You are now viewing Poringa in Spanish.
Switch to English

Abandonada cachonda y follada 5

De pronto se levanto me jalo hacia él como si fuera una muñeca y me colocó de espaldas empezó acariciarme entre mis labios vaginales, se mojaba los dedos con mis fluidos… yo estaba demasiado extasiada él me miraba, observaba cada gesto de mi rostro, mi mirada, mi boca, mi cuerpo. Lo disfrutaba en vdd. Yo no podía más que dejarme hacer y perdí como nunca, perdí como nadie. Me penetro de nuevo esa posición, en cuatro me hace llegar al cielo y tocar las estrellas, lo consiguió, otro orgasmo. Y mi cuerpo seguía respondiéndole, cómo era posible? Nadie había logrado algo así en mi antes. Me deje caer, en vdd no podía mas, a mi me temblaba todo pero mi cuerpo no decía lo mismo, seguía muy caliente.
De pronto sus dedos entraban en mi vagina, mi miel escurría, y todo él lo aprovecho para mostrarme otra forma de sentir placer una que ni yo misma lo había pensado. Yo estaba totalmente entregada a él. Y de pronto sentí sus dedos en mi ano acariciaba tan despacio que apenas y lo note. Jugaba con toda esa parte, mi vagina, mi clítoris, mi ano… y yo no lo podía creer. En verdad lo haría? Yo me dejaría? Me dolería? Ah, eran demasiadas preguntas por mi cabeza, nunca lo había hecho por ahí, mi marido ya me había pedido que se lo diera y que me dejara coger por ahí, pero nunca lo había dejado.

Me dedique a sentir; todos sus movimientos me relejaban, él me decía que estaba muy mojada y yo lo podía sentir. Podía sentir como sus dedos se movían libremente por toda esa parte, y presionaba muy lento sobre mi ano, muy despacio. Se tomo el tiempo suficiente para que mi cuerpo respondiera. Y yo supongo que lo hizo, porque de pronto me puso en cuatro, yo no sabía si quería pero él no se detuvo lancé unos “no’s” entre cortados, me preguntaba si quería que se detuviera, yo decía “si” sin fuerza… en realidad quería probar, pero tenía miedo por el tamaño de su miembro. Y él me entendió, entendió mi lenguaje sin palabras. Entonces me preparo tan bien que la puntita entro en mi con un poco de facilidad, me preguntaba si me dolía, y la verdad era que si.
Abandonada cachonda y follada 5

Era diferente, rico, placentero, mucho dolor pero diferente, me gustaba esa sensación de dolor mezclada con placer conforme la iba metiendo empecé a gemir fuertemente por la sensación de dolor, sentía muchas ganas de hacer popó, pero el me dijo que era normal, que me relajara, me empecé a relajar y su pene cada vez entraba más y más. Mi ano se empezó acoplar a él, todavía sentía dolor y placer y un sentimiento raro de tener ganas de hacer del baño y sentirme súper llena y entonces sucedió, él podía entrar y salir libremente de mí. Consiguió ser el primero y estoy segura él único hasta el momento en estar en mi virginal de mi ano. Su máximo placer era yo. Y me tenía a su merced, dispuesta a todo dejándome hacer de todo.
puta

Se abrió paso por mi culito y apenas la tuvo hasta el fondo empezo a embestirme como un animal, con una violencia desmesurada, parecía loco del placer y el deseo con el que me abría el culo una y otra vez, entraba y salía tan fácil y me dolía tanto como me daba placer, mis gemidos se convirtieron en gritos descontrolados por la violencia de la cogida, no me importaba sí mi hijo escuchaba, estaba disfrutando estar ensartada por el culo, me sentía una perra y quería que me desgarra el culo.
madura
culona
empezó a sacarla de mi culo y meterla en mi vagina, la sacaba de mi vagina y la metía en mi culo y así sucesivamente me estaba volviendo loca, me encantaba, me estaba volviendo su perrita, y yo solo recibía su verga por donde el me la quisiera meter, me dio tan duro que ya no podía más del dolor y rogaba que ya se viniera, pero él seguía dandome igual de duro, tuve que rogarle que me llenara de lechita mi culo para que se viniera inundandome toda la colita de su semen caliente, por el tamaño de su pene en cada embestida era un dolor muy fuerte pero muy rico.
Gritaba de dolor, sentía mis lagrimas correr, mientras por mis mejillas decía, No, no… me duele, me duele, pero no paressss cógeme cógeme

Si putita??’, te duele??’ ahorita vas a pedir mas

Empezó el mete y saca y ahora gritaba pero de placer, con una mano sostenia una teta y con la otra jugaba con mi clítoris mientras me decía…

-Mmmm, así, así que rica, así, mamita muévete para mi, siente mu vergaaaaaaaa

Ahora yo me movía en su verga, en círculos, hacia fuera hacia adento ,

-Si, sssssssssiiiiiiiiii, mas dame mas métele diro,…

-Tenla, mami, tenla, así, así, mi putita asssssssssiiiiiiiiii, aaaaaaaaaaaaaaaaahhhhhhhh

putita
milf

Me tomó de la cintura y sacó todo su pene de mi culito dejándome un inmenso vacío en culo que nunca había sentido.Móntate tú mi puta divina, te toca a ti, siempre por el culo Bebé.

