El ascenso de mi marido.

Ese viernes después de un día bastante agitado en la clínica, llegué cansada como a las 10:30 de la noche, mi esposo aún no llegaba y yo no quise preparar nada, para comer, sólo me duché me senté en la cama a secarme el cabello, no sé en qué momento me quedé dormida.
No sé cuánto tiempo pasó, más tarde, a lo lejos escuché a mi esposo que había llegado, pero me volví a quedar dormida, luego lo sentí en mi oído susurrando mientras me apretaba una nalga y me dijo con un tufo a trago “se complaciente” medio me sonreí con los ojos cerrados del sueño, el salió de la habitación y escuché cuando apagó la luz.
Luego sentí la puerta nuevamente, cerrarse, esta vez no escuché prender la luz, yo me avía quedado dormida boca abajo, y comencé a sentir que me estaba tocando los pies tratando de saber dónde estaba, me comenzó acariciar las piernas, sus manos temblaban y las tenía más calientes de lo normal, cuando llego a mis nalgas comenzó apretarlas y besarlas como nunca lo había echo, lo sentí salvaje pero me justaba esa faceta, sentí su barba raspándome la espalda me acordé que en la mañana se había afeitado, traté de darme vuelta y una mano en mi espalda no me dejó, y un susurro en mi oído decía “se complaciente” era la voz de mi esposo, entonces qué pasaba?

Si les gusto déjenme  unos puntos y continúo con la siguiente parte.