La culona Jeni me dejó de cama

Una tarde como cualquier otra la Vi pasar por la ventana de casa, no podía ser que una mina tuviera ese orto, rubia relativamente petiza, una cintura muy marcada y un culo hermoso, tirando q gordo, moviéndose con cada paso, sentí automáticamente electricidad corriéndome por la pija, pegó un salto y ahí mismo ese culo la conquistó.
Apartir de ese día la busque por todos lados, por la calle, los negocios, la cruce un par de veces, pero me miró de reojo, el marido mayor que ella es farmacéutico y según investigue se mudo hace poco a la zona, tiene hijos pero no viven con ella, no sabía que mierda hacer para hablarla, solo la veo pasar por casa, una noche la encontré en redes, y le empecé a buscar charla, costó un par de días pero la convenció de juntarnos a tomar un agua, porque no toma café ni alcohol, el día llegó y siiiiii, cayó con una calza bien metida en el orto, lo marcaba tremendamente y ya mi pija estaba loca, le había tirado varias veces que lo que me llamo la atención siempre fue su orto, la verdad nos miramos tomando el agua y la convenció de ir hasta mi casa, estaba reacia pero aflojó, entramos y no aguante, le metí una mano en el orto, lo tenía bien firme, la pija no me daba mas, ella medio puso resistencia la agarre del brazo y siempre de atrás, apoyándole la pija en el orto le besaba el cuello afirmando la bien a mi cuerpo, así estube un rato, ella se dió vuelta y me comió la boca, me sonaba la pija por encima de la ropa, no podía aguantar la pija en el gym, la saqué afuera y por fin me la agarro con esas manos hermosas y me empezó a pajear, no puedo ser tan pajero pero moría de calentura por esta hdp, ese orto era una obsesión hacia semanas, yo volaba con esa paja, pero quería más, la tire contra el sillón, la levanté de sus caderas dejándola bien en cuatro, le baje la calza y ahí estaba mi vida ese ortaso soñado, todo para mí, rosaditos, inmaculado y una conchita divina, si no me caso pega en el palo, y así mismo me tire a chuparle el orto, vainillaaaa, no podia ser que delicia de orto y lengueteaba su concha, ella genia hermosamente, yo seguía chupándole el orto, la puerteaba bien con lq lengua, ensalive, media dedos estaba como loco, ella se pajeaba y tiraba un orgasmo, que no desaproveche y chupe completo, es un infierno la culona, tan tímida que parecía, apunte la pija a la entrada, sentir el contacto de la cabeza de mi pija con ese hueco me saco, los disfrutaba, frotaba pechaba muy suave y lo sentía latir en la cabeza , ella tiraba gemidos suaves y seguía metiéndose los dedos en la concha, en cada manoseada sentía sus piernas chorreadas por su acabada, la agarre fuerte de sus caderas y empecé metiéndole la cabeza, ella pegó un gemido más fuerte, delicado y empecé el pone y saca, solo le metía la cabeza y su orto fue cediendo suave, ahí empecé a meterle el tronco y sentí como se retorcía con otra acabada, se la metí de a poco entera cuando entro toda sentí el placer de tener ese orto bien ensartado con mi pija y empecé a cogerla, ya los gemidos no eran delicados, gritaba como loca y yo me retorcía de placer, con la pija bien adentro la enderece pegando su espalda a mi pecho, le manosie bien las tetas y la seguía cogiendo, soltó su cuerpo y se dejó romper bien el orto, ella genia ya más tímidamente, sin fuerza, no se pajeaba más y después de un buen rato sentí mis venas incharse, lo noto y empezó a empujar su orto contra mi pija, no sé cuánta leche me salió, pero fue mucha, fue glorioso llenarle el orto de leche, teníamos los dos como cerdos, no me quedo una sola gota de leche, me quedé un rato con la pija adentro, y se la saqué, se tocaba el orto, había quedado bien abierto, unto los dedos y se los chupo, se dió vueltas y empezó a chuparme la pija como poseída, la chupaba desesperadamente y me movía el orto como si hubiera ganado la pelea, me chupaba los huevos, el tronco detalladamente. Recorría mis venas con su lengua, se atoraba pero trataba de meterse toda la pija dentro , le agarre la cabeza la peche contra mi y empecé a tirarle mi leche, paso derecho por su gargantaz no se quejo para nada, estaba poseído, se la saco de la boca y chupo la cabeza, chupo hasta sacarme la última gota, se tiró en la cama con las piernas abierta, su concha era un rio y del orto le seguía cayendo leche,
Me dijo hdp .irá como me dejaste, se empezó a vestir, me dió un beso en la boca y me dijo, ya te sacaste las ganas de cogerme el orto, así que listo, me voy a casa, y salió como si nada,
Obvio la voy a buscar, quiero más y leche me sobra