Era viernes de carnaval y en el bar todo el mundo iba disfrazado, incluso yo, que iba de mago. Entre toda la gente, estaban mis follamigas Silvia D y Gema P, disfrazadas ambas de Dora la exploradora. Unas Doras bien apetecibles pues llevaban unas camisetas rosas, de manga larga, ajustadas marcando sus tetazas, unos pantalones bien cortitos, naranjas, marcando sus culos anchotes y deliciosos, unas medias transparentes morenas y unas sexys pelucas morenas cortas.
Cada vez que salía de la barra, me acababa besando con ellas y metiéndonos mano. Cuando terminé mi turno de trabajo, acabamos yéndonos a casa de Silvia, donde no solo íbamos a poder besarnos y meternos mano. En el salón de la casa, me bese con ambas, acaloradamente, mientras mis manos acariciaban sus culos. La mano de Silvia acariciaba mi culo y la de Gema mi paquete. Esta no tardo en meter su mano por mi pantalón y acariciar bien mi polla. Mis manos subieron hasta sus tetazas, acariciándolas. Un par de veces baje la cabeza para morder esos pechos grandes que tienen ambas.
Silvia se arrodillo y mordía mi polla marcada en el pantalón. Gema acariciaba mis huevos, con su mano aun dentro de mi pantalón, mientras yo seguía mordiendo sus tetazas. Silvia me bajo el pantalón del disfraz y Gema volvió a agarrar mi polla para golpear la cara de Silvia con ella. Gema paso mi glande por los ricos labios de Silvia, la cual lo besaba. Gema acabo arrodillándose también y comenzaron a comerme la polla y los huevos a turnos.
Hice levantar a Silvia y nos besamos, mientras acariciaba sus tetazas. Volví a bajar la cabeza para morder esas tetazas suyas con la camiseta puesta, hasta que se la comencé a subir y, entonces las mordí con el sujetador de aro, rosa que llevaba. También comí y lamí el maravilloso canalillo que formaban sus tetazas. Gema siguió comiéndome la polla, hasta que la ordene levantarse. Se quito la camiseta y también la mordí las tetazas, por encima del sujetador, que era igual que el de Silvia. También tenía un maravilloso canalillo, el cual devore igualmente.
Gema y Silvia comenzaron a aplastar mi cabeza con sus tetazas a la vez, estando yo en la gloria, pues solo tenía que moverla para un lado u otro para disfrutar de ellas. Agarre sus sujetadores por delante y tire de ellos, hasta sacar sus tetazas de ellos. Ellas seguían aplastando mi cabeza con ellas y yo, ahora, se las comía bien ricamente, mordiendo sus gordos pezones. Todo este rato mis manos acariciaban sus culos.
Gema volvió a arrodillarse y a mamar mi polla. Silvia y yo nos besábamos, mientras la acariciaba y comía las tetazas. Cuando Silvia se arrodillo, nuevamente, y comenzó a volver a mamar mi polla, Gema se levantó y nos besamos, disfrutando de sus tetazas con mis manos y boca. Al final, volvieron a estar las dos arrodilladas, comiéndome la polla y los huevos. Llegado un momento, con mi polla durísima, comencé a follarlas duro las bocazas, turnándomelas cada poco, golpeando sus caras con mi polla antes de cada follada de boca. Silvia y Gema acabaron haciéndome unas maravillosas cubanas con sus tetazas, para terminar con sus tetazas juntas con mi polla en medio a la vez, sintiendo, sobre todo, sus pezones duros.
Las llevé a la zona del sofá, donde me senté. Las coloqué inclinadas apoyando sus manos en la mesita y comencé a acariciar sus piernas de arriba abajo. Subí un poco más para acariciar sus culazos y acabar con mi mano entre sus piernas, acariciando sus coños. Desabroche sus pantaloncitos y se los quite, dejando sus culos al descubierto, mostrando que llevaban unos pequeños tangas rosas, debajo de las medias.
