Cómo ya conté en otras oportunidades desde chic@ se me notaba lo mariposa y era un final cantado q terminaría siendo mujer trans.
Esto paso cdo era apenitas mayor de edad, vieron que hay un dicho que dice "ojo de loca no se equivoca".
Tenía una contractura en la zona de la espalda por lo que tuve que ir a un kinesiólogo, saque un turno con un veterano de mi ciudad, un tipo de unos 60 años bastante bien conservado, un poquito de panza y canoso, no es leo Dicaprio pero está lindo.
Yo ya me vestía de mujer en la intimidad, de hecho muchas veces ya usaba ropa interior femenina aunque arriba este con ropa de hombre. Pero ese día en particular no, me daba un poquito de cosa, el turno era como a las 4 de la tarde, llegué puntual, me hizo pasar y sacarme la remera, (por más que una quiere disimular y crea q no se nota, cdo va caminando va desparramando plumas). Me puso esa lámpara q da calor y alternaba entre otros pacientes y yo, (habrá tenido 3 pacientes mas). Paso siguiente me saco la lampara y me puso una crema y empezó a hacerme masajes con sus manos fuertes , duras de macho. Yo que amo los masajes estaba más que cómoda disfrutando. Mientas me descontracturaba la espalda Charlamos de trivialidades, esas charlas sin mucho sentido, hasta ahí todo normal, pero a medida que avanzamos me tiró un par de chistes y comentarios en voz un poquito más baja y ahi ya active mi gaydar, pensaba entre mi "este viejito me quiere comer" la siguiente sesión a me cito al mismo horario. Pero yo ya fui en plan comprobar que mi instinto marica no fallaba.
Me preparé distinto, debajo de mi ropa de hombre me puse una bombachita de mi mamá, una tanguita sutil, blanca de lycra pero con puntillita en la cintura, cosa que cdo me saque la remera y me masajee se pueda notar. Igual q el día anterior me hizo pasar a un box, me saque la remera, me puso la lámpara y me quedé acostada esperando que llegue mi turno de masajes. Ya había un poquito más de confianza así q la charla de un principio ya fue más amena, arranco x la espalda alta y cdo bajo se dió cuenta de la sorpresita, empezo como a tartamudear y mientras bajaba sus manos me agarró con fuerza un cachete (yo pare más la cola como demostración de q me gustaba lo q me hacía) pero cómo había mucha gente afuera se contuvo y no dijo nada.
Terminamos y me dice "para mañana no tengo turno temprano, venite a las 21" ahí dije.. picó, último turno.
Ese día hice la preparación q hacemos l@s pasiv@s, depilación de la zona y enema para ir limpiar, por las dudas. Además la bombachita ya no era sutil, un culote less todo de encaje rojo y un plug de stras, con mucha vaselina para q vaya lubricando y dilatando. Llegué, me saludo normal, pase al box y el todavía tenía q terminar con los otros pacientes, un ratito más, yo ya acostada con la lámpara, un poquito nerviosa y calentita, escucho que va saludando y queda consultorio vacío, solos el y yo. La cosa se puso linda, me saque el pantalón y quedé en bombacha acostada, vino y arrancó con los masajes como si nada, pero los masajes ya eran más fuertes como marcando autoridad de macho con su hembra, me empezó a tratar en femenino y eso me calentaba mucho. Arranco x arriba y fue bajando, mientras tanto yo haciéndome la tonta tocaba con mi brazo su bulto, se iba poniendo una piedra y yo ya me imaginaba comiéndolo. Hasta q llego a la parte baja de la espalda y me dice, "me parece q acá tmb hay una contractura q atender" por arriba de la bombachita me empezó a masajear la cola hasta que tocó el hueco y se topo con el plug, solo dijo "ufff".
