Nunca había ido a un masajista erótico.
Hace un par de meses estaba con mucha calentura. No tenía pija y eso me pone frenética.
En esos momentos es cuando me depilo toda (voy a una depiladora mariquita que me deja sin un pelito), uso tangas hilo todo el día, incluso para ir a trabajar y le doy duro a mis amantes (Ricardo y Javier, 2 conso de 19x 5 a los que bauticé con los nombres de los machos que me enloquecen), y cuando no doy más de caliente mi cola se vuelve vegana (pepinos a full jajajaj).
Cuestión que ya ni eso me calmaba, necesitaba un hombre.
No solo la pija. Sus manos, besos, el peso de su cuerpo sobre el mio y especialmente la leche!!!
Un puto amigo y veterano como yo me tiró la idea de ir a un masajista erótico y me pasó algunos celu de tipos a los que él iba cuando estaba como yo, o sea necesitado de pija jajaj.
Cuestión que llamé a algunos y finalmente me decidí por uno que me ofrecía cogerme o la alternativa era que me hacía la cola con aparatos.
Arreglamos que los juguetes los llevaba yo y él sólo me haría masajes eróticos para calentarme y en el momento de máxima calentura mia me pondría mis juguetes hasta que yo llegara al orgasmo.
Me aclaró que el precio que pactamos no incluía que él participara sexualmente conmigo.
Sólo el manoseo previo y el uso de mis juguetes. Si yo quería algo más me cobraría extra.
El día y a la hora pactados llegué a su "consultorio". Era masajista de verdad, matriculado y todo pero además brindaba este "servicio" a quien lo pidiera y me dijo que la mayoría eran hombres como yo, casados y tapados y que necesitaban pija cada tanto jajajaj.
Bueno, pasamos al gabinete, me saqué la ropa y solo me dejé el hilo dental. Él también se sacó la ropa excepto un boxer que marcaba un lindo bulto.
Empezó a masajerame estando yo de espaldas en la camilla.
Homros, pecho, abdomen, muslos.
Se paró en la cabecera de la camilla y mientras me masajeaba las tetillas me apoyaba el bulto en mi cabeza. Lo sentía grande pero no duro, era un profesional el turro.
Al poco rato me hizo poner boca abajo y me preguntó por los juguetes. Le dije que los agarrara de la mochila que llevé y que ya estaban enforrados.
Cuando los tomó le dije cual era Ricardo y cual Javier y que yo quería empezar con Javier para después llegar al orgasmo con Ricardo.
Se rió y dijo "buen tamaño los chiches".
Empezó a masajear mii espalda y bien pronto se dedicó a mi cola.
Agarraba mis cachetes cada uno con una mano y me abría como un libro.
El turro quería ver que tan abierto tenía mi ano!!
Me puso gel en el agujero y con un dedo primero y 2 después me lubricó bien el hoyito y me dijo que le avisara cuando quisiera que me ponga a Javier.
Le pedí que siguiera un ratito más abriendo mi ano con sus dedos y que cuando él quisiera empezara a meter a Javi en mi colita.
Noté que sus dedos entraban en mi cola más profundo que al principio. lento, suave pero más profundo y que al sacarlos los abría. Pensé, quiere dilatarme bien para que los chiches entren sin tanto dolor. Me entregué a ese placer y en ningún momento me toqué aunque mi pija estaba más que gomosa.
Después de varias maniobras con sus dedos expertos dijo "aquí viene Javi" y sentí la cabeza de mi juguetes apoyarse en mi ano. Empezó a presionar suave pero firme y en pocos segundos sentí la cabeza de esa pija de goma atravesar mi esfínter anal casi sin dolor y con casi nada de resistencia.
Mi masajista empezó un vaiven con Javi en el cual con cada movimiento lo hacía entrar un poco más.
Agregaba un poco de gel cada tanto hasta que en muy pocos segundos Javi estaba metido en mi recto por completo (sentí los huevos del conso pegados a mis nalgas!!)
Una vez que entró todo el turro empezó a cogerme a full.