Acaricie, bese y mordí sus culos, sin descuidar sus coños, los cuales también acariciaba. Rompí sus medias para poder meter mis manos por sus tangas y masturbarlas, mientras seguía besando y mordiendo sus culos. Me coloqué frente al culo de Silvia, aparte su tanga, metí mi cabeza entre sus piernas y la comí el coño, mientras seguía masturbando a Gema. Luego hice lo propio con el coño de Gema, mientras volvía a masturbar a Silvia. Fui turnándome en las comidas a sus coños, sin dejar de masturbar a la otra. Gema y Silvia se besaban todo el rato.
Me levanté y me puse un condón. Me puse detrás de Silvia, aparte su tanga y empecé a follarla. Estire mis manos para coger sus tetazas y disfrutar de ellas, mientras la follaba. Gema se masturbo, hasta que cambié y comencé a follarla a ella, también con sus tetazas agarradas. Ahora Silvia se masturbaba. Fui cambiando entre ellas, follando sus ricos coños, hasta que ambas se corrieron y comencé a follar sus culos.
Se levantaron ambas y volvimos a besarnos los tres, conmigo en medio, mientras me acariciaban la polla y el culo y yo hacía lo propio con sus culos. Subí una pierna de Gema, aparto su tanga y metí mi polla en su coño, follando nuevamente. Me besaba con ella y acariciaba sus pechos, mientras, Silvia, se colocaba detrás de mi y me besaba el cuello, mientras acariciaba mi culo. Acabo pasando una mano hacia delante para acariciar mis huevos. Gire la cabeza y me bese con ella. Silvia se acabo arrodillando y me comía los huevos, mientras no paraba de follar a Gema. Agache mi cabeza y devore las tetazas de esta.
Dije a Gema que se sentara en la mesita. Coloque a Silvia frente a ella y, mientras nos besábamos y la comía las tetas, Gema la comió el coño. Hice inclinar a Silvia, hasta que ella era la que comía el coño, ahora, a Gema. Yo me puse detrás de ella, aparte su tanga y la follé el coño y el culo a Silvia. Hice un pequeño paréntesis para acercarme a Gema y follarla la boca, siguiendo luego follando el coño y culo de Silvia. Yo me inclinaba sobre la espalda de Silvia para agarrar sus tetazas.
Aparte a Silvia, Gema me quito el condón y metió mi polla entre sus tetazas, masturbándome con ellas. Silvia y yo nos besamos y la volví a comer las tetazas, apretándoselas fuerte con mis manos, también. Silvia acabo arrodillándose y masturbándome con sus tetazas, mientras Gema lamia mi glande. Mi polla volvió a verse entre esas cuatro tetazas suyas. Silvia y Gema me masturbaban sin descanso, mientras me miraban y se reían. Cuando me corrí, mi semen salió disparado a sus caras y tetazas, sin que ellas dejaran de reírse. Cuando termine de correrme, me volvieron a comer la polla para limpiármela bien y se comieron las tetas, la una a la otra, quitándose el semen de ellas. Se levantaron y volvimos a besarnos los tres, mientras acariciaba sus culazos.
Silvia y Gema se fueron al baño a limpiarse y yo fui a la cocina por unas cervezas. Cuando regrese al salón, deje las de ellas en la mesita y puse música. Mientras me tomaba la mía, me puse a bailar. Gema y Silvia, entraron al salón, con el sujetador bien puesto y se pusieron a bailar. Silvia se fue a la mesita por las cervezas y Gema bailo bien arrimada a mí, con mi polla agarrada. Nos besamos y no tardo en girarse para restregar su culo por mi polla. Silvia se acerco con las cervezas y cuando le dio la suya a Gema, brindamos por el buen sexo. Silvia se colocó por mi espalda y nos besamos, mientras bailábamos y notaba sus tetazas en mi espalda.
Cuando Gema, se giro y quedo frente a mí, agache la cabeza para comerla el canalillo. Silvia se coloco por la espalda de Gema y, mientras se besaban, la quito el sujetador. Empecé a comer y acariciar fuerte sus tetazas, mientras Silvia las rociaba de cerveza. Lamia los pezones de Gema, mientras apretaba sus tetazas y ella me masturbaba a una alta velocidad. Gema cogió a Silvia y la coloco entre ella y yo. La quito el sujetador y roció con su cerveza las tetazas a Silvia, para que, ahora, se las devorara a ella. Acabe colocando a las dos juntas, para comerlas las tetazas a ambas, mientras se besaban y me masturbaban.
