija de la boca cuando sintió arcadas. Mi pija salió de su boca con saliva por todo lados. Maca tomo aire un par de veces y otra vez se mando la pija al fondo. Si seguía asi me iba a hacer acabar.
Maca dejo de chuparme la pija y me pajeaba muy despacio, me miraba desde abajo.
>¿Te gusta cuña?. ¿Te gusta como tu cuñada te cupa la pija?
>Si seguis asi te voy a acabar en la garganta putita - le dije –
Maca se paro y nos volvimos a besar. Maca me pajeaba mientras me besaba, yo hacia lo mismo en su conchita, tenia dos dedos que entraban y salían de su concha que tenia sus flujos por todos lados.
Asi, besándonos la lleve hasta el inodoro. La hice ponerse de espaldas a mi. Bajamos la tapa y ella solita subió una de sus piernas, apoyando sobre el inodoro. Maca ya tenia su bombachita corrida hacia un costado. Solo acomode mi pija sobre sus labio y la penetre de una.
Mi pija le entro hasta el fondo en la primer embestida, Maca tenia la concha llena de flujos, mi pija estaba super lubrica por su saliva. Asi la empecé a coger, sin parar.
Ahhhhhgggggggg – aahhhhhhhggg- cógeme cuñado – cógeme – gemia Maca mientras yo la culeaba desde atrás.
Casi le rompo lo tirantes de su vestido, tire hacia abajo para dejar sus tetas al aire. Ni bien pude empecé a sobarle y apretarle las tetas.
Otra vez me estaba culeando a mi cuñada. Otra vez ese cuerpito era mio. No paraba de cogerla, no quería parar, mis manos recorrían cada parte de su cuerpo. Sentía y escuchaba sus gemidos. Maca no se contenía y casi gritaba.
Ella se aparto sacando mi pija de su conchita.
>Sentate cuña… sentate y yo te cojo – me dijo Maca.
Sin dudar me sente sobre la tapa del inodoro. Maca con su vestido todo arrugado sobre su cintura puso sus piernas a cada lado de las mias y se sento sobre mi, de frente. No se había sentado sobre mi pija todavía, asi como estamos volvimos a besarnos, a comernos la boca.
Maca se retiro, como tirándose hacia atrás y con una de sus manos empezo a tocarse la conchita. Sus dedos recorrían sus labios.
>¿Te gusta tenerme asi cuña? – me pregunto Maca mirándome fijo –
>Me encanta. Y no sabes como me calienta Maca – le conteste-
>Vos no tenes idea de las veces que me toque pensando en vos cuña – dijo Maca – haciendo una especie de pucherito con su boquita.
> Ah si. ¿Te tocaste muchas veces? –
> Si cuña. Muchas veces me pajeaba pensando en vos –
La voz con la que me respondia me estaba dejando loco. Maca no dejaba de tocarse la conchita.
>¿Asi que sos pajerita entones? ¿Te gusta colarte los dedos en la conchita pensando en tu cuñado?
>Si Cuña, me encanta. Pero no solo me pajeo la conchita. Tambien me meto mis deditos en el culo pensando en vos.
Ni bien termine de escuchar eso estire mis brazos hasta su culo. Mis dedos buscaron el agujero de su culito. Empece a hacerle círculos sobre el agujero del orto a mi cuñada. Ahhhhhhhhgggggg – Ahhhhhhhhhhg gemia Maca con los ojos cerrados.
Los flujos de su conchita hacían que su cultito tambien este lubricado. No me costo meterle la punta de mis dedos en el orto. Maca movia sus caderas de adelante hacia atras. Seguia con sus dedos pajeandose la conchita y yo con dos dedos en su culito. No era la posición mas comoda, pero no pensaba en nada, solo quería darle placer a Maca.
>¿Y este hermoso culo me extraño? – le pregunte mientras le metia dos dedos en el orto-
> Si, cuñado. Todo mi cuerpo te extraña. Tenia que pajearme y acabar pensando en vos.
>¿Y el guampudo de Fernando no te coge? ¿o te coge mal? – se lo pregunte directo
Maca me miro fijo, pero no me contesto.
>Contame Maca. El boludo este no te coge como a vos te gusta ¿no?
> Puede ser cuña – contesto Maca mientras seguía gimiendo…
Esa frase elevo mi autoestima, me hizo calentar mas de lo que estaba.
> Y ahora que me tenes acá ¿por me no me coges putita? mostrame las ganas que tenes garchar conmigo.
Maca no espero ni un segundo mas, se acomodó bien y se sentó sobre mi pija. Se levanto dos o tres veces mas hasta que mis huevos chocaron con sus labios. Una vez con mi pija bien ensartada Maca me empezó a cabalgar y a gemir.
>Te voy a coger como el guampudo de Fernando no te coge sabes cuña – le dije mientras la agarraba otra vez del pelo y hacia que me mire a los ojos.
> Vos te mereces que te garchen todos los días, que te hagan acabar como vos quieras putita… asi no tenes que andar pajeandote.
> Si cuña, cógeme. cogeme y sacate las ganas conmigo – dijo Maca –
> ¿Tan caliente estabas que tuviste que espiar a tu hermano Maca? – le pregunte mirándole a los ojos mientras ella seguía cabalgando y gimiendo sobre mi.
Como la tenia agarrada de los pelos Maca no puedo esquivarme la mirada.
>No, cuña. No fue a propósito. Se dio sin querer. No soy tan puta.
>Pero te quédaste mirando. ¿Te gusto ver a tu hermanito garcharse a esa mina?
Maca gemia cada vez mas, me cogia saltando sobre mi pija. Otra vez busque el agujero de su culo, dos dedos le entraron muy fácil en el orto. Aggggggggggghhhhhhhhh gimo Maca –
>No, no me gusto… pero no se, no me podia ir.
>Pero si te tocaste la conchita cuña. Yo te vi.
> ¿Y vos? - Me pregunto y me sorprendió - ¿Por qué te quedaste?
>Porque la mina estaba buena. Y por el morbo de espiar a otros mientras garchan.
Saque mis dedos del orto de mi cuñada y me agarre de sus nalgas. Hice que sus movimientos sean mas rapidos, la ayudaba a subir y bajar por mi pija.
Ahhhhhggggggggg – gemia cada vez mas Maca – se prendia por mi nuca para poder moverse.
>Date vuelta. Quiere verte el culo – le dije
Maca se levanto, se dio vueltas y volvió a sentarse sobre mi, esta vez de espaldas.
>Abrite el orto cuña. Mostrame el culito.
Maca con sus manos se abrió las nalgas. Su culo hermoso quedo frente a mi. Enpece a acariciar su esfínter con dos dedos, ni bien los apoye los fui metiendo. Quise poner uno mas y me costo.
>Hayyyyyy – Despacio que me duele – dijo Maca – despacio por favor cuña.
>Me das a decir que el guampudo no te hace el orto? No te puede creer, con semejante culo a su disposición.
Maca no contesto.
>Que hijo de puta este Fernando, no puede no comerse el culo cuña – le decía mientras le colaba dos dedos en el orto.
>¿Y vos hace cuanto no haces un culo? – me pregunto Maca desafiante.
> Hace un par de días. Tu hermanita ya hace años me entro el culito. Es igual de putita que vos. Cuando prueban quieren pija siempre.
Maca sola saco mis dedos de su culo y quiso acomodar mi pija para que la penetre.
>No, cuña. Hoy no te voy a hacer el orto. Eso va a ser el postre de este fin de semana.
>No cuñado, cógeme el culo.
>Te dije que no – le conteste – y al mimso tiempo le pegue una nalgada.
>hayyyy dijo Maca riéndose –
Volvi a pegarle dos o tres veces mas. Esas nalgas eran perfectas. Quedaron apenas rojas por las nalgadas que le di.