Sacaba a Javi casi por completo y antes que se salga lo volvía a enterrar en mi culo hasta las bolas.
Lo hacía lento y suave pero el movimiento era contínuo y tan profundo como nunca lo había sentido.
El placer era tremendo y quise tocarme pero no me dejó.
No te toques me ordenó. Falta Ricardo y me dijiste que querías tener tu orgasmo con él.
Obedecí su orden y me excitó más todavía sentir que me dominaba.
Él estaba a un costado de la camilla trabajando mi cola y yo boca abajo levantaba mi pelvis para que la penetración que me hacía con Javier llegara lo más dentro mio que fuera posible.
En un momento en el que estaba Javi en pleno vaiven en mi cola me di cuenta que mi masajista tenía su bulto apoyado contra mi cuerpo y noté que estaba duro. Muy duro.
Eso me calentó todavía más y mientras disfrutaba de esa cogida estupenda que me hacía con Javi empecé a fantasear con que el turro, caliente como se notaba que estaba, en algún momento ocuparía el lugar de Javi en mi cola y terminaría siendo él quien me preñara el orto.
Bueno, esa fue mi fantasía pero no pasó.
Lo que pasó fue que despues de un buen rato de ser cogido por Javi, mi masajista retiró el chiche de mi cola y diciendo "ahora le toca a Ricardo", me enterró el segundo chiche en mi ya dilatado ano de una y hasta los huevos.
Gemí como la trola que soy al sentir a Ricardo llenar el vacío que dejó Javi y volver a dilatar mi maltratado esfínter que ya casi no podía contraerse de tan estirado que estaba.
Con Ricardo metido por completo en mi recto, el turro del masajista empezó a cogerme pero esta vez no con movimiento de vaiven, mejor dicho no solamente con ese movimiento.
Era una mezcla de vaiven con círculos que juntos me hacían delirar de placer.
El turro literalmente me revolvía el orto haciendo entrar y salir casi por completo a Ricardo y volviéndome más loca de calentura de lo que ya estaba.
Cuando vio que yo no daba más y estaba a punto de tener el mayor y mejor orgasmo con juguetes que tuve en mi vida hizo lo que no me esperaba.
Enterró a Ricardo en mi culo hasta los huevos, me ordenó juntar las piernas y apretar los glúteos para que mi amante de goma no se saliera y haciéndome girar la cabeza solo dijo "chupame la pija y tragá toda mi leche, puta", como una orden que no se podía ni yo quería desobedecer.
En pocos segundos, esa pija en mi boca largó una cantidad importante de semen agridulce, espeso y caliente que tragué desde el primero de los 5 chorros que mi masajista largó.
Con una mano sotuve a Ricardo dentro de mi culo mientras me deleitaba con la leche que estaba saboreando y ahí me di cuenta que en algún momento de tanta excitación también yo había tenido mi orgasmo ya que sentí mi pija y huevos bañados en mis propios jugos.
Mi masajista dejó su verga en mi boca un buen rato hasta que se ablando y salió sola.
Que buena cogida y que riquísima leche dije todavía disfrutando del placer que ese turro me regaló.
"Ahí atrás está el baño" dijo señalando una cortina. "Higienizate y vestite y no comentes con nadie que te di mi leche y no te cobré" dijo con tono serio. "Me calenté y me dejé llevar pero no se va a repetir, la próxima tendrás que pagar, estamos" dijo y agregó, "ahora andate que tengo otro cliente"
Estaba como enojado pero al pasar a mi lado me dio un pico y mirándome a los ojos me dijo "me calienta mucho lo puto que sos y como traga tu culo, arreglemos un precio y quiero cogerte yo y llenarte el culo y la boca de pija y leche".
Quedé que parecía una muñeca de trapo. Me temblaban las piernas.
me higienicé y también a mis amantes, me vestí y salí del gabinete.
En la sala de espera estaba un tipo de maso mi edad que bajó la mirada cuando yo salí.
Me acerqué a mi masajista y le agradecí sus servicios prometiéndole volver.
Quedé súper relajada le dije para que el tipo escuchara y con un apretón de manos me fui.