Cuando paramos de bailar y comernos, Silvia nos dijo de ir a la habitación. Allí se colocó a gatas en la cama. Yo me puse de rodillas en la cama, delante de ellas, comenzando a follarla la boca. Gema se tumbo entre sus piernas, comiéndola el coño. Según se me iba poniendo dura la polla, la iba follando mas fuerte la bocaza suya.
Dejé la boca de Silvia y me senté en el pecho de Gema. Coloque mi polla entre sus tetazas y me masturbo con ellas, mientras seguía comiendo el coño a Silvia. Me arrodille en el suelo, entre las piernas de Gema. Aparte su tanga y la comí el coño, mientras la acariciaba las tetazas. Acabe poniéndome un condón, arrodillándome entre sus piernas y metiendo mi polla en su coño, follándola. Acaricie sus muslos y acabe poniéndola las piernas sobre mis hombros, para follarla más fuerte.
Me baje y Silvia y Gema se tumbaron de forma que hicieron un 69. Silvia se quedo en la parte de arriba y me puse de rodillas en la cama detrás de ella. Aparte su tanga y la folle el culo, mientras Gema la seguía comiendo el coño. Acabe metiéndola en su coño, follándola, mientras Gema empezó a jugar con mis huevos.
Me senté en la cama y se fueron sentando sobre mí, rodeándome con sus piernas, metiéndose mi polla en sus coños y culos. Cabalgaban como locas, mientas nos besábamos y las devoraba las tetazas. Cuando Silvia se iba a correr, me tumbaron y puso su coño en mi cara, mientras Gema cabalgaba con mi polla en su coño. Mis manos, estiradas, acariciaban las tetazas de Silvia. Cuando Silvia se corrió, Gema se tumbó sobre mí, haciendo un 69 conmigo, tras quitarme el condón. No paramos de comernos, hasta que ambos nos corrimos.
Nos quedamos un poco tumbados en la cama, besándonos los tres y acariciando sus tetazas, hasta que me vestí y me fui de casa de Silvia.
Cada vez que salía de la barra, me acababa besando con ellas y metiéndonos mano. Cuando terminé mi turno de trabajo, acabamos yéndonos a casa de Silvia, donde no solo íbamos a poder besarnos y meternos mano. En el salón de la casa, me bese con ambas, acaloradamente, mientras mis manos acariciaban sus culos. La mano de Silvia acariciaba mi culo y la de Gema mi paquete. Esta no tardo en meter su mano por mi pantalón y acariciar bien mi polla. Mis manos subieron hasta sus tetazas, acariciándolas. Un par de veces baje la cabeza para morder esos pechos grandes que tienen ambas.
Silvia se arrodillo y mordía mi polla marcada en el pantalón. Gema acariciaba mis huevos, con su mano aun dentro de mi pantalón, mientras yo seguía mordiendo sus tetazas. Silvia me bajo el pantalón del disfraz y Gema volvió a agarrar mi polla para golpear la cara de Silvia con ella. Gema paso mi glande por los ricos labios de Silvia, la cual lo besaba. Gema acabo arrodillándose también y comenzaron a comerme la polla y los huevos a turnos.
Hice levantar a Silvia y nos besamos, mientras acariciaba sus tetazas. Volví a bajar la cabeza para morder esas tetazas suyas con la camiseta puesta, hasta que se la comencé a subir y, entonces las mordí con el sujetador de aro, rosa que llevaba. También comí y lamí el maravilloso canalillo que formaban sus tetazas. Gema siguió comiéndome la polla, hasta que la ordene levantarse. Se quito la camiseta y también la mordí las tetazas, por encima del sujetador, que era igual que el de Silvia. También tenía un maravilloso canalillo, el cual devore igualmente.
