Hoy quiero contarles como fui usada en una negociación, trabajo como vendedora, en el cargo de gerente, por lo que parte de mis funciones es atender clientes y contratos importantes, con este cliente ya tenemos problemas para firmar el contrato y al tratarse de un ingreso importante para la empresa y por lo tanto para mí, me dispuse a hacer lo posible.
El día de la reunión me decidí ir vestida con una blusa gris de botones, falda negra ajustada, lo que resalta mi culo, debajo llevada un sostén negro de media copa, una tanga igual negra a juego, zapatos altos, quería dar una imagen de mujer empresaria, sin contar que el plan podría cambiar.

Llegue unos minutos antes para acomodar todo, la reunión era condos hombres quienes deciden firmar o no, desde el inicio note que ambos me miraban de arriba abajo, principalmente en mi culo y mis piernas, subimos por el elevador hasta el piso 10, durante el trayecto no me quitaron la mirada, yo me sentía nerviosa, pero me gustaba sentirme deseada, llegamos y era una oficina elegante con un escritorio que de espalda daba a un enorme ventanal, un par de sillas para invitados, un sillón y una mesa de centro, llamemos al primero, es quien es el jefe, se sentó en la silla de espalda a la ventana, el otro del área técnica, él se sentó al lado mío.
Durante la conversación, no me quitaban la vista de mis pechos, si bien no tenía escote se notaba el tamaño, seguimos negociando las condiciones, pedían descuento, menor tiempo de entrega, yo no puedo asegurar el tiempo, comente, sin embargo, ambos amenazaron con no firmar, cosa que me asusto ya que era un gran negocio, en la negociación preguntaron sobre qué atención tendrían, yo comente sobre nuestro equipo de especialistas, a lo cual ellos al unísono dijeron que yo debería estar dentro de ese equipo, hasta ahí no había notado nada más que sus miradas
Yo pensé que, como personal de atención, al mismo tiempo pedro se levantó de la silla, se coloca detrás de mí, pone sus manos en mis hombros, lo cual me impidió levantarme.
Al voltearse puedo ver que se había sacado su verga, era grande y venoso, aunque se veía dormida tenía un tamaño grande, camino hacia mí, Intente levantarme, pero el otro me sujetaba, sentí su verga crecer en mi espalda, el primero se acercó más se colocó frente de mí, me asuste cuando dijo: Saldrás con un gran negocio, me asuste y comencé a temblar, unas lágrimas salieron de mis ojos, estaba tan incrédula que no pude reaccionar hasta que sentí unas manos que apretaban mis pechos, cada uno está apretando un pecho, colocaron cada uno su verga en mis manos, estaba masturbándolos mientras ellos desabrochaban mi blusa, dejaron a la vista mi sostén, seguían apretando mis pechos, yo gemía por el dolor que me causaba, pero me comenzaba a excitar la situación.
Después de unos minutos sus vergas estaban ya más duras, cuando me levantan para llevarme cerca de la ventana y ponerme de rodillas para chupar ambas vergas, ya no tenía ropa arriba, mientras chupaba ellos seguían en mis pechos, seguía chupando y ellos comenzaron a decirme cosas como, puta, zorra, perra, etc.
Me tomaron de los brazos para levantarme y me llevaron al escritorio, me desnudaron por completo y ahí notaron lo mojada que ya estaba, me colocaron acostada con las piernas separadas y uno se puso entre ellas, coloco su verga en mi entrada y la pasaba entre mis labios, cada que lo hacía me mojaba más, me fue penetrando lento, yo estaba ya tan lubricada que entro delicioso, el otro se colocó del lado contrario del escritorio y puso su verga cerca de mi cara, yo la chupé, comencé por la cabeza y luego lo fue metiendo, ya estaba muy excitada, mis gemidos eran ahogados por la verga en mi boca, después de un rato cambiaron de posición, esta vez el que me la metió por la vagina, la metió de un golpe, aunque al principio me dolió cuando me acostumbre a sus embestidas fue cuando tuve mi primer orgasmo, yo era ahora la que pedía más y fue complacida, uno se acostó cerca de la ventana y me sentaron, lo quería meter por mi culo, que no puso mucha resistencia después de ser lubricado por mis propios fluidos, cuando ya estaba con la verga en el culo el otro me penetro por la vagina, era mi primera doble y lo estaba disfrutando, gemía muy bajito por le mido a que alguien escuchara pero estar cerca de la ventana acrecentaba mi excitación, estuvimos así hasta que sentí como aceleraron el ritmo y sentí su leche caliente en mi interior, me volví a correr.

Me volví a poner de rodillas para limpiar sus vergas, que se volvieron poner duras, me recargué con las manos en la ventana y pedí que me cogieran, a lo cual se fueron tunando para hacerlo, gemía ya más alto, me puse otra vez de rodillas para seguir chupando y recibir sus corridas en la boca, me trague todo y limpie sus vergas, me levante, limpie algunos restos de leche de mi cuerpo, no me devolvieron mi ropa interior, así que solo me acomode la falda, la blusa y el saco, recogí mis cosas, el contrato ya firmado y me dispuse a salir, entes de cruzar la puerta me detuvieron y me dijeron que la próxima reunión seria con todo el equipo, esa palabras me excitaron.
Salí, tome el elevador y note que aun salía un hilo de leche que corría por mi pierna, lo limpie con un dedo y lo lamí, afortunadamente no había nadie, llegue al auto me quite el saco y salí del estacionamiento.
Cuando llegue a casa note que mi falda estaba manchada por la leche que me habían dejado dentro, me metí a bañar, de solo recordad me existe y masturbe, me corrí muy rico de pensar en las dos vergas dentro de mí, es algo tan rico que ya me estoy imaginado tener tres…
claro que repetí las reuniones y apliqué la misma técnica para firmar contratos, pero esas son otras historias
El día de la reunión me decidí ir vestida con una blusa gris de botones, falda negra ajustada, lo que resalta mi culo, debajo llevada un sostén negro de media copa, una tanga igual negra a juego, zapatos altos, quería dar una imagen de mujer empresaria, sin contar que el plan podría cambiar.