Su tono había cambiado, pero no su excitación ni la mía así que lo cabalgué. Agarrando su miembro, lo apoyé en mi culo y me senté sobre él deslizándolo rápidamente dentro de mí. Ya tenía mi huequito tan dilatado y lubricado que a pesar de su tamaño, entro como pez al agua, nadando en mi interior.
Se acuesta en la cama y me dice date unos sentones en mi verga, subí y me coloqué encima de el y me puse su verga toda mojada en la entrada de mi culito y me empecé a sentar en ella poco a poco, otra vez su pene se iba abriendo paso poco a poco.

Empecé a darme de sentones lentamente, pero el me tomó de la cintura y empezó a controlar mi montada rápidamente, sentía como su pene llegaba hasta el fondo de mí

Me movía sobre él, haciéndolo salir casi completamente y luego entrar de un solo empujón, así pasamos un rato para luego voltearme dándole la espalda.

Mi culito estaba resentido, pero el trance de la excitación era mucho más fuerte, disfrutaba la situación. Sentía el sudor bajar por mi pecho, rodando entre mis tetas. Seguía el vaivén de mis caderas sobre su pubis, enterrando su sexo en mi con violencia.

Perdía el balance en esa posición por la fuerza de sus embates. Sentía como su cuerpo completo chocaba contra el mío mientras sus caderas parecían adheridas a mis nalgas. Yo gemía, casi lloraba pidiéndole descanso. Él inclemente se abrazaba a mí sacándome el aire, haciendo que sintiera cada centímetro de su penetración.
infiel
madura tetona
madre puta

Yo estaba gritando como una perra en celo subiendo y bajando frenéticamente, cuando de repente la puerta se abre de golpe, en ese instante voltee rápido y veo a mi hijo parado en la puerta viéndonos fijamente, en ese momento intento sacarme, pero Will no me lo permitía, seguía extasiado, me quedé perpleja sintiendo a Will penetrarme y así estuve paralizado unos segundos mientras mi hijo nos veía coger y como me empalaban, volví a la realidad y le dije a Will que mi hijo nos veía, me soltó instantáneamente y me levanté sacando de golpe su verga de mi culito, bajé de la cama y me puse mi bata lo más rápido que pude, lo tomé de la mano y le dije porque no estás viendo tus caricaturas, el respondió que me había escuchado gritar y fue a ver si estaba bien, le dije que estábamos jugando a las luchitas que no se preocupara a lo que respondío que el se quería unir, en ese momento Will comenzó a reírse y le dijo no puedes ahorita campeón pero ya llegará tú tiempo de jugar y detonarte a una perra como lo es tu madre, ya me la empalr por todos lados y vaya que está rica, después será tú turno de cogerte a una perra y que la hagas gritar. Le lancé una mirada amenazante y Will se cayó, mi hijo me miró confundido y le dije no pasa nada, pero pues mi hijo no es tonto, preguntó que porque estábamos desnudos y que sí no me había lastimado porque estaba llorando, tenía las lágrimas en mis mejillas por el dolor de la penetración.
Estamos desnudos porque hace mucho calor y el y yo somos muy amigos, así que hay confianza y estaba llorando porque me ganó la risa, ve a ver tus caricaturas, mi hijo salió de la habitación y volví a cerrar la puerta, pero está vez con seguro.
Volví a la cama y Will me puso boca abajo con mis piernas juntas, , ya mi resistencia se había perdido pero no la excitación de los dos. Boca abajo en la cama, con una almohada bajo mi vientre, me volvió a penetrar, ésta vez de un solo empujón lo que me hizo gritar. Sentía plenamente su sexo llenándome ayudado ahora por su peso que caía controlado sobre mi cuerpo. Mi culito se abría para él en cada embestida, sentía su cuerpo sobre mi espalda y su respiración agitada en mi nuca mientras se deleitaba sodomizándome. No podía negar que el placer para mí era máximo, aun así, acababa silenciosamente delatándome solo por las contracciones involuntarias del orgasmo.
abuela cachonda
abuela tetona
Abandonada cachonda y follada 5
puta
Volví a gemir y a gritar, estaba disfrutando mucho su verga dentro de mí culito.
Se levantó saliendo de mi cuerpo yo quedé tendida en cama bañada en su sudor y el mío. Sacó de sus cosas un gel lubricante, abriendo mis nalgas, dejó caer un poco sobre mi culo, no lo entendí en ese momento, yo ya estaba disfrutando de su sexo sin problemas. Sin decir palabra, comenzó a introducir un dedo, dos, tres, los hacia vibrar un poco, les da vueltas. Lo sentí penetrándome más intensamente, de una forma que antes no había sentido. En ese momento un orgasmo se desencadenó violentamente ante lo cuál lo aprecié más dentro de mí, pero distinto, una sensación dura y fría. Le pregunté que hacía, no podía verlo por la posición. Me mostró entonces una botellita de agua mineral, la cual rotaba introduciéndola delicadamente en mi culo para hacerla entrar casi completa. La movía, la hundía en mí hasta hacerme gemir, yo solo estaba atenta al placer y a su mirada. Disfrutando esta sensación nueva para mí, disfrutando el morbo que le producía a mi hombre violarme de esa manera con una botella.