El ambiente era fantástico, se respiraba calentura, me corrió la bombacha, me saco el plug y empezó a méteme dedos y lengüita, mí Dios q calentura que tenía, ya la cola me pedia pene a gritos. Lo saqué, me pare y empezamos a chapar como locos el me tocaba la cola y yo le iba sacando el ambo todo su pecho peludo al descubierto, hermoso, fui bajando y le metí la mano x adentro del boxer, estaba durísimo y yo estaba loca por ya metermelo en la boca así q me arrodille y me di el gusto, hasta que me lleno la boquita de lechita rica, el temblaba mientras me daba ese manjar calentito. Se sento en la camilla y la lujuria no paró volvimos a chapar como locos, pero el tmb tenía ganas de más me metió la mano x adentro de mi bombacha y empezó a pajearme, yo x lo gral no la uso, soy más q nada pasiva pero me dejo llevar, me hizo un pete riquísimo le acabé toda la boca y hasta en la barba le quedó, nos dimos ese beso blanco tan caliente como rico. Su verga ya estaba recuperada parece que mi lechita lo recargo de energía, me volvió a dar vueltas me quede paradita con las manos en la camilla y el se arrodillo a comerme la cola me la chupo con tantas ganas q casi acabo pero mi cola de puta necesitaba carne así q gimiendo como una gatita le implore q me penetre y mi macho cumplió, me
Pego una garchada hermosa entraba y salía esa verga de mi colita q ya estaba abierta tipo conchita hasta q volvió a acabar y ya no pudimos más, chapamos como novios, tomamos una cerveza mientras seguimos tocando ntros cuerpos, pero la cola de el tmb pedía carne, hacía mucho q no penetraba pero tenía q devolver el favor así q tmb arranque a comerle la cola peluda, me envaseline y adentro tmb, el gemia y disfrutaba, yo me calentaba más de ver como el gozaba q de la penetración misma, lo masturbe mientras lo garchaba y acabamos casi al mismo tiempo. Nos limpiamos, besamos y nos despedimos.
Esa fue la primera de muuuuchos muchos encuentros en diferentes lugares pero con la misma calentura.
Esto paso cdo era apenitas mayor de edad, vieron que hay un dicho que dice "ojo de loca no se equivoca".
Tenía una contractura en la zona de la espalda por lo que tuve que ir a un kinesiólogo, saque un turno con un veterano de mi ciudad, un tipo de unos 60 años bastante bien conservado, un poquito de panza y canoso, no es leo Dicaprio pero está lindo.
Yo ya me vestía de mujer en la intimidad, de hecho muchas veces ya usaba ropa interior femenina aunque arriba este con ropa de hombre. Pero ese día en particular no, me daba un poquito de cosa, el turno era como a las 4 de la tarde, llegué puntual, me hizo pasar y sacarme la remera, (por más que una quiere disimular y crea q no se nota, cdo va caminando va desparramando plumas). Me puso esa lámpara q da calor y alternaba entre otros pacientes y yo, (habrá tenido 3 pacientes mas). Paso siguiente me saco la lampara y me puso una crema y empezó a hacerme masajes con sus manos fuertes , duras de macho. Yo que amo los masajes estaba más que cómoda disfrutando. Mientas me descontracturaba la espalda Charlamos de trivialidades, esas charlas sin mucho sentido, hasta ahí todo normal, pero a medida que avanzamos me tiró un par de chistes y comentarios en voz un poquito más baja y ahi ya active mi gaydar, pensaba entre mi "este viejito me quiere comer" la siguiente sesión a me cito al mismo horario. Pero yo ya fui en plan comprobar que mi instinto marica no fallaba.
