Cita con el director

Mi segunda experiencia como complaciente de un macho fue una aventura que no olvidaré jamás.

Hace 5 meses me encontraba navegando en una aplicación bastante conocida para encontrar acción, llevaba tiempo ahí y la verdad es que es algo tardado pero aquella tarde fue inolvidable.

Fue un jueves por la tarde, en esa época andaba tomándome unos días de descanso tanto del trabajo como de la universidad y como estaba solo decidí estar de chismoso en aquella app de cara amarilla, llevaba días mensajeando me con un maduro de 67 años, desde hace semanas que queríamos conocernos pero por cuestiones de tiempo nunca pudimos concordar en horarios, hasta ese día, resulta que el se encontraba a poco más de un kilómetro, y me invitó a ir a verlo, me dijo que era su cumpleaños y todos en su trabajo le festejarían, no quise arruinar su momento pero el me dijo que no había problema, me pasó la dirección y me dijo que llegara después de las 6pm, me aliste y tomando valor apesar del nerviosismo salí a nuestra cita, cuando llegue a la dirección no encontré más que algunas cortinas de negocios cerradas y muchos alumnos de una escuela cercana saliendo de sus clases, le marque al sujeto y me dijo que me esperara unos minutos, al paso del tiempo que por cierto me comía el nerviosismo recibí un mensaje diciéndome que me acercara al portón de la escuela, que por obvias razones no mencionaré ningún dato, al irme acercando ví como se abría la puerta y un hombre de estatura baja pero muy bien trajeado salía a recibirme, para tener 67 años se veía bastante bien, me pasó y me explico que el era el director de esa escuela y que había hecho que todo mundo se fuera un poco temprano para poder recibirme, práctica estabamos solos el y yo en una escuela enorme y vacía, me invitó a pasar a su oficina y vacilando pase con pena.

Me senté en un sofá un poco descuidado y empezamos a platicar de cosas banales, hasta que llegó el momento por el que ambos nos moriamos, me tomo de las manos y con una mirada penetrante me dijo que su deseo por conocerme era bastante, en ese instante sentí como el estómago me mariposeaba y no sabía que decir, sin decir nada me tomo de las manos, me paro frente a el y apesar de que era más bajito que yo me tomo de la cara y dándome un fuerte beso me metió la lengua casi hasta la garganta, no podía mover ni un solo músculo, mientras hacia eso puso sus manos en mis pechos y los estrujó y pellizco como el quiso, cabe resaltar que siempre eh tenido tetas más grandes que el promedio, y sin dudar llevando mi playera y se abalanzó sobre ellas, succionando tan fuerte que deje escapar varios gemidos, no podía creer lo que pasaba, me sentía por primera vez en mi vida como si yo hubiera nacido para satisfacer machos cómo ese, sin pensarlo más lo aparte de mis tetas y me arrodille, le desabroché el cinturón y después el pantalón, con esto hasta sus pies lo senté en su silla de director, tome su polla bastante dura entre mis manos y después de varias caricias suaves me puse a darle una tremenda mamada a ese maduro, me trague esa verga tan duro que aquel director solo gemia, me tomaba del cabello largo que tengo y empujaba mi cabeza para que me tragara su trozo lo más que pudiera, no dejaba de babear mientras tenía eso entre la lengua y los labios, bajaba a los huevos y tras succionarlos volvía al tallo para tragarlo con desenfreno, estuve casi 20 minutos repitiendo una y otra vez con mi boca, pero todavía faltaba lo mejor, en ese instante me puse de pie y le di la espalda, baje lentamente mis pantalones hasta que el tuvo una vista de mi culo empinado, no tardó y en ese mismo instante abalanzó su boca en contra de mi ano, abriendo mi culo para que su lengua alcanzará esa parte de mi cuerpo, casi me caigo y solo me quedo recargarme en el escritorio por su brusquedad, yo ya no podía esperar más, moría por tener ese trozo dentro de mi, cómo pude son que el sacará su boca de mi culo alcance un precervativo que anteriormente había dejado en el escritorio, lo abrí y lo puse en su polla, en esa misma posición dándole la espalda coloque la punta de su verga en mi culo, y lo que sentí fue increíble, me empezó a doler el culo y a su vez gemia, poco a poco ese rico trozo iba entrando en mi y no sabía si sacarlo y darle tremendo sentón para que entrara por completo, poco a poco llegue hasta el tope y una vez acostumbrado empecé a darle sentones a mi nuevo papi, yo estaba en el cielo y el ni se diga, entre gemidos y respiraciones fuertes le pregunte si le gustaba su regalo de cumpleaños, y el me dijo que era el mejor que le habían dado ese día, no tardó mucho en qué el se corriera y apenas del condón sentí su chorro y las palpitaciones de su polla, cuando terminó me levanté y ambos nos limpiamos.

Ya que estuvimos a gusto los dos me invitó una rebanada de pastel que le regalaron en la escuela y nos dispusimos a salir, me dijo si quería un aventón y me subió a su auto, me sentí como si ya fuera de el, primero me cogió y me lleva en su auto como la puta que me había hecho ese hombre, antes de llegar a mi casa le pedí que me bajara y nos despedimos, no sin antes el darme un tremendo beso como el primero que me planto, me sonroje y me baje del auto, no sin antes hacerlo prometer que nos volveríamos a ver.