>Cogeme que quiero que acabes – le dije
Maca se acomodo mi pija en la conchita y se la metio de una. Sola me empezo a coger. Su conchita hacia ruido de tanto que me cogia. Maca gemia cada vez mas, se acercaba a su orgasmo.
Estire mi mano y empecé a tocarle su clítoris. Maca ya no aguanto mas… empezo a retorcerse sobre mi, apretaba con su mano mi mano que tenia sobre su clítoris.
Ahhhhgggggggggg – haggggggggg- ahhhhhhgggg gemia Maca mientras acababa.
De su conchita salieron mas y mas flujos, maca estaba acabándome sobre la pija. Cuando dejo de moverse se recostó sobre mi, apoyo su espalda sobre mi pecho y estirando su brazo hacia atrás me agarro de la nuca.
>Que bien que acabe cuña. Hace rato no acababa asi, como me calienta como me garchas.
Maca se levanto; yo seguía sentado sobre la tapa del inodoro. Maca se arrodillo frente a mi y se puso a chuparme la pija. Tragaba mi pija sin problemas, mientas me chupaba el glande me pajeaba y me acariciaba los huevos. Maca hacia mucho ruido con su boca mientras me la chupaba. Yo sentía que en cualquier momento iba a explotar.
>Quiero leche ahora cuña – me dio Maca mirándome desde abajo con catita de puta…
>Dame lechita. Mi hermana ya tomo mucha. Ahora me toca a mi –
No podia creer estar escuchando Maca otra vez hablarme asi. La agarre del pelo e hice que se trague mas de la mitad de mi pija.
>Vas a tomar leche cuña. Te voy a dar leche directamente en tu garganta ¿Te la vas a tragar?
Maca solamente movia la cabeza asintiendo. Agarrada de los pelos hacia que mi cuñada se meta la pija lo mas adentro posible de su boca, la sacaba para tomar aire. Me miraba con cara de puta, con saliva por los costados de su boca.
>Dale cuña. Acabame en la boquita – me dijo la utlima vez que se metio la pija en la boca.
Ya no aguante mas, sentía mi pija tocar la garganta de Maca.
>Voy a acabar Maca….
Maca se prendio de mis piernas y se trago todo lo que pudo mi pija. En ese momento empecé a eyacular dentro de su boca. Ahggggggggggggg gemi cuando senti el primer chorro de leche salir de mi pija; después otro y otro mas.
Ver a Maca con mi pija bien ensartada en su su boca, recibiendo mi leche directamente en su garganta es algo que no puedo describir. Ella saco mi pija, tosía y tenia arcadas. Sus ojos estaban llenos de lagrimas. Mirandome desde abajo trago lo que le quedaba de leche dentro de su boquita. Tomo aire y volvió a chuparme la pija. La que sentía con esa boca me hacia retorcer de placer. Maca ahora me estaba limpiando la pija.
>¿Te gusto cuña?. ¿te gusto como me tome tu lechita? – me pregunto Maca mientras de levantaba y se limpiaba la comisura de sus sabios con sus dedos.
>Sos un hija de puta. Estoy loco con vos cuña. No podes chupar asi la pija – le dije y le agarre la cara con una mano apretando apenas sus cachetes.
Maca se fue hacia el lavatorio y empezó a enjuagarse la boca. Después se sentó en el bidet a lavarse su conchita. Mientras hacia yo me lavaba la verga.
No tenia idea cuanto tiempo paso. La culeada que nos dimos con Maca fue inolvidable. Sin darnos cuenta nos miramos y nos sonreímos. Nos acercamos y nos besamos; abrazados, disfrutando de nuestras bocas, fue un beso con amor.
Antes de salir Maca linpió la tapa del inodoro. Salimos juntos del baño. Maca se fue a su pieza y yo a la del patio. Cuando Maca me saludo antes de entrar a su pieza me dio un pico y al darse vuelta le pegue una nalgada.
>No te olvides que este es mi postre – le dije-
Maca no me respondió, solo se sonrió.
Ya en la pieza mire la hora. Eran casi las 17 hs. Agarre mi teléfono y por suerte no tenia ningun mensaje o llamada de Maria. A los pocos segundos me llega un mensaje de Maca.
>Cuña ¿con que vas a querer que te espere para que te comas tu postre?
>Con una tanguita roja cuña. Te la quiero correr al costado mientras te hago el orto.
>Ok cuñadito. Como vos quieras. – me contesto Maca-
Obviamente borre todos los mensajes con Maca. Me cambie y me fui para la cas a mirar un poco de tele. Maca a los 15 minutos salió de su pieza.
>Me voy antes que llegue alguien – me dijo – Por las dudas.
No me dio tiempo a decir algo que Maca ya salia por la puerta.
Una media hora ms tarde llego Maria con mis suegros. Con bolsas del super y otras cosas.
>Hola amor… - me saludo Maria. ¿Cómo pasaste? ¿dormiste algo?
> Hola gorda. Si hace un rato nomas me levante.
>¿Qué sabes de los chicos? – me pregunto
>Ni idea. Fernando no me mando msj.
> Ok, ahí le escribo a Maca y le pregunto.
Paso un poco mas de tiempo y llego Fernando con los chicos. Unos minutos mas tarde llego Maca. Saludo a todos y su esposo con un beso en la boca. No pude evitar sonreír por dentro. Maca lo besaba y Fernando contento, sin saber que esa misma tarde Maca tenia casi toda mi pija eyaculando dentro de su boca.
Ya cerca de las 20 hs. llego mi cuñado Marcelo. Llego con una chica. Obviamente esa chica era la que se había culeado esa tarde.
>Hola a todos – saludo Marcelo.
>Hola – saludo la chica – con voz timida.
>Ella es Camila - Les presento – Ella es mi hermana Macarena y ella mi otra hermana Maria – dijo Marcelo y presento a su “novia” a sus hermanas.
>Hola, un gusto. – contestaron ambas hermanas casi a la vez.
> El es Fernando, el esposo de Maca – dijo Marcelo-
> Hola, ¿Cómo estas? – contesto Fernando mientras la saludaba con un beso.
> Y el es Raul – dijo Marcelo refiriéndose a mi -
Mica se acerco y me saludo con un beso. Yo me pare para saludarla.
>Hola Mica, un gusto –
Mica era un chica con lindo cuerpo, alta. Tenia un buen par de tetas, no tanto culo pero con buenas piernas. De cara no era muy linda. Pero tenia lo suyo, sobre todo lindos ojos.
No podía evitar recordar que esa tarde la había visto mientras se la garchaban. Recordaba su conchita y sus labios hinchados por recibir la pija de mi cuñado. No podía evitar recordar a Mica cabalgando y gimiendo. En un momento Mica saludo a mis suegros. Los cuales evidentemente ya la conocían. Maca ni bien tuvo oportunidad me miro. Nuestra miradas se cruzaron y fue evidente que nos ambos pensábamos en los mismo, pensábamos en Mica mientras se la garchaban.
>Heyy ustedes no contaron nada – dijo Maria – refiriéndose a sus padres. No sabia que mi hermanito tenia novia – comento riendose
>Por que debería de contar – dijo mi suegra – el es quien debe hacerlo.
Esa noche cenamos todos juntos. Cuando nos fuimos a dormir ni bien me acosté me dormí.
CONTINUARA.
P/D: Se me hizo demasiado largo el relato, pero no quería cortarlo para que no se pierda el hilo. Disculpen.
Como ya lo he dicho en mi primer relato, ya hace bastantes años, pude cumplir una de las fantasías que la mayoría de los hombres buscamos; me pude coger a mi cuñada. Claro que, como ya lo he relatado, después de haberme culeado a mi cuñada, las cosas no terminaron como lo hubiera querido, tampoco puedo quejarme.
Es decir, si me dan a elegir, en aquel momento hubiera querido seguir cogiendo a Maca y seguir mi relación con María, pero bueno, las cosas se presentaron de otra forma.