Me preparé distinto, debajo de mi ropa de hombre me puse una bombachita de mi mamá, una tanguita sutil, blanca de lycra pero con puntillita en la cintura, cosa que cdo me saque la remera y me masajee se pueda notar. Igual q el día anterior me hizo pasar a un box, me saque la remera, me puso la lámpara y me quedé acostada esperando que llegue mi turno de masajes. Ya había un poquito más de confianza así q la charla de un principio ya fue más amena, arranco x la espalda alta y cdo bajo se dió cuenta de la sorpresita, empezo como a tartamudear y mientras bajaba sus manos me agarró con fuerza un cachete (yo pare más la cola como demostración de q me gustaba lo q me hacía) pero cómo había mucha gente afuera se contuvo y no dijo nada.
Terminamos y me dice "para mañana no tengo turno temprano, venite a las 21" ahí dije.. picó, último turno.
Ese día hice la preparación q hacemos l@s pasiv@s, depilación de la zona y enema para ir limpiar, por las dudas. Además la bombachita ya no era sutil, un culote less todo de encaje rojo y un plug de stras, con mucha vaselina para q vaya lubricando y dilatando. Llegué, me saludo normal, pase al box y el todavía tenía q terminar con los otros pacientes, un ratito más, yo ya acostada con la lámpara, un poquito nerviosa y calentita, escucho que va saludando y queda consultorio vacío, solos el y yo. La cosa se puso linda, me saque el pantalón y quedé en bombacha acostada, vino y arrancó con los masajes como si nada, pero los masajes ya eran más fuertes como marcando autoridad de macho con su hembra, me empezó a tratar en femenino y eso me calentaba mucho. Arranco x arriba y fue bajando, mientras tanto yo haciéndome la tonta tocaba con mi brazo su bulto, se iba poniendo una piedra y yo ya me imaginaba comiéndolo. Hasta q llego a la parte baja de la espalda y me dice, "me parece q acá tmb hay una contractura q atender" por arriba de la bombachita me empezó a masajear la cola hasta que tocó el hueco y se topo con el plug, solo dijo "ufff".
El ambiente era fantástico, se respiraba calentura, me corrió la bombacha, me saco el plug y empezó a méteme dedos y lengüita, mí Dios q calentura que tenía, ya la cola me pedia pene a gritos. Lo saqué, me pare y empezamos a chapar como locos el me tocaba la cola y yo le iba sacando el ambo todo su pecho peludo al descubierto, hermoso, fui bajando y le metí la mano x adentro del boxer, estaba durísimo y yo estaba loca por ya metermelo en la boca así q me arrodille y me di el gusto, hasta que me lleno la boquita de lechita rica, el temblaba mientras me daba ese manjar calentito. Se sento en la camilla y la lujuria no paró volvimos a chapar como locos, pero el tmb tenía ganas de más me metió la mano x adentro de mi bombacha y empezó a pajearme, yo x lo gral no la uso, soy más q nada pasiva pero me dejo llevar, me hizo un pete riquísimo le acabé toda la boca y hasta en la barba le quedó, nos dimos ese beso blanco tan caliente como rico. Su verga ya estaba recuperada parece que mi lechita lo recargo de energía, me volvió a dar vueltas me quede paradita con las manos en la camilla y el se arrodillo a comerme la cola me la chupo con tantas ganas q casi acabo pero mi cola de puta necesitaba carne así q gimiendo como una gatita le implore q me penetre y mi macho cumplió, me
Pego una garchada hermosa entraba y salía esa verga de mi colita q ya estaba abierta tipo conchita hasta q volvió a acabar y ya no pudimos más, chapamos como novios, tomamos una cerveza mientras seguimos tocando ntros cuerpos, pero la cola de el tmb pedía carne, hacía mucho q no penetraba pero tenía q devolver el favor así q tmb arranque a comerle la cola peluda, me envaseline y adentro tmb, el gemia y disfrutaba, yo me calentaba más de ver como el gozaba q de la penetración misma, lo masturbe mientras lo garchaba y acabamos casi al mismo tiempo. Nos limpiamos, besamos y nos despedimos.
Esa fue la primera de muuuuchos muchos encuentros en diferentes lugares pero con la misma calentura.
4 comentarios - Putito en el kinesiologo