Era obvio que las cosas se iban a repetir e iban a crecer en intensidad, no se cuantas pajas me hice recordando las imágenes de todo lo ocurrido, después de casi una semana el jefe me dijo, decile a tu novia que se acueste en ese hermoso sillón que tiene, solo con una remera puesta y la almohada debajo de la pelvis, me encanto como se pone, y como se le marca el culazo, nosotros tomamos algo y vamos para allá avisale…
Fuimos a tomar algo, cuando llegamos al departamento mi mujer estaba con una remera negra, la almohada debajo de la pelvis, y desnuda de la cintura para abajo, se notaba su culazo a full, el jefe se desnudó, su pija durísima una vez más y se arrodilló detrás de ella, que estaba con la cabeza de costado como en un ensueño. Apoyó su miembro y en cámara lenta fue dejándose caer sobre ella que gimió suavemente mientras sentía el miembro y el peso de él sobre ella. Con su mano izquierda le acaricio el pelo y acomodó su cara al costado de la cara de ella, mientas la iba cogiendo suavemente. Le habló suavemente en el oído pero no llegué a escuchar lo que le decía, ahora le chupaba el cuello y la cogía suavemente, seguía hablando suavemente en el oído, ella tenía la cara de costado, los ojos cerrados y gemía suavemente, volvió a hablarle suavemente al oído y ella volvió a sonreír, estaba tan excitado y celoso, no se parecía para nada al primer encuentro, me parecía mucho más romántico. Él se incorporó sobre sus brazos para mirarla de más lejos mientras la seguía cogiendo. Le acariciaba los pelos, la cara, ella gemía sin parar, se incorporó un poco más quedando sobre sus rodillas y disfrutando de la vista y el tacto del culazo de mi novia, que manoseaba a placer. Volvió a inclinarse sobre ella y pasó sus brazos por dentro de los de ellas, su cara pegada a la de ella nuevamente, empezó a acelerar el bombeo, ella le acariciaba los brazos mientras gemía, siempre con los ojos cerrados, la agarró bien fuerte del pelo y esta vez se vació bien profundo dentro de ella.
Lo cuento así, la secuencia, pero cada cosa fue mucho más lenta, tuve mi primer orgasmo, que tuve que irme de raje al baño, cuando él se acercó a su cara, le chupaba el cuello, le hablaba susurrándole en el oído. Después acabe de nuevo cuando él estaba llegando, no podía creer que la estuviera llenando de leche y yo no solo no hiciera nada para impedirlo, sino que fuera cómplice y me excitara con la situación.

Fuimos a tomar algo, cuando llegamos al departamento mi mujer estaba con una remera negra, la almohada debajo de la pelvis, y desnuda de la cintura para abajo, se notaba su culazo a full, el jefe se desnudó, su pija durísima una vez más y se arrodilló detrás de ella, que estaba con la cabeza de costado como en un ensueño. Apoyó su miembro y en cámara lenta fue dejándose caer sobre ella que gimió suavemente mientras sentía el miembro y el peso de él sobre ella. Con su mano izquierda le acaricio el pelo y acomodó su cara al costado de la cara de ella, mientas la iba cogiendo suavemente. Le habló suavemente en el oído pero no llegué a escuchar lo que le decía, ahora le chupaba el cuello y la cogía suavemente, seguía hablando suavemente en el oído, ella tenía la cara de costado, los ojos cerrados y gemía suavemente, volvió a hablarle suavemente al oído y ella volvió a sonreír, estaba tan excitado y celoso, no se parecía para nada al primer encuentro, me parecía mucho más romántico. Él se incorporó sobre sus brazos para mirarla de más lejos mientras la seguía cogiendo. Le acariciaba los pelos, la cara, ella gemía sin parar, se incorporó un poco más quedando sobre sus rodillas y disfrutando de la vista y el tacto del culazo de mi novia, que manoseaba a placer. Volvió a inclinarse sobre ella y pasó sus brazos por dentro de los de ellas, su cara pegada a la de ella nuevamente, empezó a acelerar el bombeo, ella le acariciaba los brazos mientras gemía, siempre con los ojos cerrados, la agarró bien fuerte del pelo y esta vez se vació bien profundo dentro de ella.
Lo cuento así, la secuencia, pero cada cosa fue mucho más lenta, tuve mi primer orgasmo, que tuve que irme de raje al baño, cuando él se acercó a su cara, le chupaba el cuello, le hablaba susurrándole en el oído. Después acabe de nuevo cuando él estaba llegando, no podía creer que la estuviera llenando de leche y yo no solo no hiciera nada para impedirlo, sino que fuera cómplice y me excitara con la situación.

2 comentarios - como me calienta esto