Después de habernos descubierto, María nos hizo prometer que con Maca ya no seguiríamos teniendo relaciones; y que las cosas sigan tal y cual eran. Así, nadie aparte de los tres se debería de enterar lo sucedido; eso si, nos dejo que tuviéramos nuestra despedida, la cual la hemos aprovechado.
Pasaron muchos años, cumplimos nuestra promesa. Con Maca no hemos vuelto a hablar del tema, tampoco hubo insinuaciones ni nada por el estilo; solamente la relación de cuñados, como si nada hubiera pasado entre nosotros.
Con Maria formamos una familia, tuvimos dos hijos y compramos nuestra casa. En todos estos años con Maria fuimos experimentando los temas sexuales, sobre todo aquellos en los que ella no se sentía cómoda. Sin han leído mis relatos anteriores sabrán a lo que me refiero.
Si puedo decir que después de insistir y con mucha paciencia, tuvimos sexo anal. Pude hacerle el culo a Maria, al final ese culito que tanto me calienta fue mio. Actualmente cogemos dos o tres veces por semana; Maria me sigue chupando la pija como hace mas de diez años, me sigue dejando loco con la forma en la que me chupa, en ocasiones le lleno la boquita de leche y se la traga toda; ya que, si bien hoy ya es común que le acabe en la boca, no es algo que le termine de gustar, asi que depende de su calentura le termino acabando en su boca cuando ella me lo pide.
Maria sigue siendo una mina hermosa, su cuerpo, pese a haber sido madre sigue siendo espectacular. Actualmente hace gym tres veces por semana; sus tetas, después de los embarazos quedaron un poco mas grandes y sus pezones mas puntiagudos, te dan ganas de lamerlos y morderlos apenas los ves. Su culito, sigue estando bien paradito, con algunas celulitis producto de la edad, pero que lo hacen mas lindo de lo que era. Sigue usando sus tanguitas bien apretadas que se le meten en sus nalgas. Hoy a sus 37 años es una mina que calienta a cualquier hombre; y yo tengo la suerte de cogerla las veces que quiero.
Maca, mi cuñada tambien fue madre, se caso y tuvo dos hijos con Fernando, un tipo que la verdad que cae bastante para el culo. Maca sigue siendo la típica “petisa culona”. Su orto sigue llamando la atención, es mas, puedo decir que hoy día es mas grande que antes, a sus casi cuarenta años se sigue manteniendo en forma. Maca siempre con una personalidad extrovertida, simpática con todos. Por su profesión ya casi no usa ropas ajustadas, si no mas bien se viste mas formal; casi siempre de pantalones de vestir, camisas con blazer o sacos, eso si, su escote sigue llamando la atención, sus tetas siguen firmes y bien paraditas, casi siempre anda con su cabello recogido, lo que hace que quede con una cara tu putita terrible.
Por cuestiones personales, Maca se fue a vivir con Fernando a otra provincia; con Maria continuamos en la misma ciudad de hace mas de diez años, por lo cual, con Maca nos vemos muy cocas veces al año, casi siempre para las fiestas de fin de año o alguna ocasión familiar.
Como dije, con Maca cumplimos nuestra promesa a Maria, no tuvimos mas contacto, seguimos nuestras vidas como si no hubiera pasado nada entre notros, todos estos años fuimos solamente buenos “cuñados”. Eso fue hasta hace unos meses, donde, por cuestiones familiares coincidimos en la casa de mis suegros; y aquí empieza este nuevo relato, una nueva historia con “Maca, mi cuñada”.
La familia de las hermanas estaba invitada al casamiento de una prima en el pueblo de sus padres; con la intención de pasar tiempo juntos decidieron que tanto Maca con su marido e hijos y nosotros con María nos alojemos en la casa de mis suegros; cosa que no era mala idea.
La casa de mis suegros es una casa grande, con tres habitaciones, cada una con su baño privado. La pieza de mis suegros, es la mas grande, después esta la pieza de mi cuñado Marcelo y la otra pieza es la que pertenecía a las hermanas cuando aun vivían con sus padres. En el patio de la casa hay otra pieza, que en realidad era una especie de deposito que con los años la fueron refaccionando para convertirlo en una habitación con todas las comodidades, eso si, no tenia baño.
La casa contaba con un living grande que daba a un pasillo hacia las piezas, la primer pieza era la de mis suegros, la que seguía era la de las hermanitas y la ultima al fondo era la utilizada por mi cuñado. Entre estas dos piezas había un baño común de la casa.
A la derecha del living estaba la cocina, separada por un puerta y sobre la mano izquierda estaba la puerta que daba al patio y al lavadero.
El tema del casamiento fue algo que se fue organizando entre la familia ya hace bastantes meses, es decir tenían todo bien planificado. Habian decidido que en la pieza que quedaba libre dentro de la casa se iba a quedar Maca, Fernando y sus hijos; habían puesto unos colchones mas para sus hijos. En la pieza del patio no quedaríamos Maria, mis hijos y yo.
Se había decidido asi ya Maca y su familia iban a llegar un par de días antes que nosotros, entonces a Maria y a mi no nos quedo otra que quedarnos en la pieza del patio.
El casamiento era en pleno enero, un calo insoportable. La ceremonia por civil se haría un viernes, con un copetín para los invitados al mediodía; al otro dia era la ceremonia por iglesia y la celebración por la noche.
Con Maria organizamos nuestras actividades para ir unos dias antes del casamiento, así llegamos el miércoles a la casa de mis suegros. Maca y su flia. ya estaban desde el finde anterior. Al llegar fuimos recibidos por mis suegros, por Maca, Fernando y mi cuñado Marcelo.
Como dije antes, Maca seguía siendo una hermosa mujer. Estaba vestida con un short y una remera suelta. El shorcito le quedaba hermoso. Seguía conservando una linda cintura en perfecta proporción con sus caderas.
Maca se acerco a saludarme con dos besos. Por la inercia y el abrazo nuestros cuerpos se apretaron. Sentir su perfume, su olor característico me hizo recordarla cuando la tenia desnuda para mi y podía besarla por todo su cuerpo. El abrazo no duro mas de unos segundos, Maca se aparto y siguió como si nada. Saludando y besando a sus sobrinos.
Eran cerca de las 20.30 hs. Bajamos todas nuestras cosas del auto y no acomodamos en la pieza. Todavía no habíamos terminado de organizarnos cuando nuestros suegros nos llamaron para que comamos algo. Durante la cena estuvimos charlando de muchas cosas, risas por sobre todo; buen ambiente. Al terminar de cenar María se entro a bañar, ni bien salió del baño me entre a bañar yo.
Como nuestra pieza no tenia baño privado, ocupábamos el baño de la casa. Esa noche seguimos hablando hasta casi las dos de la madrugada, después todos nos fuimos a dormir.
Los chicos dormían en un colchón grande de dos plazas que estaba en el suelo. Esa noche hacia mucho calor, pese a tener el aire Split encendido debíamos estar destapados para no pasar calor. Con Maria estábamos acostados, cada un con su celular todavía sin poder dormir. Yo tenia solo con un short, debajo no tenia nada, antes de acostarme me había sacado el boxer por el calor. Maria se había acostado con un pijama, de esos que tienen un shorcito y una remerita de tela fina. Por la tela se le marcaban los pezones ya que estaba sin corpiño.
>Que calor de mierda – dijo Maria.
>La verdad que si, esta insoportable.
>Me voy a sacar el short. No aguanto el calor.
María separo sus caderas del colchón y se saco el shorcito del pijama. Tenia una tanguita blanca; esas que tienen el triangulito y a los costados las tiras finitas. Esa tanguita quedaba hermosa entre sus nalgas. Ni bien se volvió a recostar se puso de costado, dándome la espada y sacando un poco su culito hacia mi.
>Epa… linda tanguita amor – le dije mientras le apoyaba una mano en la nalga y le daba un beso en su hombro.
> Hey. Quieto con esa mano – me contestó – con un sonrisa sin dejar de ver su teléfono.
