Gracias a tu mi marido por darme libertad de ser, te agradezco que me des la libertad de gozar mi juventud y libertad, y que me des la oportunidad de ser y gozar con otros. No es que no te ame, todo lo contrario, eres la razón no solo de mi existir sino el sol que alumbra mi felicidad, y aparte, el padre de nuestra adorable hija.
Sí, me preñaste aquella noche loca pero reaccionaste como hombre. No sólo te enfrentaste a mis padres como todo un hombre, tambien me enseñaste que lo que sentías por mi era honorable, puro y mágico. Me enseñaste que lo que sentías por mi no era sólo lujuria sino puro amor.
Hoy me siento querida, amada, deseada y plena como mujer. Puedes tener la plena convicción de que aunque me acueste con otros tú eres mi sol y razón de mi existir.
Tú, marido mío, eres lo máximo y también mi cornudo.
Te recuerdo que el 11 de noviembre, Día de los Cornudos, voy a estar de viaje, no sé si con Pablo, o con Vicente, o quizás con los dos.
Sí, me preñaste aquella noche loca pero reaccionaste como hombre. No sólo te enfrentaste a mis padres como todo un hombre, tambien me enseñaste que lo que sentías por mi era honorable, puro y mágico. Me enseñaste que lo que sentías por mi no era sólo lujuria sino puro amor.
Hoy me siento querida, amada, deseada y plena como mujer. Puedes tener la plena convicción de que aunque me acueste con otros tú eres mi sol y razón de mi existir.
Tú, marido mío, eres lo máximo y también mi cornudo.
Te recuerdo que el 11 de noviembre, Día de los Cornudos, voy a estar de viaje, no sé si con Pablo, o con Vicente, o quizás con los dos.
1 comentarios - Oda al cornudo de mi marido