En el relato anterior conté una parte del acuerdo al que llegué con mis amigas, empezamos a tener sexo juntas, algunos me preguntaron si me había vuelto lesbiana o si ahora iba a tener una relación con alguna de ellas, la verdad es que no. Nuestro pacto es meramente sexual.
Lo hacemos espontáneamente y sin que los demás lo sepan. El miércoles le hice un oral a una de ellas en los baños de la escuela. Este fin de semana nos masturbamos entre las tres en mi casa cuando mis padres no estaban. Y hasta el momento no hemos vuelto a tener encuentros sexuales, siempre que ll hago con ellas lo hago pensando en un pene, me imagino que algún hombre me penetrara, me gusta la sensación de que se corren dentro de mi como lo hacia mi exnovio pero con el sexo con mis amigas no es lo mismo. El día de ayer me levanté muy caliente, quería tener sexo con un hombre y fui a visitar a mi exnovio esperando que estuviera en su casa, cuando toque su hermana se asomo por la ventana y no dijo nada, simplemente se metió y nadie me salió a abrir, estuve esperando 10 minutos y luego me fui, más tarde intenté llamarlo y el me contestó un tanto molesto, se le notaba en el tono de voz pero le dije que quería verlo, el no estaba seguro de verme y me obligó a decirle por llamada que quería que me cojiera. Me dijo que nos viéramos en un parque a las 9 de la tarde, era un parque que está atrás de la uni donde el estudiaba, me puse bragas muy sexys, llevaba falda corta y una blusa pegada y delgada para que se me vieran los pezones a través porque no me había puesto brasier.
Cuando llegue el ya estaba ahí, estaba del otro lado de las canchas había una bajada y de ese lado no había luz, estaba fumando un porro de marihuana y me ofreció, lo acepté y tosí porque nunca lo había probado, acepté porque pensé que de una sola fumada no me pasaría nada, mientras estaba tosiendo el me metió mano debajo de la falda. " Te deje bien cachonda verdad putita" fue lo primero que me dijo, yo me sentía un poco incómoda cuando me hablaba así pero no quería que se fuera, solamente aparte la mirada y asenti con la cabeza. -No te veo mojadita- me dijo
- Porque voy llegando- le dije con cierto tono tímido como si me diera pena hablar con el- ¿Lo vamos a hacer aquí?
Su respuesta fue darme una cachetada un tanto fuerte y jalarme de la mano, avanzamos detrás de los arbustos y entramos en un cuartito abandonado que tenía la puerta tirada y los vidrios de las ventanas rotas, en algún momento debió haber sido una caseta de vigilancia del parque o algo parecido, el me arrinconó contra la pared y me alzó ambas manos por encima de la cabeza, me apretaba fuertemente con su cuerpo contra la pared como si estuviera intentando escaparme, senti como me hizo un chupetón en el cuello me me metía mano debajo de la blusa sobando mis tetas, me besó y yo intentaba recordar la última vez que me había besado pero no podía a pesar de que no tenía más de un mes de aquello, mi mente se estaba nublando y mi vagina humedeciendo, me mordió el labio tanto que me saco algo de sangre y me volvió a dar una cachetada.
- Como te gusta que te traten mal perra.- me decía al oído mientras yo sentía como entre sus piernas se erguia su pene y quize soltarme una mano para tocarlo pero no me dejó como si hubiera intentado hacer algo malo, me dió otra cachetada y me indico que me arrodillara.
Se bajo los pantalones y me puso a chupársela, yo intentaba meterme hasta sus testículos en la boca pero no me cabia y casi me ahogaba varias veces, su verga quedó toda lubricada luego de un rato de chupársela y me dijo que me levantará, me iba a follar la vagina, me puso de espaldas y empezó a metermela suavemente aunque entro fácilmente me nalgeaba y me cojia muy duro, me empezaba a doler pero no quería molestarlo así que solo gemía y apretaba los dientes, me cojio tan rico que empeze a temblar y quería que se detuviera porque sentí que me iba a desmayar pero no me dejó incluso me apretó con más fuerza y me la metía más rápido aunque no tardo en venirse, me pidió que me recostara y ahora me estaba cojiendo de frente, la blusa me la había levantado para verme las tetas pero de repente se volvió loco y le la rompió de un jalón, yo me asusté porque no salía como me iba a ir a mi casa pero trate de no preocuparme por eso, lo seguimos haciendo y como si hubiera pasado mucho tiempo sin correrse me dejó bien rellena de semen tanto que se me salía y tenía que sacarme la verga para que chorreara un poco en el piso para seguir cojiendo, al final me pido que le hiciera otra mamada porque dijo que ya estaba cansado, se sentó en el piso y yo ahí estaba desnuda besándole la verga llena de semen, se sentía tan denigrada cojiendo en un lugar abandonado solo para poder sentir un pene dentro mío, se corrió y me dijo que al final quería ver qué me restregara el semen por la cara, como se había corrido dentro de mi boca tuve que escupirlo y sobarmelo como si fuera una crema.