> ¿Cómo me pedis eso?. Tapate entones, porque si seguis con tu culo entangado me vas a calentar – Mientras le seguía dando besitos por el hombro y cuello.
> ¿Vos decis? – dijo Maria – y pego mas su culo contra mi.
Maria apoyo su teléfono en la mesita y miro hacia arriba. Con una mano se agarro una nalga y apenas la levanto.
>¿Te sigue calentando este culito? –
Asi como estábamos nos besamos, ella de costado mirando hacia arriba y yo detrás de ella; le comí la boca, nuestras lenguas se cruzaban. Maria apoyo bien su culo contra mi pija. Una de mis manos la puse sobre el triangulito de tela que cubria su conchita y la aprete hacia mi. El beso fue bastante intenso, pero no duro mas de un minuto. A mi ya se me estaba parando la pija.
> Amor… están los chicos – dijo Maria – dándome unos piquitos.
Mientras, yo busque su conchita con mis dedos. Puse la punta de mis dedos por debajo de la tela de la tanguita, su conchita estaba suave, totalmente depilada. Apenas apoye mis dedos sobre sus labios senti la humedad de su chonchita.
>Enserio amor – decía Maria – Me encanta, pero no podemos.
Se dio vueltas poniéndose boca arriba, por su movimiento yo también me quede de la misma forma. Maria estiro su mano y me agarro la pija por debajo del short. Se sonrió cuando se dio cuenta que no tenia boxer. Por un par de segundos subía y bajaba su mano por el tronco de mi pija; en un momento se fue acomodando y bajando hasta mi pija.
Maria me bajo apenas el elástico del short, lo necesario para que la mitad de mi pija quede por fuera. Me dio un par de besos sobre el glande y después me la chupo unos segundos.
>Listo. Ya tuviste el beso de buenas noches – dijo Maria – mientras volvía a acomodarme el short. Al subir hacia donde yo estaba me miro sonriéndose y me beso.
> Cuando volvamos a casa te voy a compensar estos días – dijo mientras me daba los últimos piquitos ates de acomodarse para dormir.
> Lo único que te pido es que no te pongas mas este tipo de tangas. Si no, no me voy a aguantar hasta llegar a casa – le dije – apretando apenas una de sus tetas.
> Hasta mañana.
Al otro dia, dormimos hasta tarde. No levantamos cerca de las diez de la mañana. Tomamos unos mates con mis suegros y Fernando; mi cuñado Marcelo se había ido a trabajar. Maca y sus hijos estaban en la casa la prima que se iba a casar.
Al mediodía almorzamos los mismos. Maca se había quedado a almorzar en casa de su prima, tenían que terminar de organizar algunas cosas para el evento, y mi cuñado recién volvía de su trabajo a la tarde. Al terminar de almorzar Maria le ayudo a mi suegra a lavar las cosas.
Al terminar, mis suegros le dijeron a Maria para ir a hacer unas compras al supermercado y después pasarían por la casa de Luciana (prima que se iba a casar) para saludarla; cosa que Maria acepto con gusto.
>Amor ¿queres ir con nosotros al super? - me pregunto Maria-
> Paso esta vez. Me voy a pegar un baño y a intentar dormir un rato.
La verdad que los días anteriores andaba mal dormido por temas del trabajo, asi que iba a aprovechar para descansar.
> Anda nomas Negra. Mandale mis saludos a Luciana.
> Ok, me voy con los viejos nomas. Pero vas a tener que llevarle a los chicos a la casa de Luciana. No dejan de molestar con que quieren ir ya.
Me había olvidado de ese pequeño detalle. Mis hijos me pedían para que los llevase con sus primos, los cuales tienen casi la misma edad. En ese momento, Fernando que estaba hablando con mis suegros se ofreció a llevarlos el.
>Si quieren yo los llevo. Igual mas tarde tengo que ir para allá. Lo llevo yo, no te hagas problema Raul.
La verdad que me saco un peso de encima.
> Genial – dijo Maria – y le ordeno a mis hijos a que juntaren sus cosas que ya se iban con el tío.
> Amor, llevo el auto – me dijo Maria – Porque Maca anda en la camioneta de papá.
>Ok, amor – le conteste mientras buscaba mis cosas para bañarme.
A los quince minutos me quede solo en casa de mis suegros, me di un baño de agua fría para sacarme el calor y me fui a acostar, seria cerca de las 14 hs.
No se cuanto tiempo paso. Me desperté con un poco de sed. Agarre el celular y estuve unos quince minutos boludeando. Como tenia sed y ganas de ir al baño me levante y me fui para la casa.
La puerta que daba al patio estaba abierta, entre por la cocina para ir al baño. Al llegar al living y girar hacia el pasillo, me detuve de repente. En el pasillo, sobre la puerta de la última pieza la veo a Maca. Estaba recostada sobre la pared; ella me daba la espalda.
No se había dado cuenta que yo había entrado. Maca estaba con un vestido floreado; esos vestidos sueltos de verano; le llegaba hasta la mitad de sus muslos. Me sorprendió verla asi, se esa forma. Yo seguí caminando hasta el baño; la estaba por saludar, cuando escuché un sonido particular.
Otra vez, casi por instinto me detuve a escuchar. Yo sabia que en la casa no había nadie. Pero casi de inmediato escucho un leve gemido. Agudice mis oídos para prestar atención. Y si, efectivamente se escuchaban gemidos. Eran gemidos de una mujer; eran gemidos suaves, pero reiterados.
Al prestar atención me di cuenta que los gemidos venian de la última pieza, es decir la pieza de mi cuñado. La pieza sobre la cual Maca esta recostada sobre la pared.
Tratando de no hacer el mas mínimo ruido, me fui acercando a donde estaba Maca. Los gemidos seguían y se escuchaban un poco mas fuertes. La puerta de la pieza estaba abierta hasta la mitad. Maca seguía sin percatarse que de que estaba detrás de ella.
Al acercarme mas, llegue casi a un metro de donde estaba Maca. Recién ahí pude mirar hacia adentro de la pieza de donde se escuchaban los gemidos. Cuando me acomodé bien para ver, pude ver a una mina que estaba sobre un tipo, lo estaba cabalgando. Desde donde los estaba mirando no les podía ver la cara a ambos. Tenia la visión de la parte de un somier, la mina estaba desnuda saltando sobre el tipo, los podía ver de costado a ambos.
En un momento el tipo la agarra a la mina de las nalgas y ella se recuesta sobre el. Asi desde mi posición venia como la mina seguía cabalgando y el tipo la agarraba desde el culo. En un momento la chica se levanta, es decir se sienta sobre el tipo mientras seguía cogiendo. Ahí la vi, una mina de tes blanca, con cabello negro. Se acomodo el cabello hacia un lado. En ese momento el tipo estira sus manos y a la agarra las tetas; ella le sujeto las manos con las suyas sobre sus tetas y seguía cabalgando y gimiendo, lo cogía al tipo con un movimiento de sus caderas, no era de arriba hacia abajo, sino que sus caderas se movían de atrás hacia adelante a bastante velocidad. En eso el tipo le suelta las tetas a esta mina y la sostiene desde la cintura. La mina tenia muy lindas tetas, se movían por el movimiento; tetas duritas, grandes, con pezones rosaditos. Los gemidos eran cada vez mas fuertes. La mina le llevo sus dedos a la boca y les paso la lengua mientras miraba al tipo, con esa mano se agarro una de sus tetas y se la apretaba. Por lo que podia ver, la mina tenia lindo cuerpo, no la podía ver bien la cara, la veía de perfil. Por las muecas y los gestos que hacia mientras cogía demostraba que estaba disfrutando de esa culeada.
>Cogeme. Me encanta cuando me coges asi – dijo el tipo.
Pude distinguir la voz claramente. Era la voz de Marcelo, mi cuñado. Es decir, mi cuñado se estaba cogiendo a esta hermosa mina.
