Hola, soy nuevo en esto de los relatos (como podrán observar es mi primer escrito) sin embargo llevo tiempo leyendo muchos otros textos de personas que les gusta liberar de esta forma la carga (por así decirlo) y hoy me toca a mí.
Todo comenzó cuando era un adolescente, unos 12 o 13 años aproximadamente y comencé en el mundo de la paja, luego entre compañeros nos juntábamos con un amigo del cual sabíamos era gay (si a esa edad ya distingues a cuáles de tus amigos les gusta por el culo). En los ratos libres del día como a las 3 o 4 PM invitamos a Jaime (nuestro amigo gay) a jugar a mi casa pues mis padres son maestros y ellos trabajaban a dos horas de dónde vivimos. Ese tiempo lo usábamos para *jugar* con Jaime a la mamá y el papá y casualmente este chico siempre pedía ser la mamá.
Nunca falta el amigo que ya vio coger a sus papás así que literalmente nos montabamos sobre Jaime y desnudos todos restregabamos nuestras verguitas en sus nalgas (por turnos evidentemente). Este comportamiento se repitió durante 3 año, pues a los 15 aproximadamente comenzamos a penetrar a Jaime, pues ya teníamos noción de que no solo servía para restregarse lo en las nalgas.
Con el tiempo me fue llamando la atención porque a Jaime le gustaba que le metiéramos el dedo en el culo y también nuestras vergas.
Esto incidió en mi muy profundamente pues a la hora de ducharme siempre jugaba con mi ano, lo acariciaba con mis dedos y metía la yema haciendo presion hasta que mi esfínter cedía (no hubo vuelta atrás) la sensación fue tan placentera que me masturbaba al mismo tiempo que introducía mi dedo, al principio fue la puntita, luego la mitad y luego todo obviamente con ayuda de mi saliva, pues por desgracia descubrí que el jabón arde dentro de la zona anal (ese día me quería morir con el ardor en el culo), después las ganas fueron creciendo y con el tiempo la cantidad de dedos, primero 1, luego 2 y al final 3, después de eso empecé a utilizar cepillos pues eran más largos y desodorantes de ruedita, pues eran más gruesos, luego pase con las verduras (zanahorias 🥕 y pepinos 🥒) no les voy a mentir, varias veces me reventé el culo, me sangraba y dejaba de hacerlo como por 15 días hasta que lo internaba nuevamente.
Con el tiempo mi colita se fue acostumbrando y fue pidiendo objetos más gruesos y más largos. Siempre pensé en un juguete sexual pero como aún era menor de edad y no tenía tarjetas bancarias no podía accesar a uno.
Cuando fui a la universidad a mis 18 años pude adquirir un dildo por primera vez, ya que la universidad quedaba a 3 horas de dónde yo vivo y era más accesible para rentar, es así como llegue a adorar el sexo anal y esto con el tiempo despertó en mi un deseo de ser penetrado por otro hombre y así finalmente di con mi bi sexualidad, porque cabe resaltar que si me gustan las mujeres pero también me gusta que un buen macho me reviente la colita a vergazos.
Mi primer dildo tuve que tirarlo a la basura pues cuando cambie de cuarto en la universidad me vi en la necesidad de deshacerme de él. Sin embargo compré otro y más largos y grueso.
El primero media 18 CM de largo x 4 CM de grosor y el segundo que es con el que me quedé mide 25 CM de largo x 5 CM de ancho.
(La siguiente imagen es el dildo real)
Espero les haya gustado mi primer relato, acepto sus sugerencias en los comentarios. Tengan en cuenta que es el primero que escribo. Gracias por leer y tengas un excelente día 😋.
Todo comenzó cuando era un adolescente, unos 12 o 13 años aproximadamente y comencé en el mundo de la paja, luego entre compañeros nos juntábamos con un amigo del cual sabíamos era gay (si a esa edad ya distingues a cuáles de tus amigos les gusta por el culo). En los ratos libres del día como a las 3 o 4 PM invitamos a Jaime (nuestro amigo gay) a jugar a mi casa pues mis padres son maestros y ellos trabajaban a dos horas de dónde vivimos. Ese tiempo lo usábamos para *jugar* con Jaime a la mamá y el papá y casualmente este chico siempre pedía ser la mamá.
Nunca falta el amigo que ya vio coger a sus papás así que literalmente nos montabamos sobre Jaime y desnudos todos restregabamos nuestras verguitas en sus nalgas (por turnos evidentemente). Este comportamiento se repitió durante 3 año, pues a los 15 aproximadamente comenzamos a penetrar a Jaime, pues ya teníamos noción de que no solo servía para restregarse lo en las nalgas.
Con el tiempo me fue llamando la atención porque a Jaime le gustaba que le metiéramos el dedo en el culo y también nuestras vergas.
Esto incidió en mi muy profundamente pues a la hora de ducharme siempre jugaba con mi ano, lo acariciaba con mis dedos y metía la yema haciendo presion hasta que mi esfínter cedía (no hubo vuelta atrás) la sensación fue tan placentera que me masturbaba al mismo tiempo que introducía mi dedo, al principio fue la puntita, luego la mitad y luego todo obviamente con ayuda de mi saliva, pues por desgracia descubrí que el jabón arde dentro de la zona anal (ese día me quería morir con el ardor en el culo), después las ganas fueron creciendo y con el tiempo la cantidad de dedos, primero 1, luego 2 y al final 3, después de eso empecé a utilizar cepillos pues eran más largos y desodorantes de ruedita, pues eran más gruesos, luego pase con las verduras (zanahorias 🥕 y pepinos 🥒) no les voy a mentir, varias veces me reventé el culo, me sangraba y dejaba de hacerlo como por 15 días hasta que lo internaba nuevamente.
Con el tiempo mi colita se fue acostumbrando y fue pidiendo objetos más gruesos y más largos. Siempre pensé en un juguete sexual pero como aún era menor de edad y no tenía tarjetas bancarias no podía accesar a uno.
Cuando fui a la universidad a mis 18 años pude adquirir un dildo por primera vez, ya que la universidad quedaba a 3 horas de dónde yo vivo y era más accesible para rentar, es así como llegue a adorar el sexo anal y esto con el tiempo despertó en mi un deseo de ser penetrado por otro hombre y así finalmente di con mi bi sexualidad, porque cabe resaltar que si me gustan las mujeres pero también me gusta que un buen macho me reviente la colita a vergazos.
Mi primer dildo tuve que tirarlo a la basura pues cuando cambie de cuarto en la universidad me vi en la necesidad de deshacerme de él. Sin embargo compré otro y más largos y grueso.
El primero media 18 CM de largo x 4 CM de grosor y el segundo que es con el que me quedé mide 25 CM de largo x 5 CM de ancho.
(La siguiente imagen es el dildo real)
Espero les haya gustado mi primer relato, acepto sus sugerencias en los comentarios. Tengan en cuenta que es el primero que escribo. Gracias por leer y tengas un excelente día 😋.
4 comentarios - Mi primera experiencia anal