Gema y Silvia comenzaron a aplastar mi cabeza con sus tetazas a la vez, estando yo en la gloria, pues solo tenía que moverla para un lado u otro para disfrutar de ellas. Agarre sus sujetadores por delante y tire de ellos, hasta sacar sus tetazas de ellos. Ellas seguían aplastando mi cabeza con ellas y yo, ahora, se las comía bien ricamente, mordiendo sus gordos pezones. Todo este rato mis manos acariciaban sus culos.
Gema volvió a arrodillarse y a mamar mi polla. Silvia y yo nos besábamos, mientras la acariciaba y comía las tetazas. Cuando Silvia se arrodillo, nuevamente, y comenzó a volver a mamar mi polla, Gema se levantó y nos besamos, disfrutando de sus tetazas con mis manos y boca. Al final, volvieron a estar las dos arrodilladas, comiéndome la polla y los huevos. Llegado un momento, con mi polla durísima, comencé a follarlas duro las bocazas, turnándomelas cada poco, golpeando sus caras con mi polla antes de cada follada de boca. Silvia y Gema acabaron haciéndome unas maravillosas cubanas con sus tetazas, para terminar con sus tetazas juntas con mi polla en medio a la vez, sintiendo, sobre todo, sus pezones duros.
Las llevé a la zona del sofá, donde me senté. Las coloqué inclinadas apoyando sus manos en la mesita y comencé a acariciar sus piernas de arriba abajo. Subí un poco más para acariciar sus culazos y acabar con mi mano entre sus piernas, acariciando sus coños. Desabroche sus pantaloncitos y se los quite, dejando sus culos al descubierto, mostrando que llevaban unos pequeños tangas rosas, debajo de las medias.
Acaricie, bese y mordí sus culos, sin descuidar sus coños, los cuales también acariciaba. Rompí sus medias para poder meter mis manos por sus tangas y masturbarlas, mientras seguía besando y mordiendo sus culos. Me coloqué frente al culo de Silvia, aparte su tanga, metí mi cabeza entre sus piernas y la comí el coño, mientras seguía masturbando a Gema. Luego hice lo propio con el coño de Gema, mientras volvía a masturbar a Silvia. Fui turnándome en las comidas a sus coños, sin dejar de masturbar a la otra. Gema y Silvia se besaban todo el rato.
Me levanté y me puse un condón. Me puse detrás de Silvia, aparte su tanga y empecé a follarla. Estire mis manos para coger sus tetazas y disfrutar de ellas, mientras la follaba. Gema se masturbo, hasta que cambié y comencé a follarla a ella, también con sus tetazas agarradas. Ahora Silvia se masturbaba. Fui cambiando entre ellas, follando sus ricos coños, hasta que ambas se corrieron y comencé a follar sus culos.
Se levantaron ambas y volvimos a besarnos los tres, conmigo en medio, mientras me acariciaban la polla y el culo y yo hacía lo propio con sus culos. Subí una pierna de Gema, aparto su tanga y metí mi polla en su coño, follando nuevamente. Me besaba con ella y acariciaba sus pechos, mientras, Silvia, se colocaba detrás de mi y me besaba el cuello, mientras acariciaba mi culo. Acabo pasando una mano hacia delante para acariciar mis huevos. Gire la cabeza y me bese con ella. Silvia se acabo arrodillando y me comía los huevos, mientras no paraba de follar a Gema. Agache mi cabeza y devore las tetazas de esta.
Dije a Gema que se sentara en la mesita. Coloque a Silvia frente a ella y, mientras nos besábamos y la comía las tetas, Gema la comió el coño. Hice inclinar a Silvia, hasta que ella era la que comía el coño, ahora, a Gema. Yo me puse detrás de ella, aparte su tanga y la follé el coño y el culo a Silvia. Hice un pequeño paréntesis para acercarme a Gema y follarla la boca, siguiendo luego follando el coño y culo de Silvia. Yo me inclinaba sobre la espalda de Silvia para agarrar sus tetazas.