Esto no fueron mas de uno o dos minutos. Cuando realmente me doy cuenta de la situación la miro a Maca. Ella seguía sin saber que yo estaba ahí. Ella solamente miraba a la pareja mientras cogían. Mi pija ya estaba casi parada del todo. Sentia mi corazón empezar a latir mas fuerte. Ver a esa mina cogiendo me generaba algo distinto. El morbo de espiar a esa pareja mientras cogía me estaba calentando.
La chica en un momento deja de cabalgar y se baja. Se acuesta boca abajo, es decir se atraviesa sobre el somier. Ahora la veía de cuerpo entero, la mina estaba de espaldas, directo hacia donde estábamos con Maca. Ella misma agarro una almohada y se la puso bajo su vientre. Su culito se levanto un poco. Mi cuñado sin perder tiempo se levanto y se puso detrás de ella.
Con sus manos separo las nalgas de la mina. Podía verle la concha bien mojadita, después empezó a pasarle sus dedos por toda su concha, de arriba hacia abajo, pasando por el agujero del culo. Ahhhhggg – se escucho el gemido de esta mina cuando mi cuñado empezó a chuparle la conchita desde atrás. Ella misma estiro sus brazos y con las manos se abría las nalgas para que mi cuñado le pueda chupar bien la concha.
Mi cuñado se puso de rodillas detrás de la mina, con una mano se agarro la pija, como haciéndose una paja. Sin perder mas tiempo acomodo la pija sobre la conchita de su mina y la empezó a coger otra vez. Aahhhhggg Ahgggggg – solo se escuchaban gemidos de la mina. Asi arrodillado detrás de ella, mi cuñado le pego una cachetada en la nalga. El ruido resalto bastante.
Maca se sobresalto al escuchar el ruido.
>Dale. Dale. Parame el culo amor… - decía Marcelo mientras se cogía a esta mina- Otra nalgadas mas y otra y otra.
Se escuchaba como la mina gemia cada vez mas por las nalgadas que le daba Marcelo.
>Si amor. Cogeme – Haaaagggg – cógeme – no pares que voy a acabar – se escuchó decir a la mina.
Mi cuñado se aparato, se quedo de pie al costado de la cama, de espalda hacia donde estábamos nosotros con Maca. La agarro a la mina de la cintura y la trajo hacia el.
>Ponete en cuarto – le ordeno –
La mina, se puso bien sobre el borde del somier, en cuatro. Apuntaba el orto hacia mi cuñado.
>Cogeme boludo. Dale que ya quiero acabar.
Marcelo, parado como estaba se agarro la pija con una mano; con la otra mano agarro una de las nalgas de su mina y la abría. Le pasaba la pija por toda la concha, de arriba hacia abajo.
>¿Enserio queres que te coja Cami? Como te gusta rogar por pija eh – le dijo mi cuñado-
>Cogeme si… por favor cógeme. Quiero tu pija.-
Con Maca teníamos una vista privilegiada. Marcelo seguía pasándole la pija por la concha a la mina haciendo que ella le pida por favor que la coja.
En ese momento le preste atención a Maca. Estaba con la mano en una de sus tetas, se la apretaba. No emitía ningun ruido. Solamente miraba y se agarraba una de sus tetas.
Hija de puta – pensé – Maca se estaba tacando mientras espiaba a su hermano coger. Mi pija ya estaba dura. Me quería pajear ahí mismo. Pero si lo hacia iba a hacer ruido.
Volvi a mirar hacia adentro de la pieza al escuchar los gemidos de la mina. Marcelo ya la estaba cogiendo otra vez. La tenia en cuatro y la penetraba una y otra vez.
Ahhhhhhhhhgggg – haaaaaagggggggggg – la mina empezo a retorcerse sobre el colchon. Estaba teniendo su orgasmo. Ahhhhhh – dale – no pares – casi gritaba.
Cuando volví a Mirar a Maca tenia ya su teta por fuera del vestido, estaba con la teta al aire. Desde atrás veía como una de sus manos tenia en la zona de su conchita. Se veía su vestido un poco levantado. No podía estar seguro, pero era lo que me imaginaba. Maca no se perdia detalle de lo que pasaba adentro.
Yo me saque la pija por fuera del short. Ya no aguantaba la calentura. El morbo de espiar a la pareja y ver a Maca en la misma situación me dio perder todo tipo de cordura. Agarre mi pija y me empecé a pajear.
La mina ya no gemía. Se movía casi en cámara lenta cogiendo a mi cuñado. Marcelo saco su pija; la concha de la minita estaba muy mojada e hinchada. Al sacar la pija, los labios de la conchita estaban separados y con flujo por todos lados. La mina estiro su mano por dejado y se tocaba la concha.
>Veni Cami. Chupame la pija – dijo Marcelo
En ese momento la mina se levanto y se iba a dar vuelta. Casi instintivamente me corrí unos pasos para atrás; Maca hizo lo mismo. Si la mina se daba vueltas nos iba a ver claramente. Obviamente que se podía armar un quilombo importante si nos encontraba espiándolos.
Cuando Maca se corrió hacia atrás giro su cuerpo. Su cara cambio repentinamente. Se quedo blanca mirándome. Se acomodo el vestido si decir ni una palabra. Apenas tenia abierta su boca, su labio inferior casi que le temblaba. Yo estaba con la pija afuera del short. Le hice la típica seña de silencio con el dedo para que no haga ruido.
Maca no dijo nada, empezó a caminar y paso por al lado mío. Fue hasta la puerta de su pieza y la abrió muy despacio, sin hacer ruido. Ni bien la abrió se metió para adentro. Yo por mi parte me di vuelta y me fui hasta mi pieza. Me olvide de las ganas de mear y de la sed. Me fui sin hacer ruido. Al llegar a la pieza me recosté en la cama, recordaba las imágenes de la mina cogiendo. Se me venia a la mente las tetas de la mina, sus gemidos, su conchita llena de flujos. Tenia todavía la pija dura. En ese momento pensé en Maca; mi cuñada.
¿Qué hacia Maca espiando a su hermano? – pensaba – Capaz era el mismo morbo que sentía yo mientras los espiaba. El tema es que no paraba de pensar. Agarre mi teléfono y le mande un whatsap a Maca.
>Maca ¿todo bien?. Perdón por asustarte.
Paso un rato y Maca ni siquiera había visto el mensaje. Deje mi teléfono por un rato, cuando lo volvi a agarrar veo el doble tilde azul. Maca había visto el mensaje pero no contestaba. Me clavo el visto.
Habrán pasado unos veinte minutos. En eso escuche ruidos dentro de la casa. Igual me quede quieto en la pieza, sin hacer ningún tipo de ruido. Escuchaba la voz de mi cuñado hablar con la mina. Estuvieron un rato dando vueltas. A los 15 minutos escucho que se van. Otra vez la casa en silencio.
>Maca. Contestame. – Pero nada, ninguna respuesta.
Me gano la ansiedad. Me levante y me fui a la casa. Me fui directo hasta la puerta de su pieza. Golpee dos veces y espere. Nada, Maca seguia sin contestar. Volvi a golpear, esta vez un poco mas fuerte.
>Maca. Dale abrime. No voy a dejar de insistir hasta que abras.
Me sorprendio que se abrió la puerta del baño. Maca había abierto la puerta hasta la mitad; estaba adentro.
>¿Qué queres Raúl?
> Hablar – dije –
>No hay nada que hablar. ¿de que queres hablar? – dijo Maca sin mirarme a los ojos –
> Boluda. Estabas espiando a tu hermano mientras garchaba.
> No me hinches las bolas Raul – dijo Maca e intento cerrar la puerta.
Me adelante y no deje que la cerrara. Haciendo un poco de fuerza la abrí y entre al baño con Maca, cerrando la puerta después de entrar.
>Sali de aca forro de mierda – dijo Maca – mirándome fijo. Salí porque te pego con lo primero que veo.
