La primera que olí a mi suegra

Todo comenzó un día que estando en la casa de mi suegra entré al baño y mire que estaba una de sus tangas encima de toda la ropa sucia, al principio no le tomé importancia pero poco a poco se fue metiendo en mi cabeza el saber a qué le olía su puchita tanto así que me animé a agarrarla y comencé a oler esa tanga sucia, aún recuerdo ese rico olor que me volvió completamente tanto así que sin siquiera tocarme la verga se me empezó a poner dura y poco a poco me fui calentando por su rico olor y comencé a masturbarme con su tanguita mi cara imaginando todo lo que le pudiera hacer a su rica puchita después me la puse en la verga y comencé a masturbarme con ella dejando mi olor en esa rica tanguita de mi suegra