Llegue unos minutos antes para acomodar todo, la reunión era condos hombres quienes deciden firmar o no, desde el inicio note que ambos me miraban de arriba abajo, principalmente en mi culo y mis piernas, subimos por el elevador hasta el piso 10, durante el trayecto no me quitaron la mirada, yo me sentía nerviosa, pero me gustaba sentirme deseada, llegamos y era una oficina elegante con un escritorio que de espalda daba a un enorme ventanal, un par de sillas para invitados, un sillón y una mesa de centro, llamemos al primero, es quien es el jefe, se sentó en la silla de espalda a la ventana, el otro del área técnica, él se sentó al lado mío.
Durante la conversación, no me quitaban la vista de mis pechos, si bien no tenía escote se notaba el tamaño, seguimos negociando las condiciones, pedían descuento, menor tiempo de entrega, yo no puedo asegurar el tiempo, comente, sin embargo, ambos amenazaron con no firmar, cosa que me asusto ya que era un gran negocio, en la negociación preguntaron sobre qué atención tendrían, yo comente sobre nuestro equipo de especialistas, a lo cual ellos al unísono dijeron que yo debería estar dentro de ese equipo, hasta ahí no había notado nada más que sus miradas
Yo pensé que, como personal de atención, al mismo tiempo pedro se levantó de la silla, se coloca detrás de mí, pone sus manos en mis hombros, lo cual me impidió levantarme.
Al voltearse puedo ver que se había sacado su verga, era grande y venoso, aunque se veía dormida tenía un tamaño grande, camino hacia mí, Intente levantarme, pero el otro me sujetaba, sentí su verga crecer en mi espalda, el primero se acercó más se colocó frente de mí, me asuste cuando dijo: Saldrás con un gran negocio, me asuste y comencé a temblar, unas lágrimas salieron de mis ojos, estaba tan incrédula que no pude reaccionar hasta que sentí unas manos que apretaban mis pechos, cada uno está apretando un pecho, colocaron cada uno su verga en mis manos, estaba masturbándolos mientras ellos desabrochaban mi blusa, dejaron a la vista mi sostén, seguían apretando mis pechos, yo gemía por el dolor que me causaba, pero me comenzaba a excitar la situación.
Después de unos minutos sus vergas estaban ya más duras, cuando me levantan para llevarme cerca de la ventana y ponerme de rodillas para chupar ambas vergas, ya no tenía ropa arriba, mientras chupaba ellos seguían en mis pechos, seguía chupando y ellos comenzaron a decirme cosas como, puta, zorra, perra, etc.
Me tomaron de los brazos para levantarme y me llevaron al escritorio, me desnudaron por completo y ahí notaron lo mojada que ya estaba, me colocaron acostada con las piernas separadas y uno se puso entre ellas, coloco su verga en mi entrada y la pasaba entre mis labios, cada que lo hacía me mojaba más, me fue penetrando lento, yo estaba ya tan lubricada que entro delicioso, el otro se colocó del lado contrario del escritorio y puso su verga cerca de mi cara, yo la chupé, comencé por la cabeza y luego lo fue metiendo, ya estaba muy excitada, mis gemidos eran ahogados por la verga en mi boca, después de un rato cambiaron de posición, esta vez el que me la metió por la vagina, la metió de un golpe, aunque al principio me dolió cuando me acostumbre a sus embestidas fue cuando tuve mi primer orgasmo, yo era ahora la que pedía más y fue complacida, uno se acostó cerca de la ventana y me sentaron, lo quería meter por mi culo, que no puso mucha resistencia después de ser lubricado por mis propios fluidos, cuando ya estaba con la verga en el culo el otro me penetro por la vagina, era mi primera doble y lo estaba disfrutando, gemía muy bajito por le mido a que alguien escuchara pero estar cerca de la ventana acrecentaba mi excitación, estuvimos así hasta que sentí como aceleraron el ritmo y sentí su leche caliente en mi interior, me volví a correr.

Me volví a poner de rodillas para limpiar sus vergas, que se volvieron poner duras, me recargué con las manos en la ventana y pedí que me cogieran, a lo cual se fueron tunando para hacerlo, gemía ya más alto, me puse otra vez de rodillas para seguir chupando y recibir sus corridas en la boca, me trague todo y limpie sus vergas, me levante, limpie algunos restos de leche de mi cuerpo, no me devolvieron mi ropa interior, así que solo me acomode la falda, la blusa y el saco, recogí mis cosas, el contrato ya firmado y me dispuse a salir, entes de cruzar la puerta me detuvieron y me dijeron que la próxima reunión seria con todo el equipo, esa palabras me excitaron.
Salí, tome el elevador y note que aun salía un hilo de leche que corría por mi pierna, lo limpie con un dedo y lo lamí, afortunadamente no había nadie, llegue al auto me quite el saco y salí del estacionamiento.
Cuando llegue a casa note que mi falda estaba manchada por la leche que me habían dejado dentro, me metí a bañar, de solo recordad me existe y masturbe, me corrí muy rico de pensar en las dos vergas dentro de mí, es algo tan rico que ya me estoy imaginado tener tres…
claro que repetí las reuniones y apliqué la misma técnica para firmar contratos, pero esas son otras historias
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