>Tranquila Maca. Espera, no te pongas asi.
>Sali Raul, enserio que te voy a pegar con algo.
Veía la expresión seria de Maca.
>¿Qué te pasa loca de mierda? - le dije – No vengo a decirte ni reclamarte nada. Solo quería saber que hacias. Nada mas.
>¿Y quien sos vos para venir a preguntar lo que yo hago o dejo de hacer?. Dale, correte que quiero salir.
Maca hizo un intento por correrme, pero obviamente no pudo.
>La puta que te pario Raul, correte.
>No te pongas mala – le dije – Pedime por favor y te dejo salir.
>Lavate el culo forro. No pienso pedirte por favor a vos.
>¿Por que te pones asi? – Solo pedi por favor y te vas –
Mas que nada le decía en forma de chiste, porque realmente no entendía por que Maca estaba así de sacada; yo solamente quería descomprimir un poco la situación.
>¿Por que no te vas bien a la mierda y me dejas salir?.
>No entiendo que te pasa loca. Se ve que estas en tus días.
>Callate Raul porque te voy a pegar. No me jodas.
>Si no estas en tus días, no te deben estar atendiendo muy bien. ¿Por qué tanto nervio?
>¿Y a vos que te importa si me atienden bien o no? – Por lo visto vos tampoco estas bien atendido que te andas pajeando espiando a otros coger.
Al escuchar su respuesta no pude evitar sonreir.
> “Vos tampoco estas bien atendido” dijiste. Viste, sabia que por algún lado venia tanta mala onda. ¿Fernando no te anda garchando?
> Callate la boca Raul, no sigas. Dejame salir. Voy a hacer un escandalo que los vecinos van a escuchar.
> Claro, por ahí viene la mano. No te garchan y tenes que andar espiando a los demás que si garchan. Comprate un juguetito cuñada y sacate las ganas con eso, asi te descargas.
Maca no me contesto, me dio una cachetada que sonó bastante fuerte.
>Te dije que me dejes salir.
Obvio que la cachetada no me dolio. Mas que nada fue un dolor emocional. Maca, mi cuñadita en ese momento tenia bronca hacia mi.
>Perdoname Maca. No quise que te pongas asi. Me desubique.
Maca me miraba fijamente; no apartaba sus ojos de los mios. Su respiración era rápida. Verla asi, desprotegida me rompió el corazón. En eso momento se me vinieron a la cabeza las mismas sensaciones que sentí mucho tiempo atrás; no pude aguantarme, me acerque a ella, la tome su ambos lados de su cara y la bese, no pensé en otra cosa.
Maca me aparto no brusquedad.
>¿Qué haces forro? ¿Por qué me besas? – Son un hijo de puta – dijo Maca.
Al ver esta reacción no supe que hacer. Solo la quede mirando.
>¿Por qué me besas hijo de puta? – casi llorando - ¿Por qué ahora?
Esa ultima pregunta me hizo pensar – “¿Por qué ahora?” – No lo entendí.
>No te entiendo Maca.
Maca empezó a llorar y a tirarme manotazos al cuerpo.
>¿Por qué ahora Raul, porque ahora y no antes? – Maca lloraba.
Solamente la abrace y la aprete contra mi cuerpo. Maca de a poco se fue calmando. Sentir que ella se calmaba conmigo me reconforto el alma.
En un momento ella levanto la mirada y nos quedamos mirando. Fueron unos cinco segundo que parecieron eternos. Me acerque y la volvi a besar.
Maca no se movia, sus labios estaban inmóviles. Yo no dejaba de besarla. Fui dando besos cortos por toda su boca. Poco a poco ella fue recibiendo mis besos. De a poco fue moviendo sus labios.
>¿Por qué ahora? – volvió a preguntar –
>No se. La verdad no se. Solo tengo ganas de besarte. No me pude resistir.
>No tenes idea lo que espere una señal tuya – me dijo Maca mientras se apartaba de mi – Te espere años Raul. No podia entender como de un dia para el otro te olvidaste de mi.
>Nunca deje de pensar en vos Maca. Pero me pesaba mas lo que habíamos hecho. No podia dejar de pensar en lo que hubiera pasado. Aparte le dimos nuestra palabra a Maria.
>Solo yo se lo que siente traicionar a mi hermana. No me puedo sacar de la cabeza las palabras que salieron de su boca cuando nos encontró a los dos. Solo por ella me aleje de vos.
Me volví acercar a Maca y nos besamos. Esta vez fue en beso mutuo. Poco a poco el beso fue mas pasional, nuestras lenguas recorrían nuestra bocas. Así como estábamos Maca se pego a mi y me hizo retroceder hasta la puerta. Mis manos fueron directo a sus nalgas. Las aprete por sobre la tela del vestido. Maca me había agarrado por detrás de la nuca, nuestras respiraciones ya eran jadeos.
>No… No… No podemos – dijo Maca – separándose de mi.
>No podemos hacer esto otra vez boludo. Fer, Maria, los chicos. No Raul, no puedo con la culpa – dijo Maca.
>Maca ya pasamos por esto una vez. No te voy a presionar si vos no queres. Pero te aseguro que yo no voy a dejar de pensar en vos.
La solte, me di media vuelta e iba a abrir la puerta para salir. Maca no me dejo. Me agarro del brazo y se tiro sobre mi. Nos besamos nuevamente. Ya no eran besos, nos comíamos la boca, solo dejaba de besarla para darle besos por el cuello. Maca seguía tomándome de la nuca mientras yo la besaba. Mis manos otra vez buscaron su culo, esta vez alce su vestido y la agarre ambas nalgas. Sentir otra vez esas nalgas en mis manos fue increíble. No dejaba de apretarle las nalgas.
Maca por su parte, con su mano libre busco mi pija por debajo del short. Ni bien me la agarro comenzó a pajearme. Ya se escuchan algunos gemidos de Maca. Con una de mis manos empecé a acariciarle la conchita sobre la tela de su bombacha. Mis dedos fueron por debajo de la tela, la conchita de mi cuñada ya estaba muy mojada. Muy dedos resbalaban por sus labios, la empecé a pajear con mis dedos, sin penetrarla.
La deje de besar e hice que se diera vuelta. Maca quedo de espaldas a mi. Asi como estaba volví a tocarle la conchita, corri la tela de su bombachita a un costado y ahora si de apoco la fui penetrando con mis dedos. Maca gemia despacito. Ella sola estiro su mano hacia atrás y busco mi pija. Me bajo el short como pudo, dejando mi pija al aire. Se levanto el vestido en la parte de atrás y se apoyo sobre me pija.
Maca hacia punta de pie para poder subir un poco su conchita. Mi pija quedo entre sus piernas; ella con una de sus manos me acomodo la pija, haciendo que empiece a rozar con el glande su conchita. Saque mis dedos, dejando que me pija sea la que se refriegue por todos sus labios, sus flujos hacían que todo sea mas placentero. Con mis dedos empecé a acariciarle el clítoris. Maca solo gemía y se apoyaba sobre mi, mi pija la refregaba por sus labios en todo lo largo, sin penetrarla.
Sin darme tiempo a nada Maca se dio vueltas. Bajo besando por el pecho y el abdomen hasta llegar a mi pija. Maca empezó a chuparme la pija de forma desesperada, se la comia entera; pasaba la legua a lo largo del toda mi pija, me lamia los huevos y me miraba mientras lo hacia.
Mirándole desde arriba le agarre a Maca de su pelo (lo tenia recogido) y empecé a ser yo quien le daba el ritmo a Maca, le estaba cogiendo la boca como yo quería.
Sin dejar de chuparme Maca fue metiendo mi pija cada vez mas adentro de su boca, cada vez mas y mas… Tenia mas de la mitad de mi pija dentro de su boca.
>Apa cuñada. Esto es nuevo – le dije.