Ya me dolían las piernas, la vagina y el culo, no podía más, caí a su lado agotada, su erección seguía potente a pesar del tiempo que teníamos en ésta tirada.

Cerré los ojos mientras escuchaba sus palabras.

- No te vas a quedar atrás ahora, vamos vida, mírame.

Me besó en la boca suavemente, metió su lengua bordeando mis dientes, luego beso solo mis labios mojándolos con su lengua. Esta supuesta violada estaba tornándose dulce pensé sonreída. Él pareció leer mi mente a lo cual respondió abriendo mis piernas con sus rodillas, levantando mis nalgas para volver a penetrar mi culo en esa posición, boca arriba. Mi cuca sentía los roces de su cuerpo y reaccionaba con corrientazos de placer. Traté de llevar mi mano hasta ella para tocar mi clítoris pero mi macho la quitó diciéndome que no, que no era el momento. Ella solita consiguió sus orgasmos, intercalados con la potencia de los anales. Me sentía morir de placer. No perdí nunca el contacto visual con mi hombre, su mirada clavada en la mía, su expresión, sus labios.
madura
culona
putita
milf
infiel

Poco a poco lo sentí acercándose al final. El ritmo acelerado de su respiración acompañaba a sus palabras que me anunciaban la llegada al orgasmo compartido. Sentí su esencia llenándome por dentro, calmando mi morbo como sedante mágico en mi culo.
Quedamos los dos acostados en la cama uno junto al otro, sudados y completamente satisfechos.
Después de eso, solo hablamos un poco de lo bien que habíamos pasado y como mantendríamos el secreto para poder volver a repetirlo las veces que queramos (como antesala tengo que decir que fueron muchos encuentros que tuvimos después), . y en lo de mi hijo mientras Will se vestía Sali primero a ver que estaba haciendo, lo encontré dormido en el mueble asi que le dije a Will que salga rápido y que coma un poco, el desayuno fue rápido y normal cada vez que nos veíamos a los ojos nos reíamos y asi hasta que termino de desayunar.
-Te duele? Me preguntó.
- Me duele un poco mi culito y mi vientre, pero me gusta, me gustas mucho y tú verga me encanta.
Will se despidió de mi con un corto beso diciéndome que había pasado la mejor noche de su vida y yo le conteste algo similar. Una vez que salió de mi departamento comencé a limpiar la cocina y a lavar los platos sin poder dejar de recordar las sesiones de sexo intensas, entre al baño y me demore como una hora enjabonándome y limpiándome para perder el olor a sexo que emanaba, cuando termine de ducharme me vi al espejo como en la noche pasada y me comencé a reír pensando que deje mi lado de ama de casa para convertirme en una puta por una noche, tenía moretones en más nalgas, chupetones en las tetas, el cuello, mi vientre por todos lados, estaba afolorida el culo y la vagina rojos.

Ese día no Sali para nada de mi departamento, solo andaba con una bata por mi casa poniéndome crema en el cuerpo y masajeándome para borrar los chupetones que me había dejado Will.

Los siguientes días conversaba con Will por llamada entre conversas normales y cachondeos que me hacían calentar y meterme dedo una vez terminada la llamada ya que no aguantaba quedaba húmeda y sin nada en mi chepa. Asi a lo largo de los dias me fui convirtiendo en una guarra ya que toda la semana que siguió de la noche de sexo con Will, nuestras llamadas se convirtieron en sexo telefónico ya que con lo que me decía Will me pellizcaba los pezones, me metía los dedos y gemia a la llamada mientras el también jadeaba mientras se pajeaba.

Si se preguntan porque no venia Will a mi departamento a cogerme, era porque mi hijo mayor vino a pasar unos días conmigo ya que mi mamá salía de viaje y también habíamos quedado que si íbamos a tener nuestros encuentros serian en las noches que su amigo este de portero o los días que llegaba a darle mantenimiento a la piscina o bien a algún trabajo a mis vecinos.

Asi pasamos dos semanas con llamadas y pajas virtuales, yo noo aguantaba mas la calentura quería la verga de Will en mi boca o en mi chepa y no podía ya que el maricon del papa de mis hijos no volvía a casa y ni pa cogerme un poco y mi hijo pasaba todo el rato en la casa.
Continúa

0 comentarios - Abandonada cachonda y follada 5