Hace un par de meses estaba con mucha calentura. No tenía pija y eso me pone frenética.
En esos momentos es cuando me depilo toda (voy a una depiladora mariquita que me deja sin un pelito), uso tangas hilo todo el día, incluso para ir a trabajar y le doy duro a mis amantes (Ricardo y Javier, 2 conso de 19x 5 a los que bauticé con los nombres de los machos que me enloquecen), y cuando no doy más de caliente mi cola se vuelve vegana (pepinos a full jajajaj).
Cuestión que ya ni eso me calmaba, necesitaba un hombre.
No solo la pija. Sus manos, besos, el peso de su cuerpo sobre el mio y especialmente la leche!!!
Un puto amigo y veterano como yo me tiró la idea de ir a un masajista erótico y me pasó algunos celu de tipos a los que él iba cuando estaba como yo, o sea necesitado de pija jajaj.
Cuestión que llamé a algunos y finalmente me decidí por uno que me ofrecía cogerme o la alternativa era que me hacía la cola con aparatos.
Arreglamos que los juguetes los llevaba yo y él sólo me haría masajes eróticos para calentarme y en el momento de máxima calentura mia me pondría mis juguetes hasta que yo llegara al orgasmo.
Me aclaró que el precio que pactamos no incluía que él participara sexualmente conmigo.
Sólo el manoseo previo y el uso de mis juguetes. Si yo quería algo más me cobraría extra.
El día y a la hora pactados llegué a su "consultorio". Era masajista de verdad, matriculado y todo pero además brindaba este "servicio" a quien lo pidiera y me dijo que la mayoría eran hombres como yo, casados y tapados y que necesitaban pija cada tanto jajajaj.
Bueno, pasamos al gabinete, me saqué la ropa y solo me dejé el hilo dental. Él también se sacó la ropa excepto un boxer que marcaba un lindo bulto.
Empezó a masajerame estando yo de espaldas en la camilla.
Homros, pecho, abdomen, muslos.
Se paró en la cabecera de la camilla y mientras me masajeaba las tetillas me apoyaba el bulto en mi cabeza. Lo sentía grande pero no duro, era un profesional el turro.
Al poco rato me hizo poner boca abajo y me preguntó por los juguetes. Le dije que los agarrara de la mochila que llevé y que ya estaban enforrados.
Cuando los tomó le dije cual era Ricardo y cual Javier y que yo quería empezar con Javier para después llegar al orgasmo con Ricardo.
Se rió y dijo "buen tamaño los chiches".
Empezó a masajear mii espalda y bien pronto se dedicó a mi cola.
Agarraba mis cachetes cada uno con una mano y me abría como un libro.
El turro quería ver que tan abierto tenía mi ano!!
Me puso gel en el agujero y con un dedo primero y 2 después me lubricó bien el hoyito y me dijo que le avisara cuando quisiera que me ponga a Javier.
Le pedí que siguiera un ratito más abriendo mi ano con sus dedos y que cuando él quisiera empezara a meter a Javi en mi colita.
Noté que sus dedos entraban en mi cola más profundo que al principio. lento, suave pero más profundo y que al sacarlos los abría. Pensé, quiere dilatarme bien para que los chiches entren sin tanto dolor. Me entregué a ese placer y en ningún momento me toqué aunque mi pija estaba más que gomosa.
Después de varias maniobras con sus dedos expertos dijo "aquí viene Javi" y sentí la cabeza de mi juguetes apoyarse en mi ano. Empezó a presionar suave pero firme y en pocos segundos sentí la cabeza de esa pija de goma atravesar mi esfínter anal casi sin dolor y con casi nada de resistencia.
Mi masajista empezó un vaiven con Javi en el cual con cada movimiento lo hacía entrar un poco más.
Agregaba un poco de gel cada tanto hasta que en muy pocos segundos Javi estaba metido en mi recto por completo (sentí los huevos del conso pegados a mis nalgas!!)
Una vez que entró todo el turro empezó a cogerme a full.
Sacaba a Javi casi por completo y antes que se salga lo volvía a enterrar en mi culo hasta las bolas.