Ver como Maca se tragaba mi pija me estaba dejando loco. Ella sola volvió a hacer lo mismo. Esta vez se prendio con ambas manos de mis nalgas y fue tragando pija poco a poco. No podia dejar de mirar ese espectáculo; tenia a Maca agarrada de los pelos y con mas de media pija metida en su boca. Pero Maca fue por mas y se trago unos centímetros mas de pija. Se quedo quieta con casi toda mi pija en la boca. Podia sentir su garganta en la cabeza de mi pija.
>Putita. como chupas pija hija de puta – le dije –
Maca mi miraba desde abajo. Solo se saco la pija de la boca cuando sintió arcadas. Mi pija salió de su boca con saliva por todo lados. Maca tomo aire un par de veces y otra vez se mando la pija al fondo. Si seguía asi me iba a hacer acabar.
Maca dejo de chuparme la pija y me pajeaba muy despacio, me miraba desde abajo.
>¿Te gusta cuña?. ¿Te gusta como tu cuñada te cupa la pija?
>Si seguis asi te voy a acabar en la garganta putita - le dije –
Maca se paro y nos volvimos a besar. Maca me pajeaba mientras me besaba, yo hacia lo mismo en su conchita, tenia dos dedos que entraban y salían de su concha que tenia sus flujos por todos lados.
Asi, besándonos la lleve hasta el inodoro. La hice ponerse de espaldas a mi. Bajamos la tapa y ella solita subió una de sus piernas, apoyando sobre el inodoro. Maca ya tenia su bombachita corrida hacia un costado. Solo acomode mi pija sobre sus labio y la penetre de una.
Mi pija le entro hasta el fondo en la primer embestida, Maca tenia la concha llena de flujos, mi pija estaba super lubrica por su saliva. Asi la empecé a coger, sin parar.
Ahhhhhgggggggg – aahhhhhhhggg- cógeme cuñado – cógeme – gemia Maca mientras yo la culeaba desde atrás.
Casi le rompo lo tirantes de su vestido, tire hacia abajo para dejar sus tetas al aire. Ni bien pude empecé a sobarle y apretarle las tetas.
Otra vez me estaba culeando a mi cuñada. Otra vez ese cuerpito era mio. No paraba de cogerla, no quería parar, mis manos recorrían cada parte de su cuerpo. Sentía y escuchaba sus gemidos. Maca no se contenía y casi gritaba.
Ella se aparto sacando mi pija de su conchita.
>Sentate cuña… sentate y yo te cojo – me dijo Maca.
Sin dudar me sente sobre la tapa del inodoro. Maca con su vestido todo arrugado sobre su cintura puso sus piernas a cada lado de las mias y se sento sobre mi, de frente. No se había sentado sobre mi pija todavía, asi como estamos volvimos a besarnos, a comernos la boca.
Maca se retiro, como tirándose hacia atrás y con una de sus manos empezo a tocarse la conchita. Sus dedos recorrían sus labios.
>¿Te gusta tenerme asi cuña? – me pregunto Maca mirándome fijo –
>Me encanta. Y no sabes como me calienta Maca – le conteste-
>Vos no tenes idea de las veces que me toque pensando en vos cuña – dijo Maca – haciendo una especie de pucherito con su boquita.
> Ah si. ¿Te tocaste muchas veces? –
> Si cuña. Muchas veces me pajeaba pensando en vos –
La voz con la que me respondia me estaba dejando loco. Maca no dejaba de tocarse la conchita.
>¿Asi que sos pajerita entones? ¿Te gusta colarte los dedos en la conchita pensando en tu cuñado?
>Si Cuña, me encanta. Pero no solo me pajeo la conchita. Tambien me meto mis deditos en el culo pensando en vos.
Ni bien termine de escuchar eso estire mis brazos hasta su culo. Mis dedos buscaron el agujero de su culito. Empece a hacerle círculos sobre el agujero del orto a mi cuñada. Ahhhhhhhhgggggg – Ahhhhhhhhhhg gemia Maca con los ojos cerrados.
Los flujos de su conchita hacían que su cultito tambien este lubricado. No me costo meterle la punta de mis dedos en el orto. Maca movia sus caderas de adelante hacia atras. Seguia con sus dedos pajeandose la conchita y yo con dos dedos en su culito. No era la posición mas comoda, pero no pensaba en nada, solo quería darle placer a Maca.
>¿Y este hermoso culo me extraño? – le pregunte mientras le metia dos dedos en el orto-
> Si, cuñado. Todo mi cuerpo te extraña. Tenia que pajearme y acabar pensando en vos.
>¿Y el guampudo de Fernando no te coge? ¿o te coge mal? – se lo pregunte directo
Maca me miro fijo, pero no me contesto.
>Contame Maca. El boludo este no te coge como a vos te gusta ¿no?
> Puede ser cuña – contesto Maca mientras seguía gimiendo…
Esa frase elevo mi autoestima, me hizo calentar mas de lo que estaba.
> Y ahora que me tenes acá ¿por me no me coges putita? mostrame las ganas que tenes garchar conmigo.
Maca no espero ni un segundo mas, se acomodó bien y se sentó sobre mi pija. Se levanto dos o tres veces mas hasta que mis huevos chocaron con sus labios. Una vez con mi pija bien ensartada Maca me empezó a cabalgar y a gemir.
>Te voy a coger como el guampudo de Fernando no te coge sabes cuña – le dije mientras la agarraba otra vez del pelo y hacia que me mire a los ojos.
> Vos te mereces que te garchen todos los días, que te hagan acabar como vos quieras putita… asi no tenes que andar pajeandote.
> Si cuña, cógeme. cogeme y sacate las ganas conmigo – dijo Maca –
> ¿Tan caliente estabas que tuviste que espiar a tu hermano Maca? – le pregunte mirándole a los ojos mientras ella seguía cabalgando y gimiendo sobre mi.
Como la tenia agarrada de los pelos Maca no puedo esquivarme la mirada.
>No, cuña. No fue a propósito. Se dio sin querer. No soy tan puta.
>Pero te quédaste mirando. ¿Te gusto ver a tu hermanito garcharse a esa mina?
Maca gemia cada vez mas, me cogia saltando sobre mi pija. Otra vez busque el agujero de su culo, dos dedos le entraron muy fácil en el orto. Aggggggggggghhhhhhhhh gimo Maca –
>No, no me gusto… pero no se, no me podia ir.
>Pero si te tocaste la conchita cuña. Yo te vi.
> ¿Y vos? - Me pregunto y me sorprendió - ¿Por qué te quedaste?
>Porque la mina estaba buena. Y por el morbo de espiar a otros mientras garchan.
Saque mis dedos del orto de mi cuñada y me agarre de sus nalgas. Hice que sus movimientos sean mas rapidos, la ayudaba a subir y bajar por mi pija.
Ahhhhhggggggggg – gemia cada vez mas Maca – se prendia por mi nuca para poder moverse.
>Date vuelta. Quiere verte el culo – le dije
Maca se levanto, se dio vueltas y volvió a sentarse sobre mi, esta vez de espaldas.
>Abrite el orto cuña. Mostrame el culito.
Maca con sus manos se abrió las nalgas. Su culo hermoso quedo frente a mi. Enpece a acariciar su esfínter con dos dedos, ni bien los apoye los fui metiendo. Quise poner uno mas y me costo.
>Hayyyyyy – Despacio que me duele – dijo Maca – despacio por favor cuña.
>Me das a decir que el guampudo no te hace el orto? No te puede creer, con semejante culo a su disposición.
Maca no contesto.
>Que hijo de puta este Fernando, no puede no comerse el culo cuña – le decía mientras le colaba dos dedos en el orto.
>¿Y vos hace cuanto no haces un culo? – me pregunto Maca desafiante.
> Hace un par de días. Tu hermanita ya hace años me entro el culito. Es igual de putita que vos. Cuando prueban quieren pija siempre.