Aparte a Silvia, Gema me quito el condón y metió mi polla entre sus tetazas, masturbándome con ellas. Silvia y yo nos besamos y la volví a comer las tetazas, apretándoselas fuerte con mis manos, también. Silvia acabo arrodillándose y masturbándome con sus tetazas, mientras Gema lamia mi glande. Mi polla volvió a verse entre esas cuatro tetazas suyas. Silvia y Gema me masturbaban sin descanso, mientras me miraban y se reían. Cuando me corrí, mi semen salió disparado a sus caras y tetazas, sin que ellas dejaran de reírse. Cuando termine de correrme, me volvieron a comer la polla para limpiármela bien y se comieron las tetas, la una a la otra, quitándose el semen de ellas. Se levantaron y volvimos a besarnos los tres, mientras acariciaba sus culazos.
Silvia y Gema se fueron al baño a limpiarse y yo fui a la cocina por unas cervezas. Cuando regrese al salón, deje las de ellas en la mesita y puse música. Mientras me tomaba la mía, me puse a bailar. Gema y Silvia, entraron al salón, con el sujetador bien puesto y se pusieron a bailar. Silvia se fue a la mesita por las cervezas y Gema bailo bien arrimada a mí, con mi polla agarrada. Nos besamos y no tardo en girarse para restregar su culo por mi polla. Silvia se acerco con las cervezas y cuando le dio la suya a Gema, brindamos por el buen sexo. Silvia se colocó por mi espalda y nos besamos, mientras bailábamos y notaba sus tetazas en mi espalda.
Cuando Gema, se giro y quedo frente a mí, agache la cabeza para comerla el canalillo. Silvia se coloco por la espalda de Gema y, mientras se besaban, la quito el sujetador. Empecé a comer y acariciar fuerte sus tetazas, mientras Silvia las rociaba de cerveza. Lamia los pezones de Gema, mientras apretaba sus tetazas y ella me masturbaba a una alta velocidad. Gema cogió a Silvia y la coloco entre ella y yo. La quito el sujetador y roció con su cerveza las tetazas a Silvia, para que, ahora, se las devorara a ella. Acabe colocando a las dos juntas, para comerlas las tetazas a ambas, mientras se besaban y me masturbaban.
Cuando paramos de bailar y comernos, Silvia nos dijo de ir a la habitación. Allí se colocó a gatas en la cama. Yo me puse de rodillas en la cama, delante de ellas, comenzando a follarla la boca. Gema se tumbo entre sus piernas, comiéndola el coño. Según se me iba poniendo dura la polla, la iba follando mas fuerte la bocaza suya.
Dejé la boca de Silvia y me senté en el pecho de Gema. Coloque mi polla entre sus tetazas y me masturbo con ellas, mientras seguía comiendo el coño a Silvia. Me arrodille en el suelo, entre las piernas de Gema. Aparte su tanga y la comí el coño, mientras la acariciaba las tetazas. Acabe poniéndome un condón, arrodillándome entre sus piernas y metiendo mi polla en su coño, follándola. Acaricie sus muslos y acabe poniéndola las piernas sobre mis hombros, para follarla más fuerte.
Me baje y Silvia y Gema se tumbaron de forma que hicieron un 69. Silvia se quedo en la parte de arriba y me puse de rodillas en la cama detrás de ella. Aparte su tanga y la folle el culo, mientras Gema la seguía comiendo el coño. Acabe metiéndola en su coño, follándola, mientras Gema empezó a jugar con mis huevos.
Me senté en la cama y se fueron sentando sobre mí, rodeándome con sus piernas, metiéndose mi polla en sus coños y culos. Cabalgaban como locas, mientas nos besábamos y las devoraba las tetazas. Cuando Silvia se iba a correr, me tumbaron y puso su coño en mi cara, mientras Gema cabalgaba con mi polla en su coño. Mis manos, estiradas, acariciaban las tetazas de Silvia. Cuando Silvia se corrió, Gema se tumbó sobre mí, haciendo un 69 conmigo, tras quitarme el condón. No paramos de comernos, hasta que ambos nos corrimos.
Nos quedamos un poco tumbados en la cama, besándonos los tres y acariciando sus tetazas, hasta que me vestí y me fui de casa de Silvia.
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