Lo hacía lento y suave pero el movimiento era contínuo y tan profundo como nunca lo había sentido.
El placer era tremendo y quise tocarme pero no me dejó.
No te toques me ordenó. Falta Ricardo y me dijiste que querías tener tu orgasmo con él.
Obedecí su orden y me excitó más todavía sentir que me dominaba.
Él estaba a un costado de la camilla trabajando mi cola y yo boca abajo levantaba mi pelvis para que la penetración que me hacía con Javier llegara lo más dentro mio que fuera posible.
En un momento en el que estaba Javi en pleno vaiven en mi cola me di cuenta que mi masajista tenía su bulto apoyado contra mi cuerpo y noté que estaba duro. Muy duro.
Eso me calentó todavía más y mientras disfrutaba de esa cogida estupenda que me hacía con Javi empecé a fantasear con que el turro, caliente como se notaba que estaba, en algún momento ocuparía el lugar de Javi en mi cola y terminaría siendo él quien me preñara el orto.
Bueno, esa fue mi fantasía pero no pasó.
Lo que pasó fue que despues de un buen rato de ser cogido por Javi, mi masajista retiró el chiche de mi cola y diciendo "ahora le toca a Ricardo", me enterró el segundo chiche en mi ya dilatado ano de una y hasta los huevos.
Gemí como la trola que soy al sentir a Ricardo llenar el vacío que dejó Javi y volver a dilatar mi maltratado esfínter que ya casi no podía contraerse de tan estirado que estaba.
Con Ricardo metido por completo en mi recto, el turro del masajista empezó a cogerme pero esta vez no con movimiento de vaiven, mejor dicho no solamente con ese movimiento.
Era una mezcla de vaiven con círculos que juntos me hacían delirar de placer.
El turro literalmente me revolvía el orto haciendo entrar y salir casi por completo a Ricardo y volviéndome más loca de calentura de lo que ya estaba.
Cuando vio que yo no daba más y estaba a punto de tener el mayor y mejor orgasmo con juguetes que tuve en mi vida hizo lo que no me esperaba.
Enterró a Ricardo en mi culo hasta los huevos, me ordenó juntar las piernas y apretar los glúteos para que mi amante de goma no se saliera y haciéndome girar la cabeza solo dijo "chupame la pija y tragá toda mi leche, puta", como una orden que no se podía ni yo quería desobedecer.
En pocos segundos, esa pija en mi boca largó una cantidad importante de semen agridulce, espeso y caliente que tragué desde el primero de los 5 chorros que mi masajista largó.
Con una mano sotuve a Ricardo dentro de mi culo mientras me deleitaba con la leche que estaba saboreando y ahí me di cuenta que en algún momento de tanta excitación también yo había tenido mi orgasmo ya que sentí mi pija y huevos bañados en mis propios jugos.
Mi masajista dejó su verga en mi boca un buen rato hasta que se ablando y salió sola.
Que buena cogida y que riquísima leche dije todavía disfrutando del placer que ese turro me regaló.
"Ahí atrás está el baño" dijo señalando una cortina. "Higienizate y vestite y no comentes con nadie que te di mi leche y no te cobré" dijo con tono serio. "Me calenté y me dejé llevar pero no se va a repetir, la próxima tendrás que pagar, estamos" dijo y agregó, "ahora andate que tengo otro cliente"
Estaba como enojado pero al pasar a mi lado me dio un pico y mirándome a los ojos me dijo "me calienta mucho lo puto que sos y como traga tu culo, arreglemos un precio y quiero cogerte yo y llenarte el culo y la boca de pija y leche".
Quedé que parecía una muñeca de trapo. Me temblaban las piernas.
me higienicé y también a mis amantes, me vestí y salí del gabinete.
En la sala de espera estaba un tipo de maso mi edad que bajó la mirada cuando yo salí.
Me acerqué a mi masajista y le agradecí sus servicios prometiéndole volver.
Quedé súper relajada le dije para que el tipo escuchara y con un apretón de manos me fui.
1 comentarios - La leche me la regaló