-Asi no... Mira- me hizo que me acercara a su cara y me escupió a la cara. Eso me molestó pero no dije nada sabía que ya había sido humillada demaciado para hacerme la digna, me restregó su semen y su saliva por toda la cara y me dió una última cachetada para levantarse y rápidamente y decirme que ya habíamos terminado asenti, el se había acomodado el pantalón y estaba dispuesto a irse cuando recordé que me había roto la blusa y me había quitado las bragas.
- Pues tu tanga me la voy a quedar, para que veas quién es tu dueño pendeja- cuando dijo eso me dio coraje.
Pero le dije que si me podía dejar su sudadera por lo menos para llegar a mi casa.
- Ahí arréglate tu, querías que yo te cojiera y ya me encargue de eso ahora vete desnuda a tu casa a ver si alguien de coje por ahí putita-. Yo estaba apunto de llorar pero no quería que el me viera hacerlo, deje que se fuera, en la entrada del cuartito se detuvo y saco un billete de 20 pesos, lo escupió y lo tiró al piso.
- Para que no digas que soy mala persona, cobrate como la prostituta barata que eres-. Se fue.
Yo empecé a llorar y me quedé sentada en posición fetal en el piso por un rato, mi vagina me ardía y a diferencia de otras veces está no la disfrute en absoluto, agarre mi blusa y me la amarre como si fuera un top, salí cuidando que nadie me viera, trate de limpiarme todo el semen que tenía en la cara antes de llegar a mi casa. Cuando llegue le mandé mensaje a mi hermano para que me abriera sin que mis papás se dieran cuenta, me metí rápidamente y me enjuague la cara, me bañé y llore bastante, llore como nunca.
Al día siguiente me fui a clases como si nada, aún estaba triste pero trataba de disimularlo.
Ahorita me siento un poquito enferma por lo mismo el relato lo hice más corto, espero les guste.
Adiós 🐹👋
Lo hacemos espontáneamente y sin que los demás lo sepan. El miércoles le hice un oral a una de ellas en los baños de la escuela. Este fin de semana nos masturbamos entre las tres en mi casa cuando mis padres no estaban. Y hasta el momento no hemos vuelto a tener encuentros sexuales, siempre que ll hago con ellas lo hago pensando en un pene, me imagino que algún hombre me penetrara, me gusta la sensación de que se corren dentro de mi como lo hacia mi exnovio pero con el sexo con mis amigas no es lo mismo. El día de ayer me levanté muy caliente, quería tener sexo con un hombre y fui a visitar a mi exnovio esperando que estuviera en su casa, cuando toque su hermana se asomo por la ventana y no dijo nada, simplemente se metió y nadie me salió a abrir, estuve esperando 10 minutos y luego me fui, más tarde intenté llamarlo y el me contestó un tanto molesto, se le notaba en el tono de voz pero le dije que quería verlo, el no estaba seguro de verme y me obligó a decirle por llamada que quería que me cojiera. Me dijo que nos viéramos en un parque a las 9 de la tarde, era un parque que está atrás de la uni donde el estudiaba, me puse bragas muy sexys, llevaba falda corta y una blusa pegada y delgada para que se me vieran los pezones a través porque no me había puesto brasier.
Cuando llegue el ya estaba ahí, estaba del otro lado de las canchas había una bajada y de ese lado no había luz, estaba fumando un porro de marihuana y me ofreció, lo acepté y tosí porque nunca lo había probado, acepté porque pensé que de una sola fumada no me pasaría nada, mientras estaba tosiendo el me metió mano debajo de la falda. " Te deje bien cachonda verdad putita" fue lo primero que me dijo, yo me sentía un poco incómoda cuando me hablaba así pero no quería que se fuera, solamente aparte la mirada y asenti con la cabeza. -No te veo mojadita- me dijo
- Porque voy llegando- le dije con cierto tono tímido como si me diera pena hablar con el- ¿Lo vamos a hacer aquí?
