Hola amigos de Poringa 👋
Les contamos otra historia real que vivimos con mi reina. Somos Reyna & Fantasma, y lo nuestro es distinto: no subimos videos explícitos, sino relatos de lo que pasa entre nosotros, de verdad.
Esto fue ayer martes a la noche. Desde temprano veníamos con ganas y dijimos:
“Hoy no nos quedamos en casa”.
Terminamos en un telo cerca de donde vivimos. Apenas entramos a la habitación, ya sentíamos esa vibra de clandestinidad que tanto nos enciende.
(Y con esta promo como no negarse)

Ella se tiró en la cama con esa sonrisa que conozco demasiado bien: la que esconde perversión. “A ver si sos sombra de verdad, o te quemás en mi fuego”, me desafió. Esa frase sola me dejó sin aire.
Me lancé sobre ella, besándola con hambre. Su cuerpo se encendía debajo del mío y mis manos no podían decidir si arrancarle la ropa o recorrerla entera. La desvestí casi a tirones, mientras sus uñas se clavaban en mi piel y su voz ronca me pedía: “Más fuerte, no pares”.
Le besé el cuello, bajé a sus tetas y me quedé lamiendo sus pezones duros mientras mis dedos la encontraban empapada.
Bastó meterlos apenas para que se arquease, mordiéndose el labio para no gritar.
El temblor en sus piernas la delataba. La hice acabar con la mano, sintiendo su respiración quebrada contra mi oído.
Todavía jadeando, me empujó contra la pared. Me bajó el pantalón de un tirón y se arrodilló sin decir nada.
Su boca me envolvió con una desesperación sucia, húmeda, salvaje. El cuarto quedó en silencio salvo por el ruido de su garganta tragando y mi respiración rota.
La miraba desde arriba, sus ojos brillando de lujuria como diciendo: “Acá mando yo, pero haceme tuya”.
Yo la tomé del pelo, marqué el ritmo y acabé fuerte en su boca. Ella lo tragó todo sin dudar, relamiéndose con una sonrisa perversa antes de levantarse.
Se me acercó, me mordió el labio y me susurró: “Esto recién empieza, Fantasma”. Y tenía razón: esa noche no terminó ahí.
Así fue nuestra noche de martes. Real, prohibida y sin filtro.
Lo que contamos no es fantasía: es nuestra vida.
Pronto les contamos la Parte 2… y créanme, lo que pasó después fue todavía más salvaje.

Reina & Fantasma 👑👻
Seguimos confesando
Les contamos otra historia real que vivimos con mi reina. Somos Reyna & Fantasma, y lo nuestro es distinto: no subimos videos explícitos, sino relatos de lo que pasa entre nosotros, de verdad.
Esto fue ayer martes a la noche. Desde temprano veníamos con ganas y dijimos:
“Hoy no nos quedamos en casa”.
Terminamos en un telo cerca de donde vivimos. Apenas entramos a la habitación, ya sentíamos esa vibra de clandestinidad que tanto nos enciende.
(Y con esta promo como no negarse)

Ella se tiró en la cama con esa sonrisa que conozco demasiado bien: la que esconde perversión. “A ver si sos sombra de verdad, o te quemás en mi fuego”, me desafió. Esa frase sola me dejó sin aire.
Me lancé sobre ella, besándola con hambre. Su cuerpo se encendía debajo del mío y mis manos no podían decidir si arrancarle la ropa o recorrerla entera. La desvestí casi a tirones, mientras sus uñas se clavaban en mi piel y su voz ronca me pedía: “Más fuerte, no pares”.
Le besé el cuello, bajé a sus tetas y me quedé lamiendo sus pezones duros mientras mis dedos la encontraban empapada.
Bastó meterlos apenas para que se arquease, mordiéndose el labio para no gritar.
El temblor en sus piernas la delataba. La hice acabar con la mano, sintiendo su respiración quebrada contra mi oído.
Todavía jadeando, me empujó contra la pared. Me bajó el pantalón de un tirón y se arrodilló sin decir nada.
Su boca me envolvió con una desesperación sucia, húmeda, salvaje. El cuarto quedó en silencio salvo por el ruido de su garganta tragando y mi respiración rota.
La miraba desde arriba, sus ojos brillando de lujuria como diciendo: “Acá mando yo, pero haceme tuya”.
Yo la tomé del pelo, marqué el ritmo y acabé fuerte en su boca. Ella lo tragó todo sin dudar, relamiéndose con una sonrisa perversa antes de levantarse.
Se me acercó, me mordió el labio y me susurró: “Esto recién empieza, Fantasma”. Y tenía razón: esa noche no terminó ahí.
Así fue nuestra noche de martes. Real, prohibida y sin filtro.
Lo que contamos no es fantasía: es nuestra vida.
Pronto les contamos la Parte 2… y créanme, lo que pasó después fue todavía más salvaje.

Reina & Fantasma 👑👻
Seguimos confesando
2 comentarios - Una noche en el oeste p1