Maca sola saco mis dedos de su culo y quiso acomodar mi pija para que la penetre.
>No, cuña. Hoy no te voy a hacer el orto. Eso va a ser el postre de este fin de semana.
>No cuñado, cógeme el culo.
>Te dije que no – le conteste – y al mimso tiempo le pegue una nalgada.
>hayyyy dijo Maca riéndose –
Volvi a pegarle dos o tres veces mas. Esas nalgas eran perfectas. Quedaron apenas rojas por las nalgadas que le di.
>Cogeme que quiero que acabes – le dije
Maca se acomodo mi pija en la conchita y se la metio de una. Sola me empezo a coger. Su conchita hacia ruido de tanto que me cogia. Maca gemia cada vez mas, se acercaba a su orgasmo.
Estire mi mano y empecé a tocarle su clítoris. Maca ya no aguanto mas… empezo a retorcerse sobre mi, apretaba con su mano mi mano que tenia sobre su clítoris.
Ahhhhgggggggggg – haggggggggg- ahhhhhhgggg gemia Maca mientras acababa.
De su conchita salieron mas y mas flujos, maca estaba acabándome sobre la pija. Cuando dejo de moverse se recostó sobre mi, apoyo su espalda sobre mi pecho y estirando su brazo hacia atrás me agarro de la nuca.
>Que bien que acabe cuña. Hace rato no acababa asi, como me calienta como me garchas.
Maca se levanto; yo seguía sentado sobre la tapa del inodoro. Maca se arrodillo frente a mi y se puso a chuparme la pija. Tragaba mi pija sin problemas, mientas me chupaba el glande me pajeaba y me acariciaba los huevos. Maca hacia mucho ruido con su boca mientras me la chupaba. Yo sentía que en cualquier momento iba a explotar.
>Quiero leche ahora cuña – me dio Maca mirándome desde abajo con catita de puta…
>Dame lechita. Mi hermana ya tomo mucha. Ahora me toca a mi –
No podia creer estar escuchando Maca otra vez hablarme asi. La agarre del pelo e hice que se trague mas de la mitad de mi pija.
>Vas a tomar leche cuña. Te voy a dar leche directamente en tu garganta ¿Te la vas a tragar?
Maca solamente movia la cabeza asintiendo. Agarrada de los pelos hacia que mi cuñada se meta la pija lo mas adentro posible de su boca, la sacaba para tomar aire. Me miraba con cara de puta, con saliva por los costados de su boca.
>Dale cuña. Acabame en la boquita – me dijo la utlima vez que se metio la pija en la boca.
Ya no aguante mas, sentía mi pija tocar la garganta de Maca.
>Voy a acabar Maca….
Maca se prendio de mis piernas y se trago todo lo que pudo mi pija. En ese momento empecé a eyacular dentro de su boca. Ahggggggggggggg gemi cuando senti el primer chorro de leche salir de mi pija; después otro y otro mas.
Ver a Maca con mi pija bien ensartada en su su boca, recibiendo mi leche directamente en su garganta es algo que no puedo describir. Ella saco mi pija, tosía y tenia arcadas. Sus ojos estaban llenos de lagrimas. Mirandome desde abajo trago lo que le quedaba de leche dentro de su boquita. Tomo aire y volvió a chuparme la pija. La que sentía con esa boca me hacia retorcer de placer. Maca ahora me estaba limpiando la pija.
>¿Te gusto cuña?. ¿te gusto como me tome tu lechita? – me pregunto Maca mientras de levantaba y se limpiaba la comisura de sus sabios con sus dedos.
>Sos un hija de puta. Estoy loco con vos cuña. No podes chupar asi la pija – le dije y le agarre la cara con una mano apretando apenas sus cachetes.
Maca se fue hacia el lavatorio y empezó a enjuagarse la boca. Después se sentó en el bidet a lavarse su conchita. Mientras hacia yo me lavaba la verga.
No tenia idea cuanto tiempo paso. La culeada que nos dimos con Maca fue inolvidable. Sin darnos cuenta nos miramos y nos sonreímos. Nos acercamos y nos besamos; abrazados, disfrutando de nuestras bocas, fue un beso con amor.
Antes de salir Maca linpió la tapa del inodoro. Salimos juntos del baño. Maca se fue a su pieza y yo a la del patio. Cuando Maca me saludo antes de entrar a su pieza me dio un pico y al darse vuelta le pegue una nalgada.
>No te olvides que este es mi postre – le dije-
Maca no me respondió, solo se sonrió.
Ya en la pieza mire la hora. Eran casi las 17 hs. Agarre mi teléfono y por suerte no tenia ningun mensaje o llamada de Maria. A los pocos segundos me llega un mensaje de Maca.
>Cuña ¿con que vas a querer que te espere para que te comas tu postre?
>Con una tanguita roja cuña. Te la quiero correr al costado mientras te hago el orto.
>Ok cuñadito. Como vos quieras. – me contesto Maca-
Obviamente borre todos los mensajes con Maca. Me cambie y me fui para la cas a mirar un poco de tele. Maca a los 15 minutos salió de su pieza.
>Me voy antes que llegue alguien – me dijo – Por las dudas.
No me dio tiempo a decir algo que Maca ya salia por la puerta.
Una media hora ms tarde llego Maria con mis suegros. Con bolsas del super y otras cosas.
>Hola amor… - me saludo Maria. ¿Cómo pasaste? ¿dormiste algo?
> Hola gorda. Si hace un rato nomas me levante.
>¿Qué sabes de los chicos? – me pregunto
>Ni idea. Fernando no me mando msj.
> Ok, ahí le escribo a Maca y le pregunto.
Paso un poco mas de tiempo y llego Fernando con los chicos. Unos minutos mas tarde llego Maca. Saludo a todos y su esposo con un beso en la boca. No pude evitar sonreír por dentro. Maca lo besaba y Fernando contento, sin saber que esa misma tarde Maca tenia casi toda mi pija eyaculando dentro de su boca.
Ya cerca de las 20 hs. llego mi cuñado Marcelo. Llego con una chica. Obviamente esa chica era la que se había culeado esa tarde.
>Hola a todos – saludo Marcelo.
>Hola – saludo la chica – con voz timida.
>Ella es Camila - Les presento – Ella es mi hermana Macarena y ella mi otra hermana Maria – dijo Marcelo y presento a su “novia” a sus hermanas.
>Hola, un gusto. – contestaron ambas hermanas casi a la vez.
> El es Fernando, el esposo de Maca – dijo Marcelo-
> Hola, ¿Cómo estas? – contesto Fernando mientras la saludaba con un beso.
> Y el es Raul – dijo Marcelo refiriéndose a mi -
Mica se acerco y me saludo con un beso. Yo me pare para saludarla.
>Hola Mica, un gusto –
Mica era un chica con lindo cuerpo, alta. Tenia un buen par de tetas, no tanto culo pero con buenas piernas. De cara no era muy linda. Pero tenia lo suyo, sobre todo lindos ojos.
No podía evitar recordar que esa tarde la había visto mientras se la garchaban. Recordaba su conchita y sus labios hinchados por recibir la pija de mi cuñado. No podía evitar recordar a Mica cabalgando y gimiendo. En un momento Mica saludo a mis suegros. Los cuales evidentemente ya la conocían. Maca ni bien tuvo oportunidad me miro. Nuestra miradas se cruzaron y fue evidente que nos ambos pensábamos en los mismo, pensábamos en Mica mientras se la garchaban.
>Heyy ustedes no contaron nada – dijo Maria – refiriéndose a sus padres. No sabia que mi hermanito tenia novia – comento riendose
>Por que debería de contar – dijo mi suegra – el es quien debe hacerlo.
Esa noche cenamos todos juntos. Cuando nos fuimos a dormir ni bien me acosté me dormí.
CONTINUARA.
P/D: Se me hizo demasiado largo el relato, pero no quería cortarlo para que no se pierda el hilo. Disculpen.
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