Su respuesta fue darme una cachetada un tanto fuerte y jalarme de la mano, avanzamos detrás de los arbustos y entramos en un cuartito abandonado que tenía la puerta tirada y los vidrios de las ventanas rotas, en algún momento debió haber sido una caseta de vigilancia del parque o algo parecido, el me arrinconó contra la pared y me alzó ambas manos por encima de la cabeza, me apretaba fuertemente con su cuerpo contra la pared como si estuviera intentando escaparme, senti como me hizo un chupetón en el cuello me me metía mano debajo de la blusa sobando mis tetas, me besó y yo intentaba recordar la última vez que me había besado pero no podía a pesar de que no tenía más de un mes de aquello, mi mente se estaba nublando y mi vagina humedeciendo, me mordió el labio tanto que me saco algo de sangre y me volvió a dar una cachetada.
- Como te gusta que te traten mal perra.- me decía al oído mientras yo sentía como entre sus piernas se erguia su pene y quize soltarme una mano para tocarlo pero no me dejó como si hubiera intentado hacer algo malo, me dió otra cachetada y me indico que me arrodillara.
Se bajo los pantalones y me puso a chupársela, yo intentaba meterme hasta sus testículos en la boca pero no me cabia y casi me ahogaba varias veces, su verga quedó toda lubricada luego de un rato de chupársela y me dijo que me levantará, me iba a follar la vagina, me puso de espaldas y empezó a metermela suavemente aunque entro fácilmente me nalgeaba y me cojia muy duro, me empezaba a doler pero no quería molestarlo así que solo gemía y apretaba los dientes, me cojio tan rico que empeze a temblar y quería que se detuviera porque sentí que me iba a desmayar pero no me dejó incluso me apretó con más fuerza y me la metía más rápido aunque no tardo en venirse, me pidió que me recostara y ahora me estaba cojiendo de frente, la blusa me la había levantado para verme las tetas pero de repente se volvió loco y le la rompió de un jalón, yo me asusté porque no salía como me iba a ir a mi casa pero trate de no preocuparme por eso, lo seguimos haciendo y como si hubiera pasado mucho tiempo sin correrse me dejó bien rellena de semen tanto que se me salía y tenía que sacarme la verga para que chorreara un poco en el piso para seguir cojiendo, al final me pido que le hiciera otra mamada porque dijo que ya estaba cansado, se sentó en el piso y yo ahí estaba desnuda besándole la verga llena de semen, se sentía tan denigrada cojiendo en un lugar abandonado solo para poder sentir un pene dentro mío, se corrió y me dijo que al final quería ver qué me restregara el semen por la cara, como se había corrido dentro de mi boca tuve que escupirlo y sobarmelo como si fuera una crema.
-Asi no... Mira- me hizo que me acercara a su cara y me escupió a la cara. Eso me molestó pero no dije nada sabía que ya había sido humillada demaciado para hacerme la digna, me restregó su semen y su saliva por toda la cara y me dió una última cachetada para levantarse y rápidamente y decirme que ya habíamos terminado asenti, el se había acomodado el pantalón y estaba dispuesto a irse cuando recordé que me había roto la blusa y me había quitado las bragas.
- Pues tu tanga me la voy a quedar, para que veas quién es tu dueño pendeja- cuando dijo eso me dio coraje.
Pero le dije que si me podía dejar su sudadera por lo menos para llegar a mi casa.
- Ahí arréglate tu, querías que yo te cojiera y ya me encargue de eso ahora vete desnuda a tu casa a ver si alguien de coje por ahí putita-. Yo estaba apunto de llorar pero no quería que el me viera hacerlo, deje que se fuera, en la entrada del cuartito se detuvo y saco un billete de 20 pesos, lo escupió y lo tiró al piso.
- Para que no digas que soy mala persona, cobrate como la prostituta barata que eres-. Se fue.
Yo empecé a llorar y me quedé sentada en posición fetal en el piso por un rato, mi vagina me ardía y a diferencia de otras veces está no la disfrute en absoluto, agarre mi blusa y me la amarre como si fuera un top, salí cuidando que nadie me viera, trate de limpiarme todo el semen que tenía en la cara antes de llegar a mi casa. Cuando llegue le mandé mensaje a mi hermano para que me abriera sin que mis papás se dieran cuenta, me metí rápidamente y me enjuague la cara, me bañé y llore bastante, llore como nunca.
Al día siguiente me fui a clases como si nada, aún estaba triste pero trataba de disimularlo.
Ahorita me siento un poquito enferma por lo mismo el relato lo hice más corto, espero les guste.
Adiós 🐹👋
3 comentarios - Esto es sumisión?
Debe haber más hombres que quieran coger contigo, como la